¿Weasley o Malfoy? 1T

Finales de verano

Narra _____:
Las vacaciones de verano estaban llegando a su fin y era el momento de ir al callejón Diagón para comprar las cosas que eran necesarias para realizar el cuarto curso según la carta de Howarts que había recibido hace un par de días.
Me alegraba mucho ir a Howarts y en especial en este momento porque estás vacaciones han sido muy atareadas. Todos los días hacia la misma rutina, no me quejaba, la verdad es que no tenía otra cosa mejor que hacer.
Puede que lo de la rutina sea un poco excusa, por lo que quería realmente volver a ese colegio era para ver a un chico de cabello alvino y con los ojos grises, si chicos, estoy hablando de Malfoy, Draco Malfoy, era verdad que nos tratábamos como la mierda, siempre nos insultábamos y él estaba constantemente amargándonos, sobretodo a Harry pero aún así ese chico tenía algo que me atraía desde segundo curso, y si nos ponemos a hablar de amores... Ron no se queda corto. Estoy hablando de mi mejor amigo, de verdad que no entiendo porque me atraen los amores difíciles, uno mi mejor amigo y el otro es un plasta conmigo.
Ahora estaba viviendo en casa de mi hermano mayor, Remus Lupin, en Hogsmeade y a la vez también vivía con Sirius, aclaro esto último, ayudábamos a Black a esconderse del ministerio en una cueva cerca de nuestra casa, no lo podíamos llevar a casa porque siempre estábamos recibiendo visitas y era muy arriesgado. Todos los días iba a llevarle comida y ropa limpia, intentaba no ir mucho a la cueva para no llamar demasiado la atención de la gente, ya que el ministerio lo buscaba sin descanso.
Esa tarde había quedado con mi mejor amigo Ron para ir a comprar las cosas y pasar la tarde juntos, también iban a venir Hermione, Harry y Ginny.

-Hermano me tengo que ir ya, seguramente Ron y los demás me estén esperando desde hace varios siglos ya. -dije con un tono dramático.

-Esta bien _____ pero ten cuidado y pásatelo bien, toma esto. -me dio una bolsa verde de terciopelo.

-¿Qué es? -pregunté.

-Lo que se necesita para comprar. -dijo riendo.

-Muy gracioso. -le dije con una mueca de despreció en la cara. -Bueno me tengo que ir ya si o si, no te olvides de llevarle esa cesta a Sirius y de terminar de secar la ropa limpia. -le recordé.

-Si, si, ya se todo lo que tengo que hacer. Como sigas así no vas a llegar en la vida. Largo de aquí.

Cogí un puñado de polvos flu y entré en la chimenea, pronuncie con mucha claridad "Callejón Diagón" y aparecí en la chimenea de un bar, salí apresurada y fui en dirección a la heladería que era donde tendrían que estar mis amigos. Cuando llegue tenían todos los brazos cruzados y me miraban con cara de enfado. Hermione señalaba el reloj que llevaba en la muñeca mientras me fulminaba con la mirada.

-Siento la tardanza es que tenía que dejar las cosas preparadas para que Lupin pudiera llevárselo todo a Canuto. -ellos sabían lo de Sirius, por eso no fui a la madriguera ese verano.

-Te esperamos desde hace 46 minutos, nos debes más que una disculpa. -dijo Ron, y acto seguido corrió a abrazarme. -Te extrañé.

-Y yo a ti Weasley. -le dije devolviéndole el abrazo.

-¿Y esa bolsita verde de terciopelo, quien te ha dado esa cosa? -dijo mirando la bolsa con el dinero que llevaba en la mano.

-Me la ha dado mi hermano. ¿Qué tiene de malo la bolsa? -pregunté extrañada.

-Que es muy del estilo de Malfoy. -dijo haciendo un gesto con la cara como si fuera a vomitar.

-Muy Malfoy... -repetí esas dos palabras en susurros. Mi estómago dio un vuelco al pronunciar el apellido del rubio. Ron consiguió que de ahora en adelante amara esa simple bolsa.