Capítulo 7 (1 - 5)

89 4 2
                                    

Haru y yo corrimos lo más rápido que pudimos a través del oscuro bosque. Incluso aunque estuvimos cerca de tropezarnos con las raíces de los árboles en varias ocasiones, seguimos avanzando sin pausa. El temor de que alguien nos persiguiera y salía de entre los arbustos era constante, haciendo que la adrenalina fluyera por nuestras venas. Sentía que las rodillas me fallarían en cualquier momento, pero me mantenía de pie por pura fuerza de voluntad. Cogiéndome rápidamente de la mano, Haru tenía la mirada centrada en el camino frente a nosotros, a la vez que guiaba.

(¡Oh, Haru!)

Lo llame por su nombre en mi mente una y otra vez, apremiándolo silenciosamente a seguir. También pensaba en lo que había pasado hacia apenas unas horas.

*****

La luz del sol ocultándose, le daba al bosque un brillo anaranjado. Sintiendo algo, Haru miro por encima de sus hombros.

Haru: Ya vienen.

Ayame: ¿Quién?

Yo también mire haría atrás, pero todo lo que vi eran árboles, con las ramas que se balanceaban suavemente por el viento.

(¿Tan pronto han enviado a alguien desde el Barrio Rojo?)

Las cortesanas que huían, eran perseguidas por los guardias del Barrio Rojo.

(Si nos atrapan, ¡se llevarán a Haru de vuelta!)

Un escalofrío me recorrió la yema de los dedos, mientras las palabras de Haru me llenaban de inquietud. Apreté mis manos para impedir que siguieran temblando.

Haru: No te preocupes. Te protegeré. Vamos.

Ayame: Vale.

Asentí, pero tenía la garganta completamente seca.

(Haru me protegerá con su espada si es necesario.)

Ya le había visto antes cortar a alguien frente a mí. Pensar en ello hizo que me doliera el estómago.

(Pero...)

Apreté mis puños con más fuerza, hasta clavar las uñas en la palma de mi mano.

(No quiero que tenga que volver a matar.)

(Aunque sé que quizás este no sea el mejor momento para decir eso.)

Sintiendo mi preocupación por mi silencio, Haru cogió mi mano.

Haru: Todo estará bien.

Ayame: ¿Tú crees?

Haru me mostro una sonrisa tranquilizadora. Me trajo algo de alivio, aunque solo fue un poco.

Haru: No temas. Nunca volveré a matar a alguien frente a ti. Ahora nadie es mi dueño. Ya no soy un asesino.

Su sonrisa tranquila y sus reconfortantes palabras me hicieron respirar con fuerza.

Ayame: ¿Estás seguro?

La mirada de Haru se suavizo. Deposito un beso en la parte de atrás de mi mano.

Haru: Si eso es lo que deseas, te lo juro. Ahora cada parte de mí, te pertenece.

******

Después de que el sol se ocultara, Haru y yo continuamos corriendo. En la oscuridad total de la noche, hicimos un pequeño fuego y nos acurrucamos juntos.

Haru: Debes tener frio.

Ayame: Tú también, Haru.

Nos abrazamos el uno al otro, compartiendo nuestro calor. Deje salir un dudoso suspiro de alivio, pero podía sentir la tensión en los hombros de Haru.

Destined to love en español [Ruta Kirisato]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora