Tutores Divinos

Ova: Una Navidad Perfectamente Normal... Si, Eso...

Gaiou del pasando hablándoles para advertirles, no he empezado si quiera a escribir aún pero sé perfectamente como va a terminar esto. Siéntense y busquen algo para comer, que nos quedaremos aquí un rato.

Actualización: La flojera me ganó así que quizá la comida ya no sea necesaria.

Actualización de la Actualización: ¿Saben qué?... Olviden lo que dije antes.

Actualización de la Actualización de la Actualización:

...Man.

Ya se que navidad pasó hace semanas, pero sucedieron cosas de este lado y entre la flojera, el bloqueo de escritor, Honkai y más cosas, tarde más de lo necesario.

Igual se van a tragar este especial así que no me importa, pero valía la pena aclarar.

Ahora sí. Disfruten este desastre.

[19.735 PALABRAS]

Si que soy bueno publicando especiales de navidad cuando esta ya acabó.

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Comenzamos cómo todo lo hace a diario, no tan temprano en una mañana Increiblemente fría en las profundidades de un bosque ubicado en su-puta-madre-sabrá-dónde; en el que, si te tomabas el tiempo para buscar y no te perdías en el camino, encontrarás una vivienda que solo puede ser descrita cómo una mansión. Este lugar se hallaba como cualquier otra cosa a estas horas y fechas: en completa calma y cubierta de nieve.

A primera vista no habría mucho que destacar más allá del simple hecho de ser una mansión, pero la verdad es que en este lugar habitaban - ilegalmente, pero eso a quién le importa. - cuatro individuos muy distintos el uno del otro, pero qué sin embargo tenían algo en común.

Y no, no se trata del poder para destruir mundos, aún si ahora mismo no es que puedan usarlo como deberían.

No. Tienen otra cosa en común y es bastante curiosa.

—¡OSTIA PUTA!

Haa. Si...

Los cuatro olvidaron que hoy, 24 de diciembre, es víspera de navidad.

—Tenemos un maldito recordatorio en la puerta, ¿Cómo mierda no lo recordamos? —Comenzó Axel saliendo a prisas y apenas bien vestido de su habitación.

Cómo todos los demás.

—Tal parece que cometimos el garrafal error de subestimar nuestro propio nivel de retraso mental... —Arck respondió, terminando de acomodar sus gafas—. Y si estuviera en el lugar de alguno de ustedes supondría que si yo lo digo el asunto es serio.

—Supones bien.

—¡Ya dejen de hablar y comiencen a moverse, esta casa parece un cementerio!

—¿What...? —El ser humanoide con características felinas se permitió lucir confundido ante la comparación—. ¿Pero si se ve completamente normal...?