¿QUE ESTOY Que? TERMINADA

Cap. 11

Después de secar las lágrimas de Ritsu, Takano desvió su camino al edificio de sus departamentos al centro comercial.

-¿Eh? Takano-san ¿A dónde vamos?-pregunto Ritsu sin comprender-por ahí no es el camino a casa.

-… ¿Qué es eso de "Takano-san"  ya me habías dicho "Masamune", ¿Qué te cuesta decirlo ahora?- le dijo viéndolo de reojo- ya verás a donde vamos, no te impacientes. 

-… si- dijo convenciéndose y sumiéndose en el asiento del copiloto.
Y siguieron el camino hasta el centro comercial en total silencio, Ritsu con sus pensamientos y Takano con los suyos, hasta que al fin llegaron.

-¿eh? El centro comercial… ¿para qué?-pregunto Ritsu mientras seguía a Takano

- ¿no es obvio?, para comprar las cosas para las niñas-dijo mientras sacaba un carrito de compras- apresúrate y piensa en que lo que necesitaran.

-eeeh,  pero T… Masamune, apenas tengo 4 meses, no van a nacer mañana ni nada por el estilo, aun les faltan 5 meses- dijo tratando de tranquilizar a su paranoico esposo.

-no importa, no quiero andar corriendo después- dijo jalando el carrito y llevándolo dentro del enorme edificio.

Comenzaron viendo de una buena vez que iban a comer, siguieron y entraron al departamento de bebes, Takano daba tumbos de aquí para allá viendo la ropita, los pañales, la leche, en fin todo lo que se le pusiera en frente, mientras Ritsu se detuvo viendo un hermoso peluche gigante, era realmente lindo, era de un color café claro con un moño en el cuello de puntos rozados en un fondo blanco y abrazando a un pequeño osito de felpa entre las patitas, de repente desapareció de su vista y volteo a ver lo que causo su desaparición y no era nada más ni nada menos que Takano, quien había metido el oso gigante al carrito de compras.

-eh, Masamune no es necesario que lo compres.

-si te quedaste embelesado viéndolo quiere decir que de verdad lo quieres, además es muy lindo. Creo que le gustaría a las niñas ¿acaso no piensas lo mismo?- dijo acomodando el peluche  viendo a Ritsu.

-si… eso creo… eh, pero Masamune- dijo viendo al carrito- a pesar de que llevas dando vueltas todo este tiempo, no has subido nada más que el peluche y un paquete de pañales.

-Bueno… es que no sé nada de niños y ¿Qué querías? –reprocho con la mano en la frente el más alto. 

-aah, ¿por qué mejor no lo hacemos los dos?- dijo Ritsu quien al fin iba a ayudar.

Terminando de decir esto Ritsu se encamino a lo más profundo del departamento de bebes y vio un montón de cosas que Takano le traía, pero él a la gran mayoría le decía que no, ropa no compro mucha, ya que no eran muy lindas a su parecer y compraron lo principal que era el porta bebes y este era de lo más lindo y hacia juego con la carriola, los porta bebes eran como cualquier otro en la estructura, la parte que sostendría al bebe, la agarradera y el gorrito para cubrirlo [N/A: su techo quizás?(quemacocos según mi hermana jajaj xD)] era de un color chocolate con puntitos rosas muy lindo. Mientras la carriola era de igual color pero con franjas en vez de puntos, era del tipo que se usan para los gemelos o para dos bebes, es decir, una frente a otra, con los cinturones de seguridad y sus canastitas debajo de la carriola, bueno, las gemelas Takano tendrán mucho estilo.

-mmm… ¿tu crees que este vestidito les quede bien?-pregunto el paranoico de Takano.

-yo creo que si… pero a todo esto… ya llevamos muchas cosas, no creo que sea necesario más.

-claro que lo es, son niñas, gastan mucho, deberías entender el alma de una mujer.

-¿Qué con ese espíritu de Shoujo?-dijo Ritsu un tanto sorprendido y entre dientes.

-bueno, yo solo trato de entender.

-… si si, pero Masamune, no crees que ya deberíamos irnos, ya es un poco tarde… y las piernas me están matando- dijo viendo sus pies.

-de acuerdo...

Y con eso pagaron y llenaron la cajuela y los asientos traseros del carro de Takano con las cosas y más cosas para bebes, para después llegar a casa cansados, se bañaron juntos, con unas que otras quejas de Ritsu, comieron, y agotados por todo se fueron a dormir.