❝Hay una ciudad donde cada persona tiene un color especial y un significado propio.❞
Myoui Mina era paz y tranquilidad, sólo eso, nada más. Después de todo y podía vivir así para siempre.
O eso creía hasta que una persona nueva apareció.
Son Chaeyou...
Se sentó en el pasto de su jardín delantero y pasó sus manos por encima de las plantitas que se encontraban allí, algunas se abrieron pero otras aún eran capullos cerrados.
No quería desanimarse, así que trató de pensar en otras cosas.
Tarareó una canción que había escuchado hace poco en la radio, y jugó con las mariposas que se acercaban juguetonas.
No advirtió la presencia de otra persona observando su entretenido momento, Mina la miraba desde la puerta de su hogar.
La chica azulada se sentía profundamente arrepentida, porque las intenciones de Chaeyoung siempre fueron las mejores y ella lo echó a perder.
Sólo por un estúpido pensamiento que le venía comiendo el cerebro de a poco.
"Chaeyoung, deja de ser tan adorable. Me estoy enamorando de ti y eso me enoja."
Cerrando sus ojos lentamente, Mina concentró sus pensamientos en el pasto que acompañaba a Chaeyoung el pequeño jardín.
Hizo el mayor esfuerzo que pudo, tanto así que le dolió un poco la cabeza.
Pero logró su cometido, Chaeyoung observó como una rosa de color azul crecía justo frente a ella como si fuera arte.
Era perfecta y tan brillante.
Eran las disculpas de Mina.
Era el alma transparente y calmada de la mayor, intentando decir que sentía mucho haber hecho que un ser tan adorable derramara lágrimas por alguien que no valía la pena.
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Amo :p
No suelo actualizar tan tarde, esto es una prueba para ver a que horas puedo actualizar.
