Taehyung al ver que a su crush de toda la vida ya le quedaba solamente un año para irse del colegio, decide mandarle cartas diciéndole lo que siempre quiso decir, firmándolas con un seudónimo misterioso pero preciso.
Hasta ahí, todo bien, todos con...
Taehyung sentado en la cafetería y sin saber que hacer, ve como Jimin está pegando panfletos por todas las paredes y también entregándoselos a compañeros que pasaban por al lado suyo. Los panfletos con una imagen de "Se busca" de mala calidad y en el cuadro escrito "Nadie" que le daba la impresión de que fue hecho a la rápida por Paint con las nulas capacidades de diseño del rubio, le estaba atormentando desde que salió de su casa. El de cabellos negros con unos rulitos bien tiernos suspiró, buscando con la mirada a sus dos amigos y en especial a Yoongi, ya que como él lo metió en el problema, él tenía que sacarlo rápidamente de ahí.
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Taehyung sabía que era una pésima idea, el mandarle cartas a Jungkook sabiendo la popularidad del chico y que obviamente iba a querer averiguar quién era la persona. El pelinegro pensaba que firmando por un pequeño seudónimo ya las 4 cartas que le había dado a lo largo del año, el tema iba a quedar hasta ahí. "Nadie" era un nombre genial, misterioso pero preciso porque daba a entender que no quería decir su nombre real... eso si, Taehyung nunca tuvo previsto que Jimin, su vecino de enfrente y mejor amigo de su crush de toda la vida, iba a estar metido en el tema. Así que en vez de culparse a si mismo por no ser lo suficientemente valiente debido a su timidez al no firmar con su nombre, prefería culpar a Yoongi ya que él fue quién le dio la idea.
¿Es culpa de Taehyung que sea tímido? No, es culpa de Yoongi. ¿Es culpa de Taehyung que Jimin sea tan curioso por naturaleza? No, es culpa de Yoongi. ¿Es culpa de Taehyung el calentamiento global? ¡Claro que no! Es culpa de Yoongi.
Bueno... a lo mejor se estaba pasando un poco. ¡Pero alguien debía de tener la culpa! Y obvio que no se la iba a echar a si mismo, no era tan tonto.
—Hola Romeo —La voz clara de Yoongi se hizo presente, el pelinegro subió su mirada y le frunció el ceño. Hoseok, al lado del de baja estatura solamente rio al ver la expresión de un pequeño tigre que no podía ni pisar a una hormiga porque "¡Tiene familia, Hobiii!" queriendo intentar verse amenazante. Ambos se sentaron en la mesa... bueno, en la silla, da igual—, ¿Por qué tan de mal humor, poeta enamoradizo?
—¡¿Has visto lo que anda pegando Jimin en todos lados?! —Exclamó en susurros. Taehyung apenas vio los panfletos que su vecino cargaba cuando ambos iban de camino al colegio, lo único que quería era agarrar a Yoongi... agarrarlo a golpes.
—¿Y acaso eso es mi culpa? —El de cabellos blancos ni se inmutó a la mirada enojada de su mejor amigo, simplemente con toda la paciencia del mundo sacó su pancito con jamón y queso y un juguito para poder desayunar como corresponde. Hoseok miraba divertido al par, eran situaciones en donde mejor era testigo por si ocurría un asesinato en plena cafetería del colegio.
—¡Claro que sí! ¡Fue tu idea de mandarle cartas a JK! —Bueno... quizás no era tan ingenioso llamar al susodicho con sus iniciales, pero era Taehyung, que más se le iba a hacer.
—En mi defensa, imbécil, te dije que le hablaras directamente, cara a cara, no mandándole cartas como si tuvieras 10 años. O mínimo un mensaje de texto, ¿en qué años crees que estamos? ¿1800?
