"Según mi sentido común, deberían". Al escuchar la pregunta de Chen Ming, Zhou Nan también se sintió confundido. Así que se puso en cuclillas para mirar con atención.
"Entonces, ¿por qué no lo hizo?" Chen Ming avanzó.
"¿Quizás se olvidó?"
Los dos hombres adultos se sentaron en cuclillas sobre la cama de una niña para discutir cómo quitarse el maquillaje. Esa fue una escena bastante divertida.
"Es posible." No había una respuesta segura. Chen Ming ya no quería adivinar la mente de la chica. Comenzó a concentrarse en esperar a que llegara el bebé afligido.
Mientras esperaba, Chen Ming tomó una siesta porque era demasiado aburrido. Luego lo despertó el llanto de un bebé. Rápidamente sacó la brújula y la miró de cerca. La aguja apuntaba directamente a la ventana.
El grito también vino de la ventana.
Chen Ming ya no tenía sueño. Un segundo antes, todavía estaba en un sueño. Estaba completamente despierto en solo un segundo.
Sin dudarlo, rodeó la cama, agarró las cortinas, se detuvo un momento y luego abrió las cortinas abruptamente.Zhou Nan miró por encima de los hombros de Chen Ming desde atrás, y los altos edificios al otro lado de la calle aparecieron a la vista.
La casa de Bai Yiyi estaba en el décimo piso.
El llanto se fue, y en su lugar hubo algunas risitas de bebé. Al rastrear el sonido, encontró que había un bebé particularmente pequeño pero bastante humano en el borde de la plataforma a menos de diez centímetros fuera de la ventana, cuyas extremidades parecían estar unidas, e incluso podían ver los puntos manchados de sangre y hilos delgados.
El bebé sonrió cuando vio a Chen Ming. Su boca, que se suponía que estaba desnuda, estaba llena de dientes afilados. Extendió su manita y limpió la ventana, dejando una pequeña huella roja en ella.
Chen Ming lo miró fijamente con fiereza, "¿De qué te ríes? ¿Quieres que te dé una paliza?" Se arremangó y abrió la ventana para que entrara el bebé afligido.
El bebé afligido parecía saber que no podía vencer a Chen Ming. Entonces sacó la lengua, se dio la vuelta y se escapó. Para ser precisos, estaba trepando directamente por la pared como un gecko mutado.
Zhou Nan sintió que era el momento adecuado para que él se ocupara de esto por su cuenta. Así que aprovechó la ventaja de ser un fantasma para caminar directamente por la ventana y lo persiguió primero.
"¡Oye! ¡Espérame!" Chen Ming no podía simplemente saltar por la ventana. La altura del décimo piso no era ninguna broma.
Zhou Nan no escuchó, porque si no lo perseguía en ese momento, probablemente no podrían alcanzarlo más tarde: "¡Puedo manejarlo!"
El bebé afligido usó las cuatro extremidades juntas, por lo que fue muy rápido y saltó bien. Simplemente saltaba libremente entre los edificios. En solo unos segundos, junto con Zhou Nan que lo perseguía, todos desaparecieron ante la vista de Chen Ming. No importa cómo Chen Ming se asomara por la ventana, no podía verlos.
"Mierda ..." Chen Ming no estaba absolutamente seguro de la habilidad de Zhou Nan. Después de todo, Zhou Nan era solo un joven fantasma que definitivamente no tenía experiencia con esto. Ni siquiera cerró la ventana y se volvió de inmediato. Planeaba correr escaleras abajo y perseguir a Zhou Nan en la dirección aproximada, con la esperanza de que la distancia no fuera demasiado grande y todavía estuviera dentro del alcance efectivo de la brújula.
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AMANTE FANTASMA
HumorFrente al famoso Hospital de Guangming había una floristería que vendía ramos y obenques. El vendedor vendía flores durante el día para obtener dinero de las personas vivas, un hombre fue muerto de miedo por un fantasma feroz y siguió al vendedor de...