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—Park Jungkook, su hermano está estable. Sin embargo tuvimos que sacarle un pulmón debido a que había sido perforado, y lo felicito, el Omega está en cinta.

A Jungkook esa última noticia le cayó como un balde de agua fría, ¿Jimin embarazado? ¿De su secuestrador? Debía ser una maldita broma.

—¿Cu-cuantas semanas tiene doctor? —Preguntó con terror el hermano del pequeño Omega, temiendo por la respuesta.

—El Omega tiene unas 2 semanas, si eso es todo me retiro. —El doctor se retiró del pasillo con una tabla en manos, y cuando éste estuvo lo suficientemente lejos Jungkook se desplomó en su asiento y comenzó a llorar en silencio hasta que llegó su familia.

—¿cómo está el? ¿Cómo está Jimin? ¿Jungkook? —Su madre le hacía preguntas preocupadas, era extraño ver a su hijo menor en ese estado, con sus ojos llenos de lágrimas y jadeando de manera tan ruidosa. Estaba teniendo un ataque de pánico.

—Ji-Jimin e-el es-esta en.. está en cinta —La pareja que los había traído al mundo abrieron sus ojos y se miraron a lo que su madre comenzó a llorar. La probabilidad de que Jimin había sido violado era alta, y la probabilidad de que cayera en depresión era mucho más alta.

—No puede ser..

1 semana después
Mamá.. Jimin lleva internado una semana y no despierta.. —Dijo Jungkook con lágrimas en sus ojos, no soportaba ver a su hermano en la camilla de un hospital sin abrir sus hermosos ojos.

—No te preocupes cariño. Cuando el doctor venga a hacerle el chequeo le preguntamos la razón —Jungkook asintió mientras reposaba su cabeza en el hombro de su madre, mientras tanto el padre de Jimin caminaba da un lado a otro comiéndose las uñas por la ansiedad, a pesar de todo era su hijo mayor.

—Papá, ¿cómo está Yoongi? —Preguntó Jungkook. Su padre lo miró lleno de angustia, pues a Yoongi no le bajaba la fiebre y últimamente su estado anímico no era el mejor.

—El.. esta-

—Señor y Señora Park —Interrumpió el doctor— Jimin necesita que traigan a su alfa de inmediato. Puede que jamás despierte si el olor de éste no se encuentra cerca.

—Pero doctor —Llamó Taemin— El está con fiebre y no le baja —Mencionó el padre de Jimin.

—Por está simple razón. En los estudios salió que Jimin ya tenía una marca y en contra de su voluntad otro alfa lo marcó. La marca es reciente tal ves de una semana.

Todos se miraron entre sí y Jungkook decidió romper el silencio diciendo que el traería a Yoongi cueste lo que le cueste, y con esas palabras salió del hospital para buscar al alfa de su hermano. Esta situación iba de mal en peor.

—Iré a ver a Jimin —Dijo su madre. No importaba, ella quería asegurarse de lo que iba hacer. Si su hijo no despertaba jamás ella quería al menos despedirse.

Abrió la puerta lentamente encontrándose con el cuerpo dormido de éste y con un parcho en su lado izquierdo. Tenía una intravenosa y el monitor de signos vitales conectados y éste estaba conectado a una máquina de oxígeno que le ayudaba a respirar. Su madre al ver el estado tan vulnerable de su hijo comenzó a llorar. Su olor no se sentía, tenía una gran posibilidad de que jamás lo volvería a escuchar ni tampoco volvería a ver esa hermosa sonrisa que siempre mantenía en su hermoso rostro. En su lugar no había expresión alguna, en la habitación solo se escuchaban los débiles latidos del corazón de Jimin y el ambiente era uno muy triste. Sin más rodeos la madre dejó caer sus lágrimas manchando con ligereza el suelo, chocando con la triste realidad.

—Jimin~ mi bebé —Dijo Jennie con voz rota. Estaba asustada, molesta, herida y sobretodo rota. Jamás pensó que el trabajo de su esposo terminara trayendo tantas tragedias, sentía coraje hacia el, sentía odio y repulsión por la persona que le hizo tremenda atrocidad a su hijo, estaba preocupada por que cada día su familia se iba rompiendo más y más, y por último se sentía rota porque siente que le están quitando un pedazo fundamental de su alma y corazón.

Antes de que pudiera decir otra palabra la puerta fue azotada con un Yoongi alterado quien se acercó a su omega asustado.

—Jimin, ¡Jimin por favor abre los ojos! Esto no es un juego por-por favor —Yoongi cayó de rodillas al suelo y Jennie le ayudó a levantarse para sentarlo en la silla que ella se encontraba anteriormente.

Yoongi estaba destrozado, tenía horribles ojeras bajó sus ojos, su olor era tenue al igual que el brillo en su cabello, estaba más delgado y sin mencionar la horrible fiebre que tenía y negaba dejarlo.

La madre de Jimin los dejó solos y éste simplemente tomó su mano y comenzó a darle mimos, lo necesitaba, se necesitaban más que a nada. Jungkook le había contado todo por el camino y le había contado que su olor lo haría despertar, sin embargo el no lo creía suficiente. Sin importar si ambos morían clavó sus colmillos en la inflamada herida en el cuello de su omega y comenzó a lamer después de haberle dejado nuevamente su marca.

Rápidamente sintió lo que Jimin sentía en ese momento, de pronto su olor comenzó a hacerse más notorio haciendo que llegara a las fosas nasales de su omega y éste lentamente comenzó a abrir sus ojos.

—¿Yoongi?

Ya estamos llegando al final!! Están list@s???

✨𝙃𝙚𝙧𝙢𝙤𝙨𝙤 𝙎𝙚𝙘𝙪𝙚𝙨𝙩𝙧𝙤✨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora