45

2.1K 161 9
                                    

Me desperté sintiendo un peso en mi pecho. Bajé mi mirada y vi a Lisa durmiendo plácidamente, mientras respiraba tranquila. Sonreí al recordar lo que había pasado anteriormente.

La puerta principal se abrió, haciendo que entrara en pánico.

-Lisa, Lisa- Dije moviéndola.

Lisa se despertó y se froto los ojos.

-Mi mamá esta aquí, tienes que vestirte- Dije apurada.

Lisa se levantó y agarró su ropa, vistiéndose en tiempo récord. Hice lo mismo que ella y acomodé mi pelo, mirándome en el espejo que estaba ahí.

-Rosie- Dijo mi mamá tocando la puerta.

-Pasa- Dije.

Entró y saludó a Lisa, quien estaba un poco tensa y nerviosa. La saludó de vuelta y se sentó a mi lado.

-Iré a dormir, avísenme si necesitan algo- Dijo y salió de la habitación.

Solté un suspiro de alivio y me tumbé en la cama, sintiendo a Lisa hacer lo mismo.

-Eso estuvo cerca- Dijo Lisa apoyándose en mi abdomen.

Acaricié su pelo y ella sonrió mientras cerraba los ojos.

-¿Que hora es?- Pregunté.

-Son las...- Levantó la cabeza para mirar el reloj de la pared- 2:30 de la mañana- Dijo volviendo a recostarse.

-¿Dormimos tanto?- Dije extrañada.

-Hicimos algo más interesante amor- Dijo riendo.

Sentí como la sangre me subía al rostro y le pegué en la frente, haciendo que volviera a reír.

-¿Tienes sueño?- Preguntó.

-No, ¿tú?-Dije.

-Tampoco- Dijo- ¿Puedo sacarle fotos a tus dibujos?- Volvió a preguntar.

-¿Para qué?- Pregunté.

-Quiero tener un recuerdo de ti cuando me vaya a Inglaterra- Dijo.

Sonreí como idiota al escuchar eso.

-Seguro- Dije.

Se levantó y buscó su cámara entre las cosas del escritorio. La tomó y buscó algunos de mis dibujos. Tomó uno de unos ojos, que, casualmente, había dibujado cuando recién la conocía y no sabía que era todo aquello que me causaba.

Movió algunas cosas y apoyó el dibujo suavemente en el escritorio. Le tomó unas fotos. Se veía muy concentrada y metida en lo que hacía, se veía jodidamente sexy. Buscó otro dibujo e hizo lo mismo que con el anterior. Repitió lo mismo con algunos más y se volteó, con dos dibujos en sus manos.

-¿Y estos?- Dijo.

Se sentó a mi lado y me los pasó, dejando que los mirara.

-Pues, los dibujé cuando apenas nos conocíamos, no me daba cuenta de porque lo había hecho hasta nuestro primer beso- Dije.

-¿Cómo es que eres tan hermosa?- Dijo mirándome.

-Para- Dije tapándome la cara.

Rió tiernamente y se sentó entre mis piernas, pasando sus piernas por mi cintura y sus manos por la misma. Pegó su frente con la mia y rozó su nariz con la mia, Lisa tenía ese poder de saber convertir el más mínimo momento en algo especial. Todo con ella era especial.

La atraje a mi y le di un beso en la frente, luego en la nariz y finalmente en los labios.

-Te quiero- Susurró cuando nos separamos.

Sonreí.

-Yo también Lili- Dije en el mismo tono.

Sonrió y apoyó su cabeza en mi hombro, escondiendo su rostro en la curvatura de mi cuello. Acaricié la parte trasera de su cabeza, sintiendo como cerraba los ojos y dejaba un beso en mi cuello, que, por mas de que lo haya hecho inocentemente, no pude evitar erizarme.
Escuché su risa y me abrazó mas fuerte, como si yo me fuera a escapar de sus brazos.

-¿Te acuerdas...que yo te prometí que me quedaría siempre contigo?- Preguntó en voz baja.

-Mmh- Dije en tono de afirmación.

-¿Tú te quedaras siempre conmigo?- Pregunto.

Me quedé en silencio, aquella pregunta me había tomado por sorpresa.

-Claro que si, Lili- Dije- Por nada del mundo me iría.

Se separó de mi y me miró, con una mirada que no sabía como describir, era una mezcla entre amor y miedo, sus ojos brillaban como normalmente lo harían, la luz hacía que estos se vieran mas oscuros. Me acarició la mejilla suavemente, analizando todo mi rostro, acercándose a mi lentamente, tal y como la primera vez.

Me besó con ganas, con amor, diciéndome sin palabras que se sentía igual que yo, que, por mas de que no lo dijéramos, nos amábamos cono nunca habíamos amado a nadie.

El beso se torno más intento y profundo. Se posicionó encima mío y metió sus manos en mi camisa, subiéndolas hasta llegar a mis pechos, apretándolos ligeramente, haciendo que mordiera sus labios. Bajó a mi cuello y repasó las marcas que había dejado anteriormente. Apreté su nuca, atrayéndola mas, si es que era posible. Clavó una de sus rodillas entre mis piernas, por lo que solté un gemido ahogado.

-Lisa..- Dije agitada- Lis...mi mamá esta en casa- Susurré como pude.

Se separó de mi y una sensación de vacío me invadió, por lo que me abracé a ella sin querer separarme. Miré la hora, 3:00.

-Deberíamos dormir, mañana tenemos clases- Dije.

Lisa asintió y se paró para apagar la luz. La apagó y se volvió a acostar. La luz de la luna entraba por la ventana e iluminaba un poco la habitación, lo suficiente como para dar un ambiente cálido.

Me abrazó y apoyé mi cabeza en su pecho, sintiendo los latidos de su corazón. Acarició mis brazos y dejo un beso en la coronilla de mi cabeza.

-Te quiero- Dije.

-Yo también- Respondió.

Te amo, Lisa.

Mi mejor retrato || CHAELISADonde viven las historias. Descúbrelo ahora