Yandere!Twisted Wonderland x Fem!reader [Horror-shots, escenarios, etc.]

Idia Shroud. (Pedido 3)

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Para: Flowers_And_Coffee_

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-Conozcanse bien y disfruten el día.

Ví como mi padre salía de la sala con la familia Shroud y cerraban la puerta para dejarnos solos a nosotros dos, en aquella sala de tonos azul eléctrico con paredes blancas y agregados grisáceos. Sabía que tenía una presencia detrás de mi observarme con nerviosismo más no me presté para voltear, estaba estática frente a la puerta en lo que retomaba mi postura.

Yo no quise esto, pero bien. Ni mi madre pudo con mi propio padre para dejarle en claro que ya tenía que tomar mis propias decisiones.

Y ahora estoy acá frente a mi prometido, futuro esposo de compromiso y por si fuera poco la persona con la pasaré el resto de mi vida en una sola casa para nosotros. ¿Qué pasó con todos esos sueños que tenía en mente desde que comencé a pensar por mi cuenta? A la basura.

El chico notó mi tensión, la estaba creando con tal de mantenerlo alejado por mi gran incomodidad pero no tenía otra opción más que estar ahí y conocerlo. Si no, mi padre no podría tener esa colaboración en su compañía con la familia de Idia.

-Y bien... -Comencé a voltearme lentamente hasta quedar frente a frente. Mi rostro a diferencia de lo nervioso que estaba él y sudando, era de una actitud fuerte y con remordimiento. El cual trataba de ocultar.- Mi nombre es ___, aunque ya lo sabes. Un gusto. -Me acercó y le extiendo la mano.

-U-un placer también, señorita ____. -Tomó mi mano con debilidad, ésta estaba sudorosa y me limité a hacer algún gesto.- S-soy I-idia Shroud, pero puedes d-decirme I-idia solamente...

-Deacuerdo. -Suspiro para mí misma y me siento en el mueble de terciopelo suave.

Esa tarde pasamos charlando de cosas que pasaron de formales a informales. Al principio me mostré bastante seria e indiferente, pero conforme pasaba el tiempo fui abriéndome un poco más a mi forma de ser llevada y a soltar una que otra broma sarcástica. Eso pareció haberle agradado, noté que él también comenzaba a ponerse cómodo y se dejaba llevar con las anécdotas. Hasta que llegó la hora de irme y nos despedimos ya como "amigos" si se puede decir así.

Luego de aquello, comenzamos a textearnos esperando el día de la boda en lo que nuestras familias se acomodaban. Pudimos aclararnos un poco más, ahora nos conocíamos más de lo poco que sabíamos del otro cuando se nos avisó que nos comprometerían. Sin embargo, yo aún tengo mis dudas. Yo no quiero casarme y no le he preguntado a él si quiere, por respeto ninguno había tocado aquel tema y creo que ya era hora de hablarlo.

Necesitaba quizás ponerle un alto a esto ya armada de valor.

Esa noche le pedí su opinión y me dijo que él se sentía tranquilo. No tenía tanto problema debido a que le agradaba el tipo de persona que era, porque no lo juzgo y comparto gustos que Idia tiene. También pidió mi opinión y fui sincera diciendo que no estaba del todo de acuerdo ya que aún somos jóvenes para un compromiso como éste.

En ese entonces dejó de escribir y tardó cinco minutos exactos en responder. No quise pensarlo, ni pedirle que responda rápido ni nada para apresurarlo. Supuse que lo puse en duda y qué mejor para poder enfrentarnos ambos con nuestros padres.