Después de tan conmovida despedida Rin solo podía sonreír por tan gran alegría que sentía al regresar a mí lado, pero yo me limitaba a verla como caminaba felizmente mirando de un lado a otro, arrancando flores que se encontraba a su paso, mientras que yo... bueno no me dejaba de preguntar porque es que me sentía tan alegre, tan feliz de tener a Rin a mi lado como en los viejos tiempos.
-Rin –suspire y me dije con tono serio en mi mente- has crecido y madurado mucho desde la última vez que te vi pero... no entiendo el hecho de que me dejaras de llamar, a caso ya no desea hablar conmigo... ¿pero qué diantres estoy diciendo? Ella debió de tener sus razones para hacerlo pero ¿Cuáles fueron?
-El señor Sesshomaru debe de estar enojado por lo que le hice, el dejarle de llamar –se dijo en su mente con un tono de preocupación- Sera mejor comprobarlo pero tengo un poco de miedo... No, no es momento de tener miedo además el nunca me haría daño... –respiro profundo y se armo de valor para realizarme tal pregunta que me tomaría por sorpresa puesto que yo me encontraba perdido en mis pensamientos- Am señor Sesshomaru –me dijo con una voz tímida- ¿Podría preguntarle algo?
-Eh dime –dije prestándole toda mi atención.
-Ah... esto... pues me preguntaba si ¿está molesto por dejarle de llamar? qué si está enojado conmigo... -dijo tímida con la mirada baja.
Esa pregunta me tomo desprevenido, no podía creer que me estuviera preguntando eso aunque ciertamente si estaba un poco molesto, pero jamás me podría enojar en verdad con mi pequeña protegida pero yo estaba dispuesto a conseguir respuestas así que le conteste con otra pregunta.
-¿Por qué dejaste de hacerlo? –Pregunte con un tono serio- maldita será soné muy obvio. –me dije a mí mismo.
-Señor Sesshomaru es que vera –dijo temerosa-no quería causarle problemas ni molestarlo... creí que le molestaría que le llamara todo el tiempo, así que creí que lo mejor era...
-No estoy molesto contigo. –dije interrumpiendo sus palabras con una voz indiferente.
-Me alegro –me dijo mientras me daba una gran sonrisa- ah, por cierto ¿Dónde se encuentra el señor Jaken?
-En el palacio del Oeste.
-¿Palacio? –Dijo confundida— ¿Cuál palacio señor Sesshomaru?
-Tú ya has estado en el –la mire fijamente a los ojos.
-¿En serio? no lo recuerdo –dijo confundida.
-Fue en uno de nuestros viajes en busca de Naraku en el cual tú enfermaste y te lleve al palacio del oeste para que te atendieran...
Flashback
Todo estaba tranquilo y silencioso hasta que un pequeño sonido de un estornudo rompió ese silencio al mirar de donde provenía aquel sonido que rompió el silencio me di cuenta de que era mi pequeña protegida la que había estornudando, la cual estaba completamente colorada, sudorosa, cansada y desanimada. Al acercarme para descubrir que era la que le sucedía a mi protegida (que normalmente estaría activa, sonriendo, riendo, jugueteando y cortando flores pero que en esta ocasión hacia todo lo contrario) toque su frente percatándome que tenía una fiebre muy elevaba causando que esta se desmayara. Tome a la pequeña en mis brazos sin saber a dónde ir hasta que me llego a la mente un lugar que no se encontraba muy lejos de donde me encontraba, un lugar que el que podrían atender a mi pequeña Rin. Salí volando rápidamente sin importarme dejar atrás a Jaken ni a Ah-Un. Salí disparado transformado en una bola de energía a toda velocidad en dirección al palacio del Oeste.
-Maldita sea, tengo que apurarme la fiebre de Rin está aumentando, tengo que llegar lo más rápido posible al palacio... después de todo ese palacio le perteneció a mi padre y aunque aun no eh tomado su puesto puedo ir cuando yo quiera; ahí recibirá la mejor atención medica. –me dije en mi mente realmente preocupado por el bienestar de mi pequeña.
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Sentimientos ocultos: un trágico amor
FanfictionYa han pasado seis años desde que el equipo de Inuyasha mato al despreciable de Naraku. Muchas cosas pasaron. Sesshomaru dejo a la pequeña Rin en la aldea al cuidado de la anciana Kaede y el se dispuso a tomar su puesto como daiyoukai de las tierras...