"¿Aún romantizaras todo esto luego de que la policia venga y le disparen directamente a la cabeza?"
Los miembros del club de elite son asquerosamente ricos, mimados, irrazonablemente atractivos y hacen cosas horribles solo para su entretenimiento pe...
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-Aqui es.-Dije suspirando mientras frenaba el auto y miraba el gran edificio a mi lado.
Los edificios más altos de Seúl iluminaban por completo el lugar, al menos ahora que era temprano en la noche, pero aquello dejó de suceder mientras las horas pasaban.-A que hora has dicho que debíamos hacer esto?
-Siempre se queda hasta muy tarde en la noche, así que supongo que en la medianoche, si sigue aquí, estará bien.-Finalice mientras suspiraba y me recostaba en mi asiento.-Recuerda que después de todo sigue siendo mi padrastro así que, nada de herirlo o algo así.
-No lo haré.-Hablo aquella voz gruesa, haciendo que me giré a verlo.-A menos que trate de herirte a ti o a mi.
Trague saliva y observé el paquete de galletas en sus manos, tomando está evitando el contacto visual y tomando una para colocarla en mi boca.-Jamás te cansarás de jugar conmigo?
-Crees que es un juego?-Pregunto este y me encogí de hombros.-He sido serio sobre lo que he dicho.
-Acaso no lo era Lee Minho?-Dije divertida y este rodó sus ojos, mientras una sonrisa escapaba de sus labios y miraba por fuera de su ventana. Este abrió sus labios para contestar pero inmediatamente, frunció su ceño cuando vio algo que lo alarmó.-¿Que sucede?
-Que rayos hace Felix aquí?-Dijo el girándose a verme mientras yo fruncía mi ceño y dirigía mi mirada hacia la entrada del edificio.-Deberíamos alarmarnos?
-Diria qué tal vez si.-Dije cuando noté cómo el chico de cabello gris, acomodaba su saco para apenas notar algo plateado brillar en su cintura.
-Que mierda hacemos?-Minho hablo y trague saliva nerviosa.
-Mierda.-El chico de cabello gris había bajado de un auto deportivo y luego de acomodar su atuendo, se dirigió inmediatamente hacia la entrada del edificio que mi padrastro poseía mientras que rápidamente deje el paquete de galletas a un lado y abrí la puerta de mi auto.-Supongo que es mi padrastro después de todo, así que no me queda otra opción más que fingir.
-Y que hago?-El dijo mientras me inclinaba sobre la puerta, el observándome confundido.
-Lo que mejor haces estos días.-Dije sonriendo.-Ve entre las sombras y mantén el perfil bajo. Sígueme y si algo sale mal...
-Nada saldrá mal.-Minho hablo mientras el abría la puerta de su lado y yo cerraba mi puerta.-Hare lo necesario para que no suceda.
-De acuerdo.-Dije asintiendo y luego suspire algo preocupada cuando comencé a caminar hacia el edificio y recordaba el plan de Félix.-Minho!
-Si?-Hablo este mientras yo miraba por sobre mi hombro y suspiraba.
-Solo, asegúrate de que Félix no te vea. Recuerdas su plan verdad?
