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—¿Donde vas a pasar la navidad este año?

Este tema es uno que tuvo una profunda charla entre mi novio y yo.

Cada uno tenía diferentes expectativas y puntos de vista, por lo que llegamos a chocar en varias ocasiones. Aunque llegar a una solución nos tomó menos tiempo del que había pensado. Yo iba a pasar la navidad con Jungkook y año nuevo con mi madre. Y si se preguntan si ya conocí a los padres de mi novio, la respuesta es si.

Ese día creí que iba a morirme por lo rápido que me latía el corazón.

—Voy a estar con la familia de Jungkook.—respondo después de tragar el último trozo del sándwich.—Igual arreglamos para ir a mi casa después de desear la feliz navidad.

Hoseok asiente concordando. Termina el licuado de banana que se había pedido en  la cafetería.

El silencio entre ambos es uno de los más  cómodos que alguna vez sentí en mi vida. No hacen falta muchas palabras para acabar con el silencio. Estamos solos y además de eso comiendo. Nadie querría que se lo interrumpa mientras come.

Una de las sensaciones más incómodas a mi parecer. ¿Justo tenías que preguntarme algo cuando ves que metí comida a mi  boca? Parece que les gusta ver que estas tratando de masticar más rápido para no dejar esperando a la persona. Yo, en cambio, ignoro y señalo mi boca con tal de decirle que no me joda porque estoy comiendo y no pienso desacelerar para responderle.

—¿Y después Jungkook pasa año nuevo con tu familia? —asiento.

—Sip.—limpio mi boca con la servilleta.—¿Con Yoongi hyung hacen así?

Asiente.—Si. Desde hace 3 años ya.

Abro mis ojos con sorpresa. Toso un poco porque casi me ahogo con la comida y digo.

—¿Ya son 3 años?

—Si.—suspira como un enamorado.—Estoy tan enamorado, Tae.—sonríe sin poder evitarlo y eso logra hacerme sonreír.—Yoongi puede ser un tarado, pero es mi tarado.

Ambos nos reímos y la gente voltea a vernos sin disimulo. Ruedo los ojos y justo cuando estoy por pedir la cuenta se escucha la campanilla, avisando la entrada de alguien a la cafetería. Cuando miro veo a nuestros novios empezar a mirar alrededor del lugar hasta que Jungkook clava su mirada en mí.

Sonrío sin poder evitarlo y estiro mis labios esperando mi beso. Veo  su sonrisa burlona, pero no me importa si así obtengo mi ansiado beso.

Siento sus labios entrar en contacto con los míos de forma suave, dejando un revuelo de mariposas en mi estómago.

—¿Ya se iban? —pregunta Yoongi una vez saluda a Hoseok.

—Si, estábamos por pedir la cuenta.—digo, buscando en mi bolso la billetera.

Una vez llega el chico con la cuenta, me paro de mi asiento con la cuenta en la mano y mi billetera en la otra. Cuando estoy a punto de pagar, veo la mano de mi novio ofrecerle el dinero a la cajera que gustosa lo acepta. Estoy a punto de regañarlo por haber pagado él, pero ahora estoy ocupado marcando mi territorio.

Porque no crean que no vi esa mirada que la tipa le dió a mi novio. Claro que no lo hice.

Golpeo el brazo de Jungkook para hacerle saber mi desacuerdo con que haya pagado y él solo me regala un beso. No puedo evitar sentirme satisfecho, porque justo en aquel momento la chica había vuelto y pudo vernos.

—Yo puedo pagar por mi cuenta, tonto.—digo una vez fuera de la cafetería.

Jungkook sostiene mi mano y entrelaza nuestros dedos. Se me hace imposible no sonreír.

—Este tonto está perdidamente enamorado de ti, ¿sabes?

Sostiene mi cintura en sus manos y me hace mirarlo a los ojos. Rodeo su cuello con mis brazos y me pongo en punta de pie para darle un beso.

—Te quiero, Jungkook.

—Yo te quiero muchísimo más, amor.

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Nerd [kookv-🌺]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora