Can do it

22

Dos meses después.

Minhyuk está yendo de un lado a otro aquí en casa, en la sala, como si estuviese nervioso mientras yo intento comer y ver la película que obviamente no puedo porque no se quita de delante de la televisión, impidiéndomelo.

Además de comer también estoy acariciando mi barriga, no sintiéndome ya tan mal, ni con tantas nauseas como hasta hace pocos días. Y los cambios también se están notando en mi cuerpo, a veces pensando que demasiado rápido porque me veo muy gordo y mi vientre demasiado abultado.

— Minhyuk —miro a mi primo, dejando el helado en la mesa a mi lado —me estás mareando. ¿Por qué no paras de dar vueltas? ¿Tienes problemas con tu novio?

— No, no tengo problemas con Jooheon —se sienta a mi lado —estoy nervioso porque tu vas a tener un bebe y también quiero cuidarte. ¿Qué puedo hacer?

— Dejarme ver la película —sonrío de forma inocente —no se.. ¿quieres venir de compras conmigo? Hyunwoo siempre está trabajando y me da un poco de miedo pedírselo porque viene cansado.

— ¿Tu ya no trabajas?

— Por las mañanas trabajo —vuelvo a coger el helado —y me aburro por las tardes asique no me parecería mala idea ir de compras si me quieres acompañar.

— Está bien pequeño hámster, vámonos de compras y así le compro algo bonito a esta pequeñina que mimaré mucho cuando nazca.

Negando pero sin dejar de sonreír, porque ninguno sabemos si será una niña o un niño dado que solo son dos meses de embarazo, dejo la tarrina vacía en la mesa, la manta en el sofá y me dispongo a ir a la puerta de casa donde con dificultad me pongo mis zapatillas, saliendo no mucho después los dos de casa.

— ¿Qué piensas que va a ser el bebe?

Mirando a mi primo, viéndole mirar todos los diminutos conjuntos de bebe que están perfectamente colocados, pienso por un momento en ello.

— La verdad es que no me importa mucho si es niño o niña porque le voy a querer igual —acaricio nuevamente mi vientre abultado —quiero que venga sano el bebe y que no sea omega.

— Eso no lo podemos elegir por mucho que sean nuestros hijos —se que tiene razón —y si es omega como nosotros, no te preocupes porque le enseñaremos los mejores valores para que nadie le haga nunca daño.

Mirando a mi primo, deteniéndome todavía con el pequeño conjunto en mi mano, siento otra vez esas inmensas ganas de llorar, mis emociones tan alteradas que no tardo ni un segundo en abrazarle, supongo que confundiéndole aunque me abrace también.

— Eres el mejor primo.. ojala tu fueses mi hermano y podría haber estado mejor cuando solo era un bebe..

— Soy tu primo pero eso no hará que te quiera menos Kihyun —acaricia mi espalda con cariño —no voy a dejar de cuidarte por eso y tu lo sabes.

Sin soltarle asiento con la cabeza, intentando que más lágrimas no manchen mi cara porque no quiero que la gente me mire mal por eso, que digan que soy feo por ser un llorón.

Separándome un poco Minhyuk se encarga de limpiar bajo mis ojos, de dejar un beso en mi mejilla y coger mi mano, llevándome hasta donde muchas cunas son las que hay ahora frente a nosotros.

— Son muy bonitas —miro todas —¿solo puedo quedarme con una?

— Claro —su risa me hace reír también —solo vas a tener un bebe y solo necesita una.

— ¿Pero cual cojo?

Mirando todas, Minhyuk haciendo lo mismo, señala una que es muy bonita, blanca con lo de dentro en azul, con pequeños hámster que la hace todavía más bonita de lo que es.

— Quiero esa —miro el precio —¿a Hyunwoo le gustará? ¿Debería llamarle para que la vea?

— ¿Quieres mi consejo? —asiento rápidamente —dale una sorpresa. Seguro que le encantará y más viniendo de ti, pequeño hámster.

Correría por la tienda ahora mismo de no ser porque estoy esperando un bebe que me hace ver demasiado grande, así como también porque me duelen las piernas, que siempre noto cansadas desde que estoy en este estado.

En lugar de ello es Min quien se encarga de llamar a un dependiente de esta enorme tienda, quien se ocupa de darnos la cuna en una caja y lo que estaba decorando la misma porque eso al parecer va aparte.

No estamos mucho más rato aquí pero el tiempo que si estamos lo ocupamos en coger unos pocos conjuntos que nos gustan, saliendo como veinte minutos o treinta después de la tienda, yendo en el coche de mi tía que mi primo conduce a casa.

Estoy más cansado que otros días pero ver la cuna montada junto a mi cama elimina todo rastro de cansancio en mi, porque ha quedado muy bien montada, segura para cuando el bebe nazca dentro de muchos meses. Hyunwoo todavía no ha venido aunque me ha llamado para decirme que estaba cerca y traía cena rica para los dos.

Mi tía si está aquí y cuando ha visto la cuna y toda la ropa que hemos comprado se ha quedado muda por unos minutos, reaccionando por suerte de forma positiva porque dice que es todo muy bonito y mi bebe estará precioso con él.

Pensando en ello, en lo confundido que me hace sentir que mi tía piense que es un niño y mi primo una niña, salgo por un momento de mis pensamientos cuando escucho el timbre sonar, yendo hasta la puerta tan rápido como puedo, vestido ya con mi pijama porque hace poco que me he dado una ducha después de montar la cuna.

— Mi amor —me abrazo a su cuello, dejando un rápido beso en sus labios —que bien huele. Tengo una sorpresa para ti.

— ¿Una sorpresa?

— Si y espero que te guste y no te enfades.

Pregunta de que se trata por supuesto, porque se que la curiosidad le puede en este momento. Yo no le respondo. Solo le hago entrar en casa, cerrando la puerta antes de unir nuestras manos y llevarle hasta la habitación donde ya si le permito ver mi sorpresa, sonriendo en todo momento mientras la mira, tan admirado como sorprendido.

— Es.. ¿la has montado tu solo?

— Min me ha ayudado porque yo no me puedo agachar sin que me duela la espalda —me abrazo a su cintura —¿te gusta? Cuando la vi supe que era perfecta para nuestro bebe.

— Es perfecta para nuestro bebe, mi amor —sus manos acarician mi barriga bajo mi camiseta —¿quieres que cenemos aquí o en el comedor?

Antes de responder a eso, de decirle que prefiero en el comedor aunque en la cama esté más cómodo, los dos nos encontramos con que su madre y mi tía están aquí, no habiendo escuchado que venían.

— Mama, ¿ocurre algo?

— No hijo, no malo al menos —los dos nos miramos confundidos —pero tenemos que hablar con vosotros dos. Más ahora que a Kihyun ya empieza a notarsele el embarazo.

— No voy a matar a mi bebe —advierto —y si echa a Hyunwoo de su casa vivirá conmigo si a mi tía no le molesta.

— Tranquilizate Kihyun mi niño porque no van a echar a Hyunwoo, ni a ti tampoco —ahora si que ya no entiendo nada —aunque si se trata de algo que va con relación a ello.

— ¿Qué es lo que queréis decirnos mama? —Hyunwoo me sienta entre sus piernas —Kihyun se está alterando y no es bueno para él ni para el bebe.

— Hemos estado hablando y ahora que Kihyun tiene su barriga más abultada y el bebe ira creciendo cada día más, además de causando muchos efectos como el cansancio en él —todos me miran a mi —lo mejor es que tengáis vuestro propio espacio, un lugar donde se sienta cómodo y te tenga cerca hijo.

— Entonces si nos echáis mama..

Tanto su madre como mi tía sonríen cómplices la una de la otra, dejándonos con tanta intriga con lo que sea que quieren decirnos que empiezo a sentirme cansado de verdad, mareado incluso aunque intento contenerme porque se que Hyunwoo nota mis estados de ánimo y como me siento en todo momento.