Dear You || Derek Hale [Teen Wolf] (2)

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|| Allison Argent ||

》Scott caminó entre las tumbas. Sosteniendo la carta entre sus manos. Si el hecho de ir a la tumba de Allison ya era doloroso, sus motivos le resultaban, entonces, devastadores.

Largó un saludo suave y trémulo hacia la lápida. Algo reluctante se dejó caer frente a esta, sentándose.

Quería decir algo primero, quizás dar una explicación de qué demonios hacía ahí. Lo que fuera. Sin embargo no halló ni las palabras ni la fuerza para hacerlo.

Se limitó a soltar un suspiro y bajar su mirada del mármol tallado al césped que lo rodeaba.

No tardó en abrir el sobre y empezar a leer. Se dijo que quería acabar con eso rápido, como el dicho: Al mal paso, darle prisa. Pero realmente es que no se sentía en la capacidad de soportarlo. Física, mental y emocional.

Con la hoja desplegada en sus manos, paseó su mirada hacia la tumba y de regreso al papel.

—Esto lo escribió Valeska, antes de... suicidarse—, explicó un poco, su voz desvaneciéndose conforme hablaba, casi incapaz de pronunciar la última palabra.

Como si esta quemara en su garganta, y doliera hasta el tuétano de sus huesos. Como si afrontar la realidad dada por la policía fuera malditamente sofocante.

Tras un suspiro, leyó para ella.

"Allison, querida tu,

Quisiera tener un discurso entero preparado, o algo extenso, lastimosamente debo ser breve.

Fuiste una buena amiga. Siempre intentaste darme tu apoyo, estar ahí para mí, lamento tanto no haber podido hacer lo mismo. Sueño a diario contigo, con el oni, con la espada acabando contigo. Y pienso: Debí ser yo, no tú. Me repito a diario que tal vez si yo hubiera reaccionado, si hubiera hecho algo... tu estarías con vida.

Créeme, habría dado mi vida por la tuya. Una y mil veces. Porque no tolero la idea de perder a nadie. Irónico, ¿No crees?

Siento que es mi culpa. Que debí ser yo, no tu.

También lamento no haber sido la amiga que tu necesitabas, o querías, pero lo intenté. Créeme que lo intenté; espero puedas entenderlo.

Aún así, te agradezco el apoyo y compañía. Todo.

Siempre te admiré. Por tu valor y coraje, por tu deseo innato de defender a tus amigos, por tu valentía -aquí entre tú y yo, Isaac me agrada, pero no es para ti, creo que ese siempre será el pequeño Scotty.

(Scotty, si estás leyendo esto: te quiero)

Como sea, recapitulando. Eso.

Gracias, Allison.

Te extraño, cada día. Y espero poder encontrarnos otra vez algún día.

Prometo volver a verte alguna vez. Y disculparme por todo, mirándote a los ojos.

Te extraño.

Valeska Stilinski."

No estaba seguro de si las palabras le habían golpeado con tanta fuerza solo porque eran destinadas a Allison Argent, o por lo que decía en sí esa carta.

Demonios. Extrañaba a Allison. Extrañaba a Valeska.

Y sabía que no debía culparse por la muerte de ninguna de las dos; pero lo hacía, y se lastimaba a sí mismo con sus propios pensamientos.

Yo también espero que se puedan encontrar, pensó. Que se encuentren bien, en donde sea que estén.

Y con ojos empañados en lágrimas, miró al cielo -no siendo exactamente un fiel creyente- y murmuró en voz baja, trémula.

—Por favor, que estén bien.

-V