Ova: La Luna Plateada de Halloween.

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¡Ya sé que no es Halloween! ¡Ahorrense ese tipo de comentarios!

¡Pudrete Furro!

¡Si, Mister, te hablo a ti!

—¡Esto es Halloween, esto es Halloween, esto es Halloween!~. —Red cantaba alegre mientras caminaba junto a los demás.

—Bájale dos rayas, Red. —De brazos cruzados el albino del grupo se quejó.

—Vamos, es Halloween, una de las pocas fechas del año donde te dan comida gratis. —Con brillos y emoción Red se paró frente al grupo.—Además es divertido ir con la familia a pedir los dulces, Blue disfrazada siempre es bueno.

—Confirmo. —Los dioses asintieron en respuesta a lo último dicho por el peli-rojo.

—No sé que le ven de bueno al Halloween. Si, los dulces gratis son geniales, no tengo que robar a ciegas debido a eso, pero fuera de eso solo es otra estúpida festividad humana, aunque no negar que de pequeño tuve buenos momentos. —El ex-humano levantó los hombros y suspiró con cansancio, y si, mucha, mucha nostalgia. La imagen de una mujer adulta de cabellos blancos apareció en su memoria, y así como vino, se encargó de hacer que se fuera.

—Bueno, esto de que Halloween es una festividad de este estilo no siempre fue así. Al principio era una antigua festividad/ritual por los muertos, mataban cabras, humanos, etc en estás fechas, pero poco a poco la gente fue cambiando el significado y la celebración en si, en especial en EE.UU y en Europa. —Sosteniendo su barbilla, Arck empezó a dar una leve explicación mientras seguían caminando.

—Oh si, los mitos como el de Jack O. Lantern influyeron, ¿Cierto? —Entrando en la conversación el oji-rubí apoyó lo dicho por el perezoso.

—Pues si, me sorprende que sepas algo como eso.

—En verdad fueron Pascu y Rodri los que me ayudaron, aunque la saga persona también dio su aporté jeje. —Rascándose la parte trasera de su cabeza Axel dejó sacar una sonrisa.

—Dejemos esta clase de lado, vamos a centrarnos en lo verdaderamente importante, la ruta para recoger los dulces y los disfraces. —Desde su bolsillo Red sacó un mapa con una ruta marcada.

—Wow, ¿Lo hiciste tú?

—Pues claro Míster, he estado analizando la ciudad por toda una semana para este momento, al final después de una gran serie de cálculos avanzados he logrado identificar las casas que dan la mayor y mejor calidad de dulces. —Abriendo todo el mapa mostró la ruta de su misión.

—Sabía que Red tenía algo de cerebro, pero no pensé que le llegaría para hacer esto.

—Siempre supe que Red era listo a pesar de lo que él diga, pero estoy igual que tú.

Ambos dioses analizaban el plan trazado por el chico de ojos distintos con atención, en verdad les impresionaba lo que había hecho sabiendo como era él.

—Está todo planeado, menos una cosa, ¡sus disfraces!, ¡Diganlos! —Con una gran seriedad el dios apuntó a sus compañeros con gran determinación.

—Ninguno./ Ninguno./ Pendiente. —Los tres dioses respondieron casi al instante a la pregunta.

—¿¡Por qué no usarán disfraces!?

—No estoy interesado en disfrazarme, tal vez si en ir a buscar dulces con ustedes y las quintillizas por dulces, pero nada más. —Con la tranquilidad que lo caracterizaba Arck dio su respuesta.

—Entendible, ¿Gaiou?

—¿Tengo que dar una respuesta? —Con una mirada de intenciones nada amigables el mencionado respondió la pregunta.

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