"Prometo amarte y sin importar el que seguiré amándote, porque nada vale la pena si no estás conmigo" habían sido las palabras suficientes para caer en su trampa, solo dos semanas y ya me sentía agobiada por ella, cada vez que nos veíamos lo único que hacíamos era terminar en una cama gritando y gimiendo su nombre a no más poder, no había conversaciones largas o algo similar, literalmente ella reservaba una habitación de hotel y me decía que lo había hecho para poder vernos, al principio yo intentaba hacer que las cosas fluyeran hacia el lado contrario de donde terminábamos, pero era casi imposible para ella mantener sus manos alejadas de mi y controlar sus deseos de querer "hacer el amor" cada vez que me veía, era gracioso que ella se refiriera a nuestros encuentros como un acto de amor cuando solo me recordaba que para ella era simplemente sexo y nada más que eso; por otro lado estaba Stella quien se había aparecido en mi departamento después de una semana de no haberle contestado, realmente se había preocupado por mi y lo noté al ver como sus ojos me recorrían para encontrar algún daño, abrazarme y solo quedarse así conmigo, era confusa mi "relación" con ella, estaba segura que me gustaba pero no sabía con claridad hasta que nivel me gustaba, aún más cuando evitaba el terminar en la cama conmigo y solo pasábamos la tarde mirando televisión y comiendo pasta, en muchas ocasiones deseaba que los papeles entre Dua y Stella se intercambiarán con tal de no sentirme utilizada por la persona que decía amarme y no sentirme culpable por no amar a la persona que me trataba bien; también estaba Mark que no dejaba de molestarme con el asunto de casarme con él y de admitir que aunque sea por un segundo lo llegué a considerar, sonaba "fácil" el complacer a mi madre y que dejara de pensar que era un "problema", él con tal de conservarme a su lado conseguiría y haría de todo como hasta ahora, pero luego se fue de viaje y mis ideas volvieron a la normalidad, teniendo a Stella tan cerca me era difícil pensar en alguna propuesta que no fuera suya.
-Te amo -no dejaba de repetirme mientras hacia un camino de besos por mi espalda, ya que yo me encontraba acostada boca abajo y ella estaba sobre mi
-Y yo a ti, Dua -sonreí ante un pequeño cosquilleo que provocó al acercarse a mi oreja -No -dije riendo -estoy agotada -sentí sus labios en mi cuello
-Yo también estoy agotada -sentía como una de sus manos se deslizaba por mi cuerpo, delineandolo lentamente -pero necesito más de ti -su mano volvió a la parte baja de mi cuerpo y apretó mi trasero -solo te he visto tres días en una semana y no me es suficiente, necesito más -me di vuelta lentamente y la mire
-¿Podemos solo acostarnos en la cama sin hacer nada mientras me abrazas y me cuentas como te ha ido está semana? -tomé sus mejillas y la atraje a mi para darle un corto beso -¿Podemos? -me dió una sonrisa
-Claro que podemos -volvió a besarme lentamente, disfrutaba demasiado cuando no parecía desesperada o ansiosa de sexo, en esos pequeños momentos podía creer que realmente me amaba y que no solo era sexo para ella -Eres tan hermosa -dijo en cuanto se alejo de mis labios -te amo -acarició mi mejilla
-¿Vas a abrazarme? -rió suavemente para quitarse de encima y se acostó junto a mi para rodearme con sus brazos y mantenerme cerca de ella
-¿Quién crees que gane el partido?¿Liverpool o Everton? -reí ante su pregunta, toda la vida había crecido viendo partidos de soccer y aún no terminaba de convencerme del todo
-¿En serio quieres hablar de soccer? -negó con la cabeza y se inclinó un poco para comenzar a besar mi cuello, no eran ese típico beso húmedo, más bien eran pequeños besos que se repetían rápidamente, era un tanto tierno -Dua, tranquila -reí ante su repentino actitud ansiosa, era obvio que quería continuar con lo de hace unos minutos
-Me vuelves loca -sentía aquel cosquilleo producido por sus besos -Solo se mía, termina con él y quédate conmigo -esos pequeños y rápidos besos pararon para darle paso a besos lentos y pautados sobre mi piel -estoy cansada de verte con él, solo quiero que me ames a mi, que me mires solo a mi, que solo me beses a mi, ser la persona con la que despiertas todas las mañanas y que vez primero, al igual que quiero ser la última persona que veas antes de cerrar tus ojos y también soñar conmigo -una de sus manos comenzó un suave y lento recorrido desde lo alto de mi espalda hacia abajo -quiero ser el centro de tu universo -sentía una clase de eléctricidad recorrer mi cuerpo con esa pequeña caricia de su parte -quiero ser todo lo que necesites, todo lo que siempre haz soñado -se alejó de mí para luego mirarme -¿Qué dices?
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ADORE #Dua Lipa y Tú#
Fanfiction¿Alguna vez se han ido al museo y han quedado impactados por una hermosa pintura o escultura? Les apuesto a que si su respuesta es un sí, cuando la vieron por primera vez fue un gran proceso para poder amar o quedar encantados por ella, seguramente...