capitulo: 12

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MI ÁNGEL GUARDIÁN: CAPÍTULO: 12

Viajando juntos

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Kagome Pov:

Todos nos sorprendimos mucho cuando Sesshomaru arregló el boomerang de Sango, si bien una parte de esa sorpresa fue por el hecho en sí de que Sesshomaru hiciera eso, otra parte, la mayor parte diría yo, fue por el hecho de ver a Sesshomaru prestándole ayuda a una humana, lo sé yo soy humana y está conmigo, pero él me había explicado antes que aún no cambiaba del todo su forma de vernos a los humanos y ahora, verlo ayudando a Sango era…extraño.

-¿En qué piensas?- me dijo Sesshomaru mientras me rodeaba la cintura con sus brazos

-Nada importante- Le respondí. Y es que no quería sacar el tema a conversación, ya me lo contaría él cuando le pareciera conveniente

-Sé que estás pensando- dijo mientras me sonreía- estás tratando de explicarte el porqué ayude a Sango, si hasta hace poco te había dicho que mi forma de ver a los humanos no había cambiado mucho- finalizó y por la mueca de sorpresa en mi rostro dedujo que estaba en lo correcto

-Mmmm algo así- dije. No iba a mentirle pero tampoco lo interrogaría sobre eso

-Luego te lo diré, pero antes-dijo mientras daba toquecitos a mi nariz con sus dedos-tengo algo que hacer- concluyó mientras se dirigía hacia Inuyasha, que se encontraba en las ramas de un árbol a orillas de la cabaña de la anciana Kaede.

-Inuyasha, necesitamos hablar- Dijo Sesshomaru. Inuyasha se sorprendió al igual que los demás de no encontrar el tono hostil en la voz de mi youkai, admito que hasta a mi me sorprendió un poco, el tono que uso era uno tranquilo, como el que cualquiera de nosotros usaría para hablar de temas triviales

Luego de que salió de su sorpresa, Inuyasha se bajo del árbol y siguió a Sesshomaru, internándose ambos en el bosque. Iba a seguirlos cuando la mano de la anciana Kaede posada en mi hombro me detuvo

-Mi niña déjalos, ellos tiene asuntos que arreglar, necesitan esto si cada uno va a seguir como en estos momentos, conviviendo juntos- dijo la anciana. Me sorprendí, ¿eso era lo que Sesshomaru quería, viajar con mi grupo todos juntos? Bueno…ya lo sabría cuando el volviera

Sesshomaru Pov:

Por irónico que parezca Inuyasha y yo estábamos frente al Goshimboku, el árbol sagrado que aún perduraba en la época de Kagome, por un momento reino el silencio, un silencio que extrañamente no era incómodo, pero finalmente decidí romperlo

-Inuyasha sabes que hay un tema que no podemos obviar entre nosotros, más bien dos…- dije volteando a verlo, pues hasta hace unos momentos veía las hojas del árbol siendo mecidas por la brisa de la tarde

-Claro que lo sé, te refieres a Kagome y a nuestra rivalidad- dijo Inuyasha como quien habla de cosas sin importancia aunque yo muy bien sé que le es difícil hablar de ello

-Exacto- respondí- Primero me gustaría hablar de Kagome, sé que sentiste y quizá aun sientes algo por ella, pero como bien sabes ella es mi mujer y ambos estamos completamente decididos a estar juntos…- dejé las palabras en el aire para ver qué era lo que Inuyasha pensaba de ello

-Lo sé, y lo que dije esta mañana que los encontré en el pozo fue sincero, si sentí algo por Kagome, pero comprendí que yo no puedo hacerla feliz y que tú si puedes hacerlo, ella te ama y tú, aunque no eres de sentimentalismos también le correspondes con la misma intensidad, solo hazla feliz, aunque si la llegas a hacer sufrir te las vas a ver conmigo

-Explícate en lo de tus sentimientos- dije, realmente me confundió el hecho de que hablase de Kagome tan desinteresadamente si la amaba

-Ja, la verdad es que para algunas cosas eres muy lento Sesshomaru-hice una mueca de desagrado, pero dejé que continuara-Confundí mis sentimientos con Kagome por el parecido con Kikyo, eso es cierto, pero en estos días que ella estuvo lejos estuve pensando-ante esto hice una pequeña mueca de sorpresa, a lo que Inuyasha gruñó, pero continuó hablando- y llegué a la conclusión de que veía en Kagome la oportunidad de cambiar los errores de mi pasado, si era celoso y posesivo, es porque deseaba protegerla como no pude con Kikyo, ya le había fallado a Kikyo hace 50 años, no le fallaría a ella, ahora comprendo que para mí es como alguien de mi familia a quien debo proteger-Finalizó

-Ya veo, pero sabes, despreocúpate- dije, pude apreciar la confusión marcada en su rostro-el hecho de que Kagome sea ahora mi mujer, no quiere decir que no va a hablarte o que no vas a volver a verla, además ella te quiere, he comprendido que lo hace de una manera diferente y eso no va a cambiar y no tengo problema con ello- al finalizar, Inuyasha me veía con una mueca de incredulidad, luego de unos minutos habló de nuevo:

-Y ¿qué era lo que querías hablar de nuestra rivalidad?- me dijo. Yo me recosté en el tronco del árbol sagrado y él hizo lo mismo, dirigí una mirada a mi alrededor, caía la tarde, el cielo estaba teñido de tonos naranjas, amarillos y rojizos, la brisa mecía los árboles y nuestros cabellos, suspiré y le dije:

-¿Seguirá así?

-No lo sé-dijo Inuyasha algo indeciso- tú siempre has querido la espada de mi padre y tomar mi vida, todo ha venido por eso y…me odias- dijo en un suspiro de cansancio

-Te equivocas-dije con tono indiferente-no te odio…

-¿Pero si tú siempre….?-Claramente Inuyasha no entendía y yo debía explicarle

Lo que realmente sucede es que yo…te envidiaba-dije desviando la vista al horizonte- no podía creer que tú tenías todo lo que yo, aún siendo tan privilegiado en ciertas cosas, deseaba y no podía tener-suspiré recordando cosas de hace ya muchos años-empezando de que nuestro padre amaba a tu madre como jamás amó a la mía, nos dejó a mi madre y a mí por el deseo de formar una familia con tu madre y contigo, familia que yo deseaba y no tenía por lo distantes que eran mis padres; luego vino el hecho de que mi padre sacrificara su vida a favor de la salvación tuya y de tu madre, cuando conmigo casi nunca tuvo atenciones; con el pasar de los años tuviste amor al lado de esa sacerdotisa llamada Kikyo, cuando yo de los humanos solo había recibido odio y por ello pagaba con la misma moneda y para rematar cuando Kagome llegó a tu vida formaron un grupo tenias amigos y nuevamente eran como esa familia que yo desee y aun no tenía, las cosas cambiaron un poco cuando traje a Rin conmigo, pero ese sentimiento de frustración seguía allí, hasta que con Kagome pude ver las cosas de otra forma y darme cuenta de que la espada, el odio que decía tenerte y todo lo demás solo eran para cubrir el hecho de que yo anhelara lo que tú tenías- finalicé sin dejar de ver el horizonte que ahora era de un color rojizo con notas púrpuras, anunciando que la noche se acercaba

-Sesshomaru…irónicamente yo también quería algo que tú tenías, ser un youkai completo- dijo Inuyasha con la comprensión en sus ojos- ¿qué pasará ahora?- preguntó

-Después de aclarar todo es a ti a quien le corresponde decir que piensas de todo esto- dije viéndolo fijamente y esperando una respuesta

-Pues supongo que no seremos ahora mismo como la relación familiar ideal, pero…podemos empezar por tener una sana convivencia-dijo Inuyasha dudoso

-Por mi está bien, además de que es bueno haber aclarado todo porque no quería separar a Kagome de sus amigos, así que habiendo solucionado todo, creo que podemos viajar todos juntos- dije

-Me parece bien además si estamos juntos nos irá mejor en esta guerra contra Naraku ¿no crees?- pregunto Inuyasha

-Aja-dije en tono casual mientras veía la luna que acababa de hacer su aparición en el cielo

-¿qué tanto le ves a la luna si es la misma siempre, tienes 400 años viéndola?- dijo mi medio hermano

-Es tranquilizante- me limité a decir

-Pues a mí me parece la misma aburrida luna de siempre y tú llevas 400 años viéndola y la ves como si fuera la primera vez- repitió

-Inuyasha…cállate-Definitivamente alunas cosas no cambiarían, como la dificultad de Inuyasha para apreciar lo que lo rodea, con este pensamiento de mi parte nos encaminamos de regreso a la aldea, donde seguramente todos nos esperaban expectantes por el motivo de nuestra conversación

mi ángel guardiánDonde viven las historias. Descúbrelo ahora