FÉNIX

Recuperación

Habla Aitana

Lucía se marchó a trabajar. Yo me quedé en casa sin saber qué hacer. Me invadía la soledad y la ansiedad. Llamé a Rebeca que vino a verme en seguida.

A- perdona por llamarte tía... es que.. se ha ido Lu a trabajar y me ha dado el bajón ... 😞
R- tía puedes llamarme siempre que quieras, no te dé apuro vale?
A- Gracias...

Estuvo conmigo toda la mañana hasta que vino Lucía. Se sorprendió al ver a Rebeca.

L- hola Rebeca :) qué tal?
A- perdona cariño es que me he agobiado mucho cuando te has ido y... me h dado ansiedad y la he llamado, no quería molestarte en el trabajo
L- me puedes llamar siempre que quieras amor
A- ya puedes irte Rebe... perdona que te haya secuestrado esta mañana...
R- tranquila tía no te preocupes. Voy a hacer la compra que tengo la nevera pelada, pero dime si necesitas algo, llámame para cualquier cosa si?
A- vale :)

Rebeca se despidió de Lucía y se marchó. Mi amor hizo la comida. No comía muchas cantidades pero al menos comía. Estaba empezando a engordar poco a poco, despacio.
Al día siguiente asistí a terapia. Me vino bastante bien. Me mantuvieron la medicación. Después fui a llevarle flores a mi madre al cementerio. Lucía me acompañó en todo momento.

Con las semanas fui cogiendo peso. Hasta que con el tiempo volví a coger mi peso original. Ya empezaba a comer normal. Me miraba al espejo y me veía bien, no me veía gorda y eso me alegraba mucho.

Habla Lucía

Me alegré mucho cuando Aitana recuperó su peso, ya no estaba tan extremadamente delgada y volvía a gustarse a ella misma. La abracé en el sofá y la besé.

L- te quiero cariño, me alegro tanto de verte así...
A- y yo mi amor... mucho :)

Acariciaba su brazo. Mientras le daba besos en la cabeza. Hacía TANTO tiempo que no tenía ningún tipo de relación sexual con Aitana... estaba siempre la cosa muy delicada y tenía miedo de iniciar el tema porque no sabía si ella estaría...dispuesta...pero la verdad es que me moría de ganas.