Capítulo 5 : Milagro

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Erick manejaba por el barrio donde estaba el apartamento de Adam. Venía leyendo una hoja de papel con la dirección pero aún así se paró a preguntar . Llevaba una camioneta familiar gris. Rose y él la habían comprado para la familia. Cuando Kristin estaba mejor salían a pasear. Vaya, era un lindo recuerdo.

Siguió hasta dar con el lugar. Erick miró que era algo lejano. Quizá si todos unían dinero podrían convencer a Michael y a Adam de mudarse cerca. Hey, Michael y Adam, lo olvidó, solo por unos momentos. La historia de esos dos literalmente está sacada de un cómic. Aún seguía en duda si su novia le jugó una broma ayer o en serio se creyó eso , solo que esto último no tenía sentido. Rose no era fácil de engañar, no era alguien que se creía historias o fantasmas.

Paró la camioneta afuera, vio por las ventanas del lugar a un chico rubio asomarse. Y después volver a meter su cabeza. Le tomó un sorbo a su café mientras ellos bajaban.

-Ya llegó- dijo Adam, quien traía una ropa nueva. Un pantalón negro y una suéter azul pastel bastante lindo, se veía joven y apuesto. Michael se le quedó mirando por unos segundos antes de terminar. Adam entonces miró a Michael , casi tenían la misma ropa, solo que Michael usaba colores oscuros. Lo cual era aún más irónico.

-Okey, Rose dijo que su novio ya sabe - dijo Adam y Michael estuvo en desacuerdo pero al final lo terminó aceptando.

-Supongo que no habrá problemas si hago algo mío - dijo con relación a su magia.

-Sí, aunque... no hagas mucha magia - dijo Adam nervioso, se le veía alterado. Michael tomó su mano para bajar juntos las escaleras pero igual para darle apoyo al rubio.

Erick los vio salir a ambos, Michael traía un ramo de flores en su otra mano, pegadas en su pecho para no maltratarlas, una pequeña nota que decía Kristin se asomo. Erick les ayudó abrir la puerta de la camioneta y así ambos fueron atrás, mientras Erick los llevaba al hospital.

Fue un momento extraño, Adam se había presentado, Erick igual lo hizo. A simple vista ambos eran amigables, Erick no les vio nada raro. Quizá sí, a Michael quien era un tanto reservado y a diferencia de Adam se miraba imponente. Pero el rubio era alguien amigable. Ya podía entender la relación. Polos opuestos, vaya que funcionaba. El chico les dio espacio y manejo hasta llegar al hospital.

Cuando llegaron Adam y Michael entraron a este, Adam por un momento se acordó de su madre. Ella era enfermera y ver esto le resultaba familiar. Así que tomó la mano de Michael y estos caminaron a donde estaba Rose.

La chica les recibió y los llevó con una enferma.

-¿Vienen de visita? - preguntó a ambos.

-Así es - dijo Rose - son amigos de Kristin, quieren ver como va y les dije que hoy podrían verla - mencionó y la enfermera asintió.

-Solo dos a la vez - dicho eso, Rose y Erick se quedaron ahí mientras Adam y Michael iban al cuarto de Kristin.

Los nervios corrieron por Adam, ¿cómo iba a reaccionar Kristin?,¿le daría una bofetada?. Si era el caso se empezaría a preparar para el golpe. Apretó un poco más la mano de Michael, el arcángel lo noto y trató de calmarlo.

-No tengas miedo - dijo Michael.

-¿Por qué no lo tendría? - cuestionó y ambos siguieron.

Kristin Mikey estaba recostada. Cuando Adam la miró no la había reconocido del todo. Tenía la cabeza calva, aquella hermosa cabellera rubia había desaparecido. Sin embargo aún se veía bien, un tanto gastada pero bien. Estaba descansando de modo que la enfermera tuvo que despertarla.

-Hey kristin - dijo cerca de su oído . La joven despertó. Adam pudo ver la gran diferencia entre él y Kristin. Ambos tenían la misma edad. Pero ella se veía mucho más grande que él. No tanto por la enfermedad si no como tal. Kristin no había reconocido el rostro de Adam en instantes. Pero después lo hizo, su reacción fue de asombro pero Adam no vio ningún rechazo o algo.

-¡Adam! - dijo con una sonrisa.

-Así es señorita Kristin - dijo la enfermera mientras salía de la habitación - cualquier cosa recuerden avisar - dicho eso salió -

-Kristin.... - Adam no sabía qué emoción tenía, estaba alegre pero triste. La mujer que estaba enfrente de él era aquella a la que una vez amó, era el amor de su vida. Y ahora vela, vela aquí conectada a esas cosas y con su cuerpo desgastado. Apartada de la vida y de su hija.

-¿No estabas muerto? - preguntó sin quitar esa sonrisa de la cara - o yo ya estoy.....

-¡No!, Kristin. No, soy yo, ves soy real - dijo Adam comprobandolo - ah solo que me pasó algo y ya no pude volver - resumió sin sentido mientras le enseñaba el ramo de flores. Los ojos de Kristin, sus ojos verdes claro , oh esos ojos ya no se veían tan coloridos como antes. Pero aun así transmitían una alegría en ellos. La joven sonrió y Adam no podía creer su reacción - He venido a visitarte - dijo pero estaba muy sorprendido.

-Entonces, ¿No fue sueño? - preguntó - Rose dijo la verdad, ¿eso es posible ? - cuestionó y Michael hizo su explicación.

Adam no podía describir la reacción de Kristin. Estaba llorando alegre escuchando a Michael. Cuando contó la parte de que había cielo y infierno, pero se sintió mal cuando llegó a la parte de la jaula. Al final la joven pudo ver en la mente de Michael los recuerdos. Había consolado a ambos diciendo lo feo que era eso. Adam y Mich agradecieron el gesto. Pero Adam no venía a contar su historia, venía más que nada a ver a Kristin, que fue de su primera y única novia. No estaba seguro. Lo único que podía decir era que estaba más que agradecido de poder contar la verdad, de ver a alguien de su pasado. Eran muchas emociones encontradas.

Adam y Kristin compartieron historias. Fue entonces cuando la chica sacó de un cajón una foto familiar. Era ella y su hija, abriendo regalos de navidad. Adam pudo conocer a su hija en una imagen, aunque claro eso no era mucho, pero la idea de tener que verla algún día aún le seguía aterrando.

-Ella es... es - mencionó con cierta timidez Adam.

-Es Cathy - terminó de decir.

-Cathy- Adam pronunció el nombre de su hija algo asombrado - ella...ah, ¿cuántos años tiene? - preguntó.

-Tiene 10 - Kristin se burló de eso - Adam te fuiste en 10 años

Adam no contestó nada, simplemente se mantuvo tranquilo. Pero en el fondo se sentía tan mal, daba igual si Michael le hacía ese milagro a Kristin eso no pagaba el tiempo ausente.

-Ella no sabe nada Adam - explicó Kristin.

-Bueno aún no se lo decimos - dijo Adam pero Kristin negó.

-Ella no sabe quién es su padre - explicó - no fue nada personal, solo que la noticia me destrozó, así que preferí guardarlo como un secreto - Adam no sabía cómo sentirse al respecto .

-¿Y trataste de hacer tu vida de nuevo? - Adam preguntó un tanto esperanzado.

-Sí, conocí a muchos chicos después, sin embargo - Kristin miró por el reflejo de su cuarto su silueta - ninguno se quedó.....-bajó un poco su cabeza apenada.

-Qué hijos de puta - había dicho Michael.

-¡Michael! - Adam lo regaño.

Kristin por su parte le causó gracia escucharlo y hasta cierto punto estaba de acuerdo con Michael.

-Tranquilo, está bien - dijo y miró a Michael - Entonces, ¿puedes curarme? - preguntó.

-Sí, aunque tendría que consultarlo con alguien antes de hacerlo - mencionó Michael.

-¿Con quién ? - preguntaron Adam y Kristin.

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Sí, si es contigo  (Midam) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora