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Mi celo empezó de madrugada ha hacerme sentir como me siento ahora mismo. Se que hace unos minutos ha estado aquí Kihyun sin necesidad de que mi madre me lo dijese y agradezco que no le dejase pasar porque no quiero hacerle daño.

Acostado en mi cama, quitando todas las mantas de encima de mi cuerpo, aunque ya esté más que acostumbrado, odio esta sensación, más la presión en mis pantalones, así como también la excitación que siento y a la que no le puedo poner más remedio por más tiempo, doliendo ya demasiado.

Cerrando los ojos intento calmarme, dormir incluso siendo quizá la mejor opción a la que podría recurrir, no surtiendo demasiado efecto porque no puedo dormir.

Abrazándome mejor a mi almohada, respirando de forma profunda, pienso en el día en que de una vez esto acabe, mañana de madrugada tal vez o pasado mañana para mi suerte si es así, cuando podré estar más tranquilo y hablar con Kihyun, así como compartir con él la cita que no quiero retrasar demasiado, más porque cada vez hará más frio y no quiero que sufra por ello por mi culpa.

Sentándome ahora en mi cama, cogiendo mi móvil, pienso en escribirle dándome cuenta de que ni siquiera tengo su número. Mirando en dirección a la puerta trato de decidir si seria buena idea convencer a mi madre para que se lo pida.

— Eso seria demasiado raro —dejo el móvil sobre mi cama —si pudiese encontrar la forma sin ponerle en peligro.

La voz de mi madre de pronto se escucha al otro lado de la puerta de mi habitación, me da una idea aunque no quería meterla en esto más que nada porque me da algo de vergüenza siquiera pensarlo.

— Entra mama..

La puerta se abre, no siendo tan peligroso mi estado porque se trata de mi madre y no de un omega como Kihyun por ejemplo.

— ¿Pasa algo mama?

— Te traigo algo para que comas hijo —deja la bandeja frente a mi —Kihyun ha venido hace un rato pero le he explicado lo que ocurría. Lo ha entendido y se ha marchado aunque ahora parece que la situación en su casa es algo tensa.

— ¿Por qué dices eso mama? —le miro curioso —¿le ha pasado algo a Kihyun?

— No hijo aunque si es en la casa tiene más que ver con el otro chico —supongo que se referirá al que estaba con él el otro día —iré a ayudar en cuanto pueda. Aunque Kihyun está aquí en nuestra casa. Será mejor que te quedes en tu habitación hijo. ¿Queda claro?

Asiento, viendo como mi madre vuelve a salir de la habitación, cerrando ahora la puerta.

Lo que me ha contado aunque no me haya dicho todo cuanto ocurre, me preocupa en cierto modo, más porque Kihyun ha tenido que venir finalmente a nuestra casa. Una punzada hace que mi corazón de un vuelco, así como el deseo de estar a su lado se instala en mi con demasiada intensidad, conteniéndome cuanto puedo.

— Controlate Hyunwoo —me repito una y otra vez —no puedo hacerle daño.

— Hyunwoo —escucho su voz al otro lado —ya se que tu madre me ha pedido que no me acerque aquí pero.. tu me ayudaste cuando yo estuve así. ¿Necesitas alguna cosa? Me gustaría ayudarte si es posible..

— Kihyun.. —no me muevo de mi cama —de la única forma que podrías ayudarme no quiero que suceda así. Me odiarías después si lo permitiese y no quiero eso.

— Ya lo se Hyunwoo y no te preocupes —sus palabras me hacen sonreír, siendo él tan honesto y dulce —puedes hablarme si quieres. Me quedaré aquí hasta que pueda volver a casa.

Mirando en dirección a la puerta, pensando en si al menos quedarme sentado en el suelo, cojo mi almohada, yendo hasta allí, abrazándola en lo que apoyo mi espalda a la puerta.

— ¿Qué es lo que ha pasado para que estés aquí?

— He salido un rato cuando tu madre me contó lo que te ocurría porque no aguanto el olor que tiene el alfa de Minhyuk y cuando he vuelto —se queda unos segundos en silencio —me he encontrado en la puerta con un chico. Ha sido muy extraño y el alfa de mi primo no parecía muy feliz de saber que ocurría, por eso he venido aquí.

**

Nada más salir del ascensor, al verle frente a la casa de mi tía, no he dudado en acercarme, curioso por saber no solo que hace aquí sino quien es para estar justamente aquí, tan dispuesto a llamar.

Disculpa pero.. ¿puedo ayudarte?

Estoy buscando a Minhyuk —dice, con un tono que no me gusta mucho —¿no serás tu ese alfa con el que sale?

¿Tengo cara de alfa? —me enfrento a él —no tengo porque contarte mi vida ni quien o que soy. Eres tu el que está viniendo a la casa de mi tía a buscar a mi primo. ¿Qué es lo que quieres de él?

Soy digamos que amigo de tu primo y me debe muchas explicaciones —eso también me da curiosidad —tampoco yo tengo porque contarte mi vida. Haz que Minhyuk salga ahora mismo.

Negando, no gustándome desde luego la forma en la que tiene costumbre de pedir las cosas, no siendo amable desde luego, me acerco hasta la puerta, dispuesto a abrirla, no llegando a ello porque de eso al parecer ya se está encargando Jooheon, quien me mira a mi con cara de pocos amigos, pero peor aún al que está detrás mio, sorprendiéndome el alfa por la forma en la que me aparta, así como también por como recibe al que quiere hablar con mi primo, encontrándose ahora en el suelo y con su nariz sangrando.

Ese olor tan molesto vuelve a llegar por parte del alfa, siendo tan molesto como verles pelear como si fuesen dos gallos de corral, dos alfas buscando ganarse en este caso a mi primo, quien no es desde luego un premio por el que pelear porque es un ser humano que no se merece que lo usen como tal.

**

— Eso es lo que ha ocurrido —miro a la puerta cerrada —¿te puedo preguntar algo Hyunwoo? Aunque por supuesto no estás obligado a responderme si no quieres.

— Puedes preguntarme lo que quieras Kihyun —es siempre tan amable —si tengo una respuesta por supuesto que te la daré.

— Si tu y yo fuésemos más que vecinos, amigos, conocidos o lo que seamos ahora.. ¿si fueses tu mi alfa tu también serias así de posesivo? ¿Me usarías como si yo fuese más un objeto que una persona?

El silencio nos envuelve como cuando yo me he quedado por unos segundos callado antes. No siento ni escucho tampoco que se mueva, pensando por un momento que quizá ya no quiera seguir hablando conmigo, lo cual por supuesto respetaría aunque no comprendería el porque de ello.

— No voy a negarte que no dejaría que otro alfa o quien sea se acerque a ti con un propósito de hacerte daño o tocarte siquiera —miro nuevamente a la puerta, sorprendiéndome porque ahora está abierta —pero tampoco seria un alfa excesivamente posesivo si así solo haría que te sintieses incomodo, molesto y mal. Lo que más me importa es tu felicidad Kihyun, por eso no seria nunca tan posesivo como para hacer que así lleguen a cambiar tus sentimientos y acabases odiándome por ser así.

Poniéndome en pie, sabiendo que no es seguro que haga esto, rompo la distancia que nos separa, subiendo mis manos que no dejan ahora de temblar así como esa sensación vuelve a crecer en mi interior, uniendo nuestros labios de forma segura, queriendo hacer esto, besar a este alfa tan bueno y honesto que se que no me haría nunca daño.

Can do itDonde viven las historias. Descúbrelo ahora