Cap. 10

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Ya han pasado 4 meses del embarazo de Ritsu, como saben, cada mes una mujer embarazada debe hacerse un chequeo mensual y Ritsu no era la excepción, por más hombre que este fuera.

Entraron al consultorio, hicieron lo mismo que la última vez, claro, esta vez Ritsu no estaba desmayado, al contrario, estaba más que despierto y estaba nervioso, muy nervioso, la verdad, más que la primera vez, en aquella ocasión estaba más aterrado que ansioso, deseaba saber que iba a ser, niño o niña, pues por lo que él había buscado, a los cuatro meses te pueden decir lo que será, claro, no era el único ansioso, el padre del futuro recién nacido estaba más que ansioso, lo esperaba más que nada, claro, era su hijo o su hija.
Por la mente de Takano pasaban las mismas cosas una y otra vez, si era niño, le enseñaría... cosas que hombres hacer, trabajar duro y más trabajo duro, si fuera niña, sería su niña mimada, sería la hermosa niña de papá, si, la consentiría y ¿a quién se parecería? ¿A él? ¿A Ritsu? No importaba, él la o lo amaría más que a nadie y lo protegería con su alma, si, lo cuidaría, lo amaría y a su padre Ritsu también, serian la familia más feliz, si, la más feliz de todo Japón y el mundo.

La de Ritsu estaba un poco estropeada, en su mente paso el nombre ya sea niño o niña, pero los desechaba por razones que ni el sabia, ¿de ahí que ropa debería comprarle?, ¿cómo se bañan a los bebes?, ¿qué cuidados debería tener?, ¿cómo iría a trabajar?.... cierto ¿con quién lo dejaría? Comenzó a preocuparse, más y más, hasta que Takano se dio cuenta y le tomo la mano con fuerza dándole seguridad, de que él lo apoyaría en lo que viniera en el futuro.
-ooh- exclamo Nowaki que había decidido ser el médico que llevara la revisión de Ritsu - al parecer es una niña... esperen...- dijo mientras movía el aparato, pues le pareció ver algo extraño.

-¿sucede algo doctor?- pregunto Ritsu con un notable tono de preocupación.

-aaah no es nada malo en lo más mínimo, es solo que- dijo visualizando una vez más la pantalla.

-entonces ¿qué sucede?- pregunto Takano.

-enhorabuena son gemelas- dijo sonriendo a los futuros padres de gemelas.

-... ge... gemelas- alcanzo a balbucear Ritsu, pues el solo esperaba un nombre en el que pensar, un niño o niña en el cual preocuparse, en el cual cuidar... ¡pero dos! ¡DIOS! No estaba preparado, bueno nunca lo estuvo, por su parte Takano estaba muy alegre, tanto que paso de solo sostener la mano de Ritsu a darle un completo abrazo, tirando casi a el pobre de Nowaki que solo hacia su deber de doctor, estaba feliz, emocionado y feliz, ya no iba a tener que asaltar por las noches a Ritsu solo para tener a un hijo, ahora lo asaltaría sin razón aparente más que amor, si, nada más que puro y puro amor.

Nowaki solo rio ante el acto que hizo Takano y la reacción tímida (más bien tsundere) por parte de Ritsu, le recordaba cuando él se enteró de que tendría a Kiyoshi, fue un día hermoso, uno para recordad, tanto que quería otro hijo pero Hiro-san no parecía muy de acuerdo, pero bueno, así lo amaba y así eran felices.

- espero que se lleven con mi hijo cuando crezcan ¿ne?- dijo mientras le sonreía al estómago de Ritsu y posteriormente volteaba a verlo a este y a Takano- bueno espero que las cuiden bien y si les ocurre algo a las dos, no duden en venir con migo- dijo estrechando la mano de Takano.

-claro, así será- dijo mientras correspondía el estrechamiento de manos y posterior mente tomaba las radiografías de sus hijas en diferentes perspectivas, la miro con detenimiento, y sonrió.

En el carro Ritsu se dispuso a ver las imágenes, no lo podía creer, el tenía dos vidas en su vientre, dos corazones latentes junto con el suyo, un sentimiento extraño lo inundo, era una combinación de amor, preocupación, alegría, en fin múltiples sentimientos encontrados, nadie lo había hecho sentido así... bueno, nadie más que Takano, su primer amor, su único amor, su jefe, su vecino, su ahora esposo y padre de sus hijas, era extraño, todo era a causa de él, sus alegrías, preocupaciones, sentimientos, su forma de ser, en fin todo, hasta sus hijas, las cuales sin conocerlas aun, sin saber ni sus nombres, ni sus rostros, ni nada más, ahora, amaba las amaba aun sin nacer, las amaba, el sentimiento extraño lo inundo otra vez, pero ahora, las ganas de llorar entraron en él y sin decir palabra alguna, sin percatarse de ello comenzó a llorar, de felicidad, de amor, de alegría, bueno, de todo lo que puedas tener al saber lo feliz que serás.

-Ritsu... ¿sucede? Pregunto mientras se paraba en un semáforo en rojo.
-yo... es solo que...- balbuceó mientras limpiaba sus ojos y presionaba la imagen contra su corazón- es que... es... yo... Takano-san... yo... M... Masamune yo

Al fin, el momento que Takano había esperado, dijo su nombre, lo dijo, eso lo hizo feliz más feliz aun, entonces, tomo la quijada de Ritsu, y levantando su cara lo quedo viendo a los ojos, esos ojos color jade que lo volvían loco, y lo beso, ese sabor dulce que sentía cuando lo besaba, esos labios por los que sufrió durante 10 años y con los que volvió a toparse 10 años después lo beso con tanto amor que Ritsu no se negó ni nada, de hecho lo correspondió y entonces de repente Takano lo corto.

-Yo también soy feliz- dijo mientras ponía su frente con la de Ritsu y sonreía.

-... si- dijo al momento en que cerraba los ojos y sonreía, aun con lágrimas en los ojos.

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Hasta aquí llego son las 12:11 am y me botan, mañana publico 10 o 20 más :D

¿QUE ESTOY Que? TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora