Los Elegidos (Karmaland 4) [Terminada]

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Los días habían pasado y por el momento no habían señales de la hermandad oscura, por parte era bueno, no tenían que preocuparse demasiado por el pueblo y se sentían tranquilos, tendrían más tiempo para controlar sus poderes y ser mucho más ágiles. Pero por otro lado, si la hermandad no atacaba significaba muy probablemente que algo grande se avecinaba.

Pero por ahora solo disfrutarían de la gran fiesta que el pueblo había preparado respecto al gran día de Halloween, muchas personas disfrazadas entraban al gran salón donde la música se escuchaba desde muy lejos y algunos pequeños tocaban varias puertas pidiendo por dulces con tiernos disfraces. Los chicos tenían preparado asistir aquella fiesta, estaban invitados y se veía que la pasarían genial. La temática era algo como fiesta de máscaras, ibas disfrazado y nadie sabía quién era el rostros tras tu disfraz, todo muy misterioso, aunque las personas que quisieran podrían asistir con sus respectivas parejas si así lo querían.

Los chicos entraban a la gran discoteca con sus disfraces, Luzu iba vestido de la muerte con espectacular maquillaje de calavera en el cual Lana le había ayudado, Auron iba con un maquillaje de payaso espectacular, Vegetta vestía como Jaison con su típica mascara tan representativa del disfraz, Mangel vestía como zombie, Lolito iba vestido de espantapájaros donde su maquillaje terrorífico y lentillas eran el mejor toque, Rubius vestía de marioneta, Alexby iba de brujo pero llevaba el sombrero encima de su casco, Willy iba vestido con la típica mascara led de la película de la purga mientras su ropa iba manchada de sangre falsa y Fargan iba con un gran maquillaje de saw. Todos sus disfraces eran terroríficos y con un gran trabajo detrás, los chicos se veían espectaculares y sin duda espeluznantes.

—Señor.— Hablo Auron en un tono coqueto vistiendo un traje de colores entre morado, rojo y blanco sobre su sueter que siempre solia llevar, toda su cara iba de blanco, tenia lineas moradas debajo y encima de sus ojos, su boca pintada con una gran sonrisa pero lo que hacia aun más perfecto su maquillaje era esa sensacion de que estaba a punto de borrarse aunque no lo fuera. El pelinegro se dirijio hacia el chico vestido completamente de negro y con una guadaña en su mano derecha, Luzu volteo a verle indiferente mientras tomaba de su trago.

—Auron, ¿Que sucede?.— Hablo Luzu nuevamente y Auron dio un paso al frente quedando más cerca de el.

—¿Sigues celoso, mi niño?.— Hablo Auron con una sonrisa acompañado de un toque de burla pero su tono de voz era coqueto y provocativo, cosa que a Luzu le estaba poniendo nervioso haciendo que viera a cualquier otro lado excepto al pelinegro que tenia en frente.

—¿No hablas?.— Volvió hablar en pelinegro tomando a Luzu de la cintura pegándolo a su cuerpo.

—Auron, basta.— Hablo Luzu sonrojado pero por suerte este no era notado gracias a su maquillaje.

—¿Por que me detendría?, se que te encanta.— Hablo el pelinegro comenzando a dejar pequeños besos en el cuello del castaño quien estaba hecho nervios.

—Sabes que solo tengo ojos para ti mi niño y para nadie más.— Menciono Auron separándose del cuello de Luzu haciendo que por fin el castaño volteara a verle.

—¿Lo prometes?.— Hablo Luzu a lo que Auron solo asintió y con una sonrisa el castaño rodeo el cuello de su pelinegro plantando un suave beso en sus labios. 

(...)

—Jum, melosos.— Hablo el de cabellos blancos quien miraba hacia la pareja de hace un momento mientras bailaba junto al de ojos morados.

—No te quejes que tú también eres como un turrón de azúcar.— Hablo divertido el de ojos morados dejando un beso en los labios del chico vestido de marioneta haciendo que soltara una suave risa.