𝗠𝗲𝘀𝗲𝗿𝗼 ; 𝖳.𝖢 *𝗣𝗔𝗨𝗦𝗔𝗗𝗔*

𝑋𝑋

Astrid Jones

Toda la semana había pasado normal, Emma y yo nos contentamos y ya no tocábamos el tema de James. Tenía todo tiempo del mundo para descansar el fin de semana, no tenía planes y eso era genial.

Estaba viendo "𝖤𝗅 𝖺𝗋𝗈", hoy era un día exclusivamente para películas de terror mis favoritas. El sonido de mi móvil hizo que despegará mi atención del televisor y la pusiera en el móvil.

Era una llamada de Timothée, ¿Que es lo que quería? ¿Sé habrá equivocado de número? Dejé mis pensamientos de lado, contesté.

- ¿Hola? ¿Astrid Jones, cierto?

- Esa soy yo...

- Holaa... ¿Nos vemos a las 04:00 en el Dunkin' Donuts que te dije?

«¿Dunkin' Donuts?»

Hice una pequeña recapitulación de todo, hasta que llegué con ese recuerdo, ¡claro!, iba a salir con Timothée y Kue... ¡IBA A SALIR CON TIMOTHÉE Y KUE! oh Dios, ¿Qué horas son?

-¿Astrid...?

- Oh, sí, sí claro. Nos vemos ahí- Solté una risa nerviosa - Vale, adiós.

- Sí, adi...- colgué.

Dí un suspiro, al menos tenía tiempo para vestirme y bañarme. Y pensar que tenía un día para quedarme acostada en pijama.

...

Entré al estacionamiento, busqué con la mirada al ruloso, no estaba tan difícil. Normalmente las cafeterías estaban llenas los fines de semana, ya sabéis, salidas familiares, pero hoy no era el caso, no estaba lleno, y eso era bueno. Tanta gente me suele agobiar.

- Astrid- me acerqué a ellos.

- Timothée... Si no te molesta puedes decirme Ast- me senté frente a él.

- ¡Preciosa! - Kue llegó corriendo hacia mí y me abrazó.

- Kue, qué gusto verte.

- No ha dejado de hablar de ti... Le caíste muy bien.

- Sí, tú eres mi mejor amiga.

- Oh, es un placer- le sonreí.

Soy su mejor amiga y apenas se su nombre, ser amiga de niños es mi pasión.

- ¿Podemos ir a jugar en el tobogán?- preguntó el niño mirándome fijamente.

- Es qué... Mira soy un poco mayor para jugar ahí, pero puedes jugar con los otros niños.

- Vale- bajó la mirada triste y fue a los juegos.

Ahora estábamos Timothée y yo solos, Dios, nunca imaginé que fuera tan incómodo.
¿De qué hablaría con alguien que solo se su nombre y su dirección?

- Y... ¿Qué tal todo?- pregunté.

- Bien -respondió.

Es un chico de pocas palabras, bueno, tampoco es como que alguien que acabas de conocer te contará su vida sin mencionar que nos "conocimos" me rechazó rotundamente a mi "petición" de móvil. Ay, conchuda Sao.

Estaba empezando a pensar seriamente en irme, tal vez fue un error aceptar venir aquí. Sí, totalmente, era un error. Timothée se levantó de la mesa, ¿Se iba a ir sin el niño?

-Voy a pedir comida, ¿Tú... quieres algo?

-Mmm un matcha latte, porfavor.

-Solo... ¿Eso?

-Sí, solo eso -no dijo nada y se fue a hacer el pedido.

Esto era demasiado incómodo.

Mientras Timothée fue a hacer el pedido, yo me disponía a pensar sobre los lazos familiares de él y Kue, ya había descartado la posibilidad que era si niñero, tenían facciones muy parecidas, tanto el cabello como los ojos, tal vez su primo o hermano, sería lo normal.

No creo que se enoje si le pregunto, ¿O si? No lo sé, lo único que sé es que me carcome la curiosidad.

-Llegué.

-Ah, vale...

-¿Pasa algo?

-No, no, todo bien -le di una pequeña sonrisa.

-¿Segura?

Era ahora o nunca, total, no tengo nada que perder...

-Mmm, ¿Tú y Kue son primos, hermanos... tú hijo?

-Oh Kue es mí...-Guao, no creo que me atreví a preguntarle -Sobrino, es hijo de mi hermana

«¿Timothée tiene una hermana?, interesante»