Calm, Kitty. (Diki)

Capitulo 1

- Era tan hermoso- dejó salir un suspiro largo y siguió mirándose al espejo, haciendo varias poses para encontrar el ángulo que más le favorecía.

Hoy no estaba de tanto humor. Se había despertado algo decaído por el maravilloso sueño que había tenido la noche anterior, y no quería despertar, quería sumergirse para siempre en ese sueño tan cálido que hace años lo volvía loco. Y cada día se convencía a si mismo de que jamás volvería a esa calidez que le había cambiado la vida.

-Mierda, Kitty ¿De dónde sacaste eso?- preguntó Chanyeol al momento que entraba a la habitación del chico de pelo rosa. Lo pilló frente al espejo, probándose una falta tableada negra, demasiado reveladora- Me parece que la he visto antes.

- Apuesto a qué si. Era de tu hermana- contesto mirándose a si mismo en el espejo- Se me ve divina. Me queda mejor que a tu hermana.

Chanyeol le resto importancia a lo último y se tiró de espaldas a la cama, recargándose en sus codos para seguir viendo al pelirosa. Que seguía mirándose y levantando más la falda para mostrar más la piernas. Chanyeol se mordió el labio y recorrió con la mirada la figura del chico. Debía admitirlo, el desgraciado era malditamente caliente, y aquella falda le resaltaba su bien atribuido trasero.

Kitty le dedicó una mirada coqueta desde el reflejo del espejo.

- Debería cobrarte por cada vez que te me quedas viendo el trasero- dijo antes de girarse al pelinegro - Pero no lo hago porque me siento halagado, se que soy hermoso - le guiño al momento que se sacó la falda y la cambio por sus pantalones que anteriormente tenía.

Solio de su habitación para irse a la sala y tumbarse en el sillón y nuevamente suspirar pesadamente. Talvez era hora de dejar ir a ese ser que cambio su vida.

-Channie- dijo cuando noto la
presencia del pelinegro - Estoy en la etapa de superación- dijo mirando a un punto fijo de la pared.

Chanyeol se dejó caer en el sofá individual frente al pelirosa. Siempre era lo mismo, desde hace poco más de una año que conocía al chico, casi todos los días decía que estaba en la etapa de superación. Nunca supo porque, hasta que finalmente el pelirosa le confesó que había conocido a alguien y este le había salvado la vida cuando tenía trece años, y era el responsable de que Kitty estuviera justo ahora frente a el, metido hasta el cuello en la mafia más poderosa de Corea. Kitty había dejado su lujosa y aburrida vida atrás, con la esperanza de volver a ver aquel chico. Al principio, había creído que el pelirosa estaba loco, cosa que era absolutamente cierto, pero aún después de varias charlas, lo comprendió, solo un poco, pero lo hizo.

Al final de todo, cada uno busca su propia forma de sentirse vivo.

Ver a Kitty eufórico cada que estaban en medio de una lluvia de balas, o yendo a ciento ochenta kilómetros por hora, incluso corriendo que por sus vidas, se atrevería a decir que nunca antes había visto algo parecido ¿Quién en su sano juicio se reiría mientras le apuntan con con una pistola directo a la frente y otra al corazón? ¿Quién se se atrevería a saltar desde quince pisos directo a una piscina sin la certeza de si está llena o no, mientras muestra el dedo corazón de ambas manos? Chanyeol quiso reír, al recordar eso, después de todo, así fue como conoció a Kitty, el dedo corazón fue para el, y lo más loco de todo, es que esa vez Kitty ni siquiera estaba siendo perseguido, mucho menos estaba acorralado, fue solo por pura diversión.
Definitivamente el chico estaba loco, pero aún después de toda esa locura y los aires de diva, agradecía que Kitty estuviera en su vida. Había perdido la cuenta de cuántas veces le había salvado la vida.

-Pero es que era tan hermoso, Channie- la voz del pelirosa lo saco de sus recuerdos. El chico seguía con la visita en el techo, aunque muy bien sabía que su mente estaba en otro lado- Me preguntó cómo será ahora.