𝑴𝒊 𝑽𝒆𝒄𝒊𝒏𝒐 𝑷𝒆𝒍𝒊𝒓𝒓𝒐𝒋𝒐 ❥︎ Eijiro Kirishima x Lectora

Capítulo 17

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Día del
Campamento
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Todos hablaban animadamente en el autobús de la U.A. mientras Aizawa moría por dentro. Por tu parte, te había tocado sentarte junto a Koda, y ya que él era callado y tú no tenías ganas de conversar, pasaron todo el viaje en silencio.
No preguntaste de dónde había salido un conejo, pero cuando éste, reposando sobre el regazo de Koji, te olisqueó la mano, te fue imposible no derretirte ante la adorable criatura.

Poco más de viaje después, arrivaron a su destino, descargaron sus maletas y fueron arrojados a un bosque a luchar con monstruos de barro. Lo típico.

"...Odio cada decisión que he tomado en mi vida porque me han llevado a estar aquí ahora" .

Sacándote de tus pensamientos, el monstruo elevó su puño para golpearte, a lo que abriste la palma de tu mano, interceptando el puñetazo. Activaste tu quirk apenas entraste en contacto con el ser de tierra, causando que éste se contrajera hasta formar una bola de barro. La fuerte presión que se ejercía en la bola hizo que explotara, ensuciándote.

-¡_____-chan!- escuchaste el grito de Mina- ¡Aquí!

Corriste hacia ella, quien juntó sus manos para que tú las usaras de escalón para impulsarte por el aire, y estampar tus manos en otro monstruo, haciéndole lo mismo que al anterior.

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Al rato, todos los de la clase A salieron del bosque cubiertos en lodo y sudor, llegando por fin a las cabañas.
Un olor más inmundo que los otros llegó a tu nariz, por lo que volteaste hacia su origen.

-No jodas Denki, apestas a zorrillo, necesitas un baño- dijiste cubriéndote la nariz.

-He he- atontado por sobrepasar su límite de voltios, Kaminari levantó los pulgares mientras una línea de saliva escurría por el costado de su labio.

-Lo sabe- dijo Sero, metiéndose a la conversación.

-Fiu fiu fiu - continuó Kaminari.

El dolor en tus manos, que gradualmente se extendía hasta pasar las muñecas, te distrajo de la conversación.

-M-mierda...- tus manos ya empezaban a temblar por el dolor de las contracciones, y se te hacía difícil mover los dedos- M-me había olvidado q-que esto pasaba.

Hace tanto que no agotabas el uso de tu particularidad que no habías rozado un punto mayor a las pequeñas molestias que no llegaban a ser contracciones serias de los músculos, y habías estado tan perdida en todo el tema con Eijiro que te habías olvidado de entrenar, por lo que no tenías estos efectos desde hacía mucho tiempo.

-Ey, ¿estás bien?- preguntó Hanta notando tu estado.

-S-son los efectos de mi kosei. N-necesito una pastilla o algo y ya.

-¡Aizawa-sensei!- levantaste la mirada de tus manos para ver a Mina gritándole al profesor- ¡_____-chan necesita una pastilla!

-No podemos darles drogas, son menores de edad- respondió Shouta sobándose la sien.

-¡Eso no!- exlamó- Las que son para calmar las contracciones de su quirk- continuó Ashido.