Diarios, Cartas y Memorias de un Imperio

Diplomacia, Tragedia y Traición

Memorias del Manuel Doblado

Ministro del Exterior Manuel Doblado.

Puerto de Veracruz, Veracruz.

9 de enero a 19 de febrero de 1862.

Contemple la escena de la ciudad los sodados españoles se mantenían en guardia, mientras avanzaba acompañado de una pequeña guardia de veinte soldados a la plaza central de la ciudad sentía la mirada de los pobladores que contemplaban la escena desde sus casas sin decir una sola palabra estos de inmediato cerraban las ventanas o corrían a otra zona, el Primer Ministro Juárez me encomendó la tarea de lograr la retirada de las tropas españolas, pero recibí un consejo de mi predecesor Manuel Zamacona cuando me entrego el puesto "Prepárate porque tendrás que conseguir la paz con Europa" al principio no sabía el significado de estas palabras hasta que el Ministro de Guerra nos informó del ataque al menos no tendré que conseguí la paz con Europa sino con España esto hará la tarea más sencilla. Que idiota e iluso fui.

Al llegar a la plaza central lo primero que me llamo la atención fue que en medio de la plaza seguía ondeando la Bandera Imperial, eso significa que todavía reconocían nuestra autonomía y respetaban el Tratado de Córdoba, pero al entrar al Ayuntamiento recordé de nuevo las palabras de mi predecesor "La paz con Europa" en el patio central del Ayuntamiento estaba una mesa con tres hombres sentados los cuales a su espalda tenían a un soldado con distinto uniforme sosteniendo un bandera diferente, el de la izquierda sostenía la bandera de Francia, el del centro la bandera de España y el de la derecha la bandera de Gran Bretaña, todos llevaban traje formal a excepción del español que llevaba un uniforme militar. Al sentarme en la mesa frente a estos hombres el español se paró.

El español se presentó como Juan Prim Comandante de la Alianza tripartita, representante y comandante de las fuerzas españolas, a su derecha Duboi de Saligni representante del gobierno francés y una de las personas más arrogantes que conocí en mi vida y a su izquierda Charles Lennox Wike representante del gobierno británico al menos con él era más diplomático y fácil de tratar que su homólogo francés, me entregaron el Convenio de Londres, un documento firmado el 31 de octubre de 1861 entre los tres gobiernos en Londres en el cual buscaban la cancelación de la Ley de Suspensión de Pagos del mismo año en caso contrario ocuparían todos los puertos del Imperio para obtener el pago por medio de las aduanas pero respetando dos principales punto sobre su acción en el Imperio:

1° Los países de la Alianza Tripartita se comprometen a hacer los arreglos necesarios para desplegar sus fuerzas navales y militares en las costas mexicanas, se les otorgan a los comandantes completa autorización para ejecutar operaciones que se consideren adecuadas para el cumplimiento del objetivo de la presente convención.

2° Los países de la Alianza Tripartita se comprometen a no buscar la adquisición alguna del territorio, así como a no ejercer en los asuntos internos del Imperio Mexicano influencia de cualquier naturaleza que pueda alterar la libre elección y constitución de su gobierno.

Dicen que la primera impresión es lo importante, el representante francés se jacto de la presencia de diez mil hombres, además que demando el pago de toda la deuda contraída con su gobierno incluyendo un pagos excesivos de intereses, lo único que me alegro es que sabíamos las fuerzas totales del enemigo algo que el Ministro de Guerra le alegrara saber pero el aumento de sus fuerzas nos iba a forzar a cambiar la estrategia, Juan Prim se disculpó formalmente al parecer no estaba acordado la llegada de sus fuerzas este día y un inicio diplomático antes de iniciar el desembarco pero un oficial ansioso ordeno el inmediato ataque y causo esta crisis de una forma que él no deseaba. Con esta pequeña charla y con las palabras de mi predecesor supe que iba ser más fácil trabajar diplomáticamente con los españoles y británicos los franceses sería un milagro si los convencía.