Sansa Stark 👑

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⚠️Advertencia: En el siguiente One Shot va haber diferentes spoilers de la serie de Juego de Tronos, si continúas leyendo lo estás haciendo bajo tu responsabilidad.

Marry Me; Cute.

Llegar hasta ahí había sido un camino muy duro, habían perdido a demasiados seres queridos por el camino y habían sufrido un número infinito de veces, pero habían crecido, madurado y todo ello les había llevado hasta ahí: la coronación oficial de Bran el Roto como rey de los seis reinos de Poniente.

Sansa Stark había conseguido aquello por lo que luchó y murió su hermano mayor: la independencia del Reino del Norte. De su hogar. De esta manera ella se convertía en la Reina del Norte y podrían gobernarse solos, como lo habían hecho en un pasado. 'Lo conseguimos, Robb' pensó la pelirroja mirando al cielo con una sonrisa.

Después de haberse despedido de su hermano Jon y su hermana Arya, Sansa volvió a Invernalia, su hogar. El viaje iba a ser largo, pero no era algo nuevo para ella, por lo que montó en su reluciente y hermoso caballo negro, movilizó a aquellos que la acompañaban y volvió a casa.

Tras un mes de arduo viaje por fin detuvo a su corcel delante de las grandes puertas de lo que era su hogar.

– ¡Abran las puertas! ¡Es la reina! – gritó un hombre desde una de las torres. La orden no se hizo esperar y en un abrir y cerrar de ojos ya pudo adentrarse en el interior de las murallas. Había añorado la sensación de hogar que le transmitía el frío, la nieve y las grandes murallas que formaban Invernalia.

Sansa saludó a todos sus súbditos con elegancia y ternura, como la habían enseñado desde que tenía uso de razón, pero intentó no detenerse demasiado en ellos, ya que quería entrar en las paredes de su hogar y buscar a una persona en concreto. La persona a la que amaba.

Sansa llevaba enamorada de ella desde que la vio, tan bonita y elegante como una rosa, con el pelo castaño oscuro cayendo de su espalda como una avalancha de arena. Elena se convirtió en el amor prohibido de Sansa, nadie podía saberlo, nadie debía de enterarse, ni siquiera la propia Elena sabía de los sentimientos de la reina hacia ella.

¿Dos mujeres juntas? ¡Ni de broma! Estaba mal visto, no daba herederos y estaba en contra de la naturaleza, pero Sansa había visto tantas atrocidades en ese mundo, había perdido a tanta gente por el camino y había sufrido tanto que ya le daba igual. Era la reina, la Reina en el Norte y podía amar a quien se le antojase.

Quería, por una vez, casarse por amor.

– Mi reina – saludó Elena con una reverencia a la pelirroja, aguantando las enormes ganas que tenía de llorar al encontrar a la joven delante de ella. Viva–. Me alegro mucho de verla, su majestad – dijo hablando desde el corazón. La verdad era que Elena había estado asustada, nunca había tenido tanto miedo en su vida, muchos habían perecido en la Guerra de los Cinco Reyes y no quería que en la Guerra de las Tres Reinas y la Batalla contra el Rey de la Noche Sansa sufriese el mismo destino.

– Elena... – dijo en un suspiro, alegrándose de haberla encontrado con tanta facilidad. Sin pensárselo un segundo más se tiró hacia ella, acunó sus mejillas entre sus manos temblorosas y la besó como llevaba queriendo hacer desde hacía tantísimos años–. Cásate conmigo – le pidió a la morena, casi suplicando, cuando le había respondido con fiereza al beso–. Cásate conmigo y hazme la persona más feliz de todos los reinos – insistió.

– Pero, Sansa... – intentó decir algo coherente, pero nada le salía–. Esto está mal, no podemos hacerlo, eres la reina, tienes que tener descendencia – Elena se encontraba abrumada, ¡claro que quería casarse con ella! ¡Pero nadie en su sano juicio lo aceptaría!

One Shots ✴︎ MultifandomDonde viven las historias. Descúbrelo ahora