El Guardián De Los Susurros - KookV

🌹15to Susurro

-Debo admitir que me sentí sorprendido al encontrarlo aquí - Confesó el rubio abultando sus mejillas gracias a un puchero - ¡No se vale! Apenas llegó y lo primero que me dice es que le regresé a su jardín - Reprocha haciendo un pequeño berrinche.

-Ya vendrá otra ves Minnie - Restó importancia con un ademán de la mano, observando el destello del fuego rosado dentro de la chimenea - Y podrás hacerte el profesor buena onda - Bromeó.

-¿Buena onda? - Cuestiona con una mueca divertida - ¿Desde cuándo dices "buena onda"? - Haciendo comillas con sus pequeños dedos.

Se encontraban todavía en la dimensión del chico rubio, solo que estaban dentro de la cabaña que esté mismo había creado para situaciones como en la que estaban. Era todo muy hogareño y acogedor, a pesar de ser un lugar bastante amplio, no había esquina a la que le faltará ese calorcito que emitía su dueño. Con paredes en color mandarina claro, muchas plantas del flores decorando cada superficie que a Jimin le apeteciera, muebles de madera clara tejidos, uno de ellos colgaba del techo pareciendo un nido de aves, el asiento favorito del rubio frente a la chimenea.

Justo ahora estaba sentado en su mueble colgante, con una pierna doblada y su otro piecito colgando debido a la altura (que no era mucha) pero a él le gustaba la manera en que faltaban pocos centímetros antes de rozar el suelo con sus pies.

-Creéme, ese chico es exasperante - Soltó de repente haciendo reír al más bajito - De todo lo que le dices únicamente entiende lo que quiere, es distraído - Señaló frunciendo el entrecejo recordando cómo durante las horas pasadas el pelirrojo solo le dedicaba esa mirada curiosa - ¿Habías notado que es todo un metiche? - Dudó enfatizando al alzar la voz incesantemente, tenía a su amigo a menos de un metro de distancia.

-Vaya, pareces haberlo estudiado muy bien - Comentó inocentemente provocando al contrario - ¿Tan mal te cae? - Fingió estar desanimado con lo que escuchaba - Yo pensando que sería un gran chico, claro que apenas sí he hablado con él - Suspiró - No cómo tú, que ya tuviste una larga e intensa sesión de... ¿Una hora?

-Ya sé lo que intentas Minnie - Advirtió - No es que lo odie, pero... ¿Qué? ¿Por qué me ves así? - Preguntó reaccionando al rostro escéptico - Solo me estoy desahogando, no seas malito, eres mi amigo, deberías estar de mi lado - Protestó arrojando un esponjoso cojín en forma de flor hacia el rubio.

-No pienso cegarme Kookie, por esa misma razón es que nos hicimos amigos, no voy a juzgar sin conocer - afirmó con una trompa en los labios - ¿Quieres más chocolate? - Ofreció tomando su taza y la del contrario poniéndose de pie.

-¡Eres demasiado amable! - Atacó con intenciones de hacerle entender que no con todo el mundo podía darse ese lujo.

-¡Y tú demasiado amargado! - Respondió con el mismo tono - Ese chico no te ha hecho nada malo, es hasta menor que tú y ya le tiras duro... ¡Uy! Eso sonó mal - Dejó escapar una risita - Mi punto de vista es inalterable Kookie, espero que con el tuyo no pase lo mismo - Acotó - Taehyung merece una oportunidad de nosotros, y yo ya se la dí.

Jungkook recibió su segunda taza de chocolate en silencio, pensando con calma el consejo de su mejor amigo, Jimin siempre sabía lo que hacía, por algo era el representante de Las acciones. Quizás le debía un mejor trato al muchacho, más allá de explicarle lo que necesitaba saber, una amistad...

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-¡Nos vamos al médico!  - Anunció el menor de los Min cerrando la discusión con una sonrisa arrogante dirigida al menor de los Kim.