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   La lluvia no paraba y el cielo no se despejaba, era un día perfecto para dormir y no hacer tareas. Sin embargo, al ser un omega con padres estrictos a los cuales enorgullecer le impedía hacer lo que tanto anhelaba.

   Park Jimin es un Omega de diecisiete años quien "rompió" una tradición familiar y ahora debía hacer un esfuerzo mayor para salir adelante por si mismo. Al romper dicha tradición su familia decidió no dejarle herencia alguna y dictando en un contrato que al cumplir los dieciocho años cambiaría su apellido y no sería parte de la línea de empresas que dicha familia poseía.

   Jimin se dirigió a su baño privado y comenzó su aseo cómo de costumbre, colocándose todo tipo de cremas para mantener su rostro libre de acné y mantener su piel hidratada, luego comenzó con sus deberes escolares, no quería que su padre le diera una paliza por bajar sus calificaciones ya que no quería mantener a un "vago y fastidioso" omega después de su mayoría de edad.

   En cuanto su trasero tocó la silla de su escritorio su madre asomó su rostro, Jimin la observó durante unos segundos hasta que decidió romper el incómodo silencio.

—¿Que necesitas madre?

—Solo venía a revisar que estuvieras haciendo tus deberes, tienes que hacer algo para enorgullecer a la familia — Dijo la omega. Jimin ya estaba algo acostumbrado al trato que recibía de su familia, sin embargo el dolor continuaba amarrando su corazón cada vez que decían comentarios como estos al punto de querer llorar y gritar.

—Lo sé madre —Jimin bajó la cabeza, sin embargo no se permitió liberar las feromonas que amenazaban con salir disparada. Su lobo se había sentido herido y debido a esto quería provocar que la Omega supiera la manera en que lo había hecho sentir.

—También quería avisarte que empaques tus cosas, en unas horas nos vamos a las islas Jeju para firmar un contrato de las empresas, solo estaremos allá hasta mañana. —Dijo la madre omega de Jimin formalmente, pues era rara la ves que la familia se tuteaban entre sí.

—De acuerdo madre, lo haré cuando termine mis deberes, solo me mandaron tareas de dos asignaturas. —Le dejó saber el Omega a su progenitora la cual asintió en acuerdo y se alejó, cerrando detrás de si la puerta de la habitación de su hijo mayor.

   Jimin dejó salir un suspiro cansado que sintió haber retenido por mucho tiempo mientras hablaba con su madre. Por lo menos pasaría tiempo fuera de esas cuatro paredes y recibiría calma con el olor a sal de la playa y calma de las olas del mar.

   En la familia Park había una tradición, está consistía en que el primer hijo ya fuera mujer u hombre debía ser alfa y en un futuro hacerce cargo de las empresas que poseían, pero como ya hemos mencionado antes, al no cumplir con dicha tradición el Omega era desheredado y era obligado a cumplir con un contrato el cual consistía en cambiar su apellido, además de ser hechado de su casa al cumplir la mayoría de edad.

   Jimin terminó sus deberes en tan solo minutos y comenzó a alistarse para irse, solo llevó lo necesario pues solo estarían un dos días, así que no se llevaría muchas cosas, solo dos cambios de ropa, por si acaso, su neutralizador de olor, pastillas para el celo, un traje de baño, su cargador, bloqueador solar y su teléfono.

   Al cabo de unos minutos una de las sirvientas le dejó saber a Jimin que ya podía bajar para partir.

   El Omega bajó encontrándose con su familia frente al porche de la enorme mansión, para luego adentrarse a la guagua negra blindada con vidrios completamente polarizados. Durante todo el camino hubo un silencio cómodo para Jimin quien iba leyendo uno de sus libros favoritos.

   Cuando llegaron al aeropuerto puerto los dejaron pasar por una zona V.I.P. Para pasar a su jet privado y luego partir de Seúl. Siguieron las instrucciones y se fueron subiendo poco a poco en el Jet blanco del padre de Jimin.

   Las horas pasaron casi tortuosamente, a Jimin le encantaba viajar, sobretodo a las islas Jeju, la playa le traía paz. En cuanto llegaron a las cabañas se acomodaron cómo de costumbre . Jimin iba en la habitación más lejos de todas y la de sus padres y su hermano menor Jungkook estaban una al lado de otra.

   A Jimin le importaba poco, pues ya estaba acostumbrado a la preferencia que le tenían a su hermano menor por ser un alfa hecho y derecho. Aunque a veces le molestaba.

   Las horas pasaban y Jimin estaba en la cabaña mientras sus padres estaban firmando papeles para formalizar el contrato con las otras empresas y claro, se llevaron a Jungkook para que éste aprendiera ya que el sería el heredero de las empresas de sus padres.

   Había caído la noche y su madre llegó junto a Jungkook, sin embargo su padre se había quedado 'divirtiéndose' con sus futuros socios.

Padre de Jimin

   Cuando terminaron de firmar los documentos para completar el contrato los nuevos socios de las empresas Park habían planeado ir a 'divertirse'. Todos tenían en mente apostar, sentían la adrenalina como placer, y el saber que alguien tendría buenas ganancias para su bolsillo se sentían de una manera inexplicable.

   Al cabo de los minutos los alfas se dirigieron al casino más cercano, dando por comienzo las apuestas.

   El joven Min iba ganando, dejándo al señor Park casi sin fichas, y lamentablemente no había llevado el suficiente dinero esa noche para pagar lo que proponía para la próxima apuesta, así que tomando una 'sabía decisión' decidió rendirse.

—Lo siento joven Min, pero no puedo pagar tal cantidad de dinero, pues no creí que fuera necesario traer tal cantidad, puedo pagársela mañana en la noche.

   Sus colegas comenzaron a susurrar cosas mientras el alfa antes mencionado observaba a Park de una manera amenazadora y fría, mientras dejaba que sus feromonas dieran a entender el estado de molestia en el que se encontraba. Park hizo una reverencia a manera de disculpa, sin embargo Min se paró de su lugar de manera estrepitosa asustando así a todos los presentes, incluyendo a Park.

—Lo lamento señor Park, pero las apuestas se pagan aquí y ahora—. Aterrorizado Park salió del lugar, su respiración se vió afectada debido al ataque de nervios que estaba por sufrir. A pesar de ser un alfa ya era algo viejo para un enfrentamiento, además de que la jerarquía del alfa Min es tres veces mayor a la del señor Park.

   El alfa Park decidió ir a su cabaña pera tranquilizar a su esposa y pensar en lo que haría en la mañana, después de una ducha para calmarse se metió a la cama junto a su Omega cayendo en los brazos de Morfeo.

Pero como dijo Min, las apuestas se pagaban el mismo día..

✨𝙃𝙚𝙧𝙢𝙤𝙨𝙤 𝙎𝙚𝙘𝙪𝙚𝙨𝙩𝙧𝙤✨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora