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Narradora Omnisciente

El peliazul llevó a su gemelo hasta una sala vacía, donde se encerró junto a él y lo miró seriamente.

—¿Por qué ibas de la mano con él?

—Porque íbamos a decirle una cosa a John. Y date prisa que aún debo hacerlo.—respondió impaciente el pelirrojo.

—Esa no es una razón buena.—caminó a paso firme hacia él hasta quedar cara a cara.—Te recuerdo que aún quedan 2 días para que dejes de ser mi novio. Así que ni se te ocurra engañarme porque te juro por lo que más quieras que mato a Liam y a HoSeok, ¿o te crees que no noto cómo te miran?—estaba enojado, se notaba a kilómetros de distancia.

—¡Basta! No eres mi padre, no me puedes prohibir hacer algo o no hacerlo.

Taeyang agarró con fuerza las mejillas acaneladas de su hermano y lo besó bruscamente, mordió su labio inferior, haciendo que sangrase y con sus manos apretó las muñecas de él. TaeHyung se hizo para atrás para alejar a Taeyang, pero lo único que consiguió fue caer en una mesa, dañando su espalda y permitiendo que Taeyang se subiese encima suyo.

—¡Quita!—exclamó pataleando.

—Shh, sólo quiero sentirte. Me parece que ya he esperado mucho.—dijo Taeyang y comenzó a besar su cuello.

—¡No!—siguió forcejeando y logró quitárselo de encima en un impulso.

—Tae.—lo detuvo, sujetándolo con los brazos, antes de que saliese corriendo.—Déjame, por favor.

—¡QUE NO!

El gemelo mayor apretó el cuerpo de su hermano para que no escapase, ya que TaeHyung tenía bastante fuerza, no tanta como él, pero sí bastante.

—¡¿Qué está pasando aquí?!—Liam apareció en la habitación.—¡Suéltalo!—corrió y le propinó un gancho que hizo que soltase al gemelo menor.—¡Corre, sal!

TaeHyung salió corriendo de ahí, para ir a avisar a John de la pelea que estaba surgiendo. Escuchó pasos apresurados detrás suyo, pero siguió corriendo hacia la salida.

HoSeok

Había avisado a todos los del piso para que se protegiesen. Seguro iban a morir personas inocentes, pero eso era lo que menos me importaba, lo único que me importaba era salir de ahí y proteger a TaeHyung.

Habíamos acordado que NamJoon se dejaría proteger por las plantas de JiMin y que JungKook protegería a SeokJin con una cúpula de electricidad inquebrantable.

—TaeHyung está afuera—escuché a Lia, la chica que se había prestado para ayudarnos a explotar la prisión.—junto a John.

—Perfecto, ahora necesito que me liberes y que liberes a Leonor, Raluka, Paloma y Eun Ji.—le indiqué.—Ellos tienen la potencia suficiente para explotar esto por completo.

—Iré a ver que puedo hacer, pero si me ven, me despiden y a la mierda el plan.—escuché el sonido de las llaves de los candados y como abrían la reja.—Sal.—abrió la puerta y salí de mi "habitación".—Tengo suerte de que Iván es irresponsable y no está aquí. Bueno ven conmigo, ahora se supone que no deben haber guardias.

Ambos fuimos al piso donde estaban los ayudantes de la operación "T.P.C.L.P" o "a Tomar Por Culo La Prisión".

Lia liberó a todos los que nos iban a ayudar y nos juntamos haciendo un círculo.

—Bueno, empecemos.—sonreí.—Leonor, tú sabes lo que tienes que hacer. Los demás, debéis liberar toda la energía que podáis. Pero Raluka, tú debes protegernos a todos antes de que todo explote por los aires, sé que el poder de manipular el hierro nos protegerá y a demás yo y Eun Ji vamos a fortalecer el hierro para que sea más difícil de romper.—hablé y todos asintieron.

Leonor abrió su mano y de ella comenzaron a salir chispas que formaban una pelota brillante. Paloma estiró su brazo y tocó la pelota, la cual comenzó a llenarse de polvo gris. Eun Ji cerró sus ojos y con un dedo apuntó a la pelota, la cual se prendió en llamas, pero no lo suficientemente potentes. Centré todas mis fuerzas para lanzar una llama enorme de fuego gris que nada más entrar en contacto con la pelota, explotó.
Sentí como el hierro de Raluka y mis llamas me rodeaban.

TaeHyung

—¡John! Tengo que decirte q-

Muy tarde, la prisión salió volando en mil pedazos. Vi a varios prisioneros protegidos por sus poderes, entre ellos, los presos peligrosos y algunos de otras plantas. Por la explosión quedé en el suelo, con un par de quemaduras, raspones y un gran dolor en uno de mis brazos.

—¡TAE!—escuché a mi hermano y sentí que me agarraban.—¡LLAMAD A UNA AMBULANCIA!

—¡SE ESCAPAN!—escuché a John.—¡TAEYANG, HAZ ALGO!

—¡NO, JODER, TAEHYUNG ESTÁ MAL!

Temblando y con muy poca fuerza, me levanté. Con la pistola lanza dardos en la mano, apuntando a Raluka, disparé.

—¡DEBES DISPARAR A TODOS, TAE!

Me temblaba el pulso y veía algo borroso. Mi mano bajó lentamente, pero Taeyang agarró mi mano y disparó rápidamente a todos los que quedaban.

—¡JODER!—exclamó HoSeok tirado en el suelo con un dardo clavado en su brazo.—¡MALDITA SEA!

Debí haber avisado antes a John, pero no podía pensar en nada más que en que quería descansar.
Sentí un mareo y como me desplomé.

—¡UNA AMBULANCIA!—fue lo último que escuché.

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Podía haber desarrollado mejor la idea de la explosión, pero quería terminar esta historia.
Hasta aquí llega la historia, bueno no, la primera parte termina. Pq sí, va ha haber segunda parte, y la voy a hacer mejor.

Estaba pensando y... ¿Queréis que los hombres puedan tener bebés?

La segunda parte va a ser mucho más larga y se va a desarrollar mucho mejor. No me insulten ni me critiquen por la forma en la que hago los capítulos, porque aún soy bastante pequeña y me es algo difícil.

¡Fin de la primera parte!

El niño follable (Vharem)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora