Padre Por Acuerdo KookMin

Capitulo 12

—Vaya, no recuerdo que nos hayas invitado a mí y a Eun-na a ir a la playa —murmuró Jimin junto a Jungkook  mientras veía la limusina alejarse.

—Se me ha ocurrido de improviso —dijo Jungkook en tono seco.

—Haces cualquier cosa para desbaratarle los planes a tu madre.

Jungkook se echó a reír.

—Eres la única persona que conozco que utiliza la palabra «desbaratar».

Jimin lo miró enfadado.

—No intentes cambiar de tema. Es así, ¿verdad? De repente se te ocurre la idea de pasar el día en la playa para que tu madre tenga que entretener a tu prometida ella sola.

Lo agarró del brazo, lo obligó a volverse y se dirigió hacia el salón de baile.

—En primer lugar, Jimin, mi relación con mi madre o con mi antigua prometida no es asunto tuyo. Si Yang Mi quiere que Ha-neul la visite, es perfectamente capaz de entretenerla por sí sola. Segundo, si Ha-neul cree que voy a caer rendido a sus pies sólo porque ella lo diga, se va a pegar un batacazo.

—Me imagino que si le propusiste matrimonio, la querrías.

—Ella no resultó ser la mujer que yo pensaba que era.

—Me parece que todo habría encajado perfectamente.

Se detuvo y, con delicadeza, tiró de el para que se volviera a mirarlo. La expresión de Jungkook era impasible.

—¿Te gustaría que se casaran contigo por dinero?

El se encogió de hombros, luchando contra la desesperación que parecía a punto de vencerlo.

—No difiere mucho a casarse por venganza.

—Yo no me casé contigo por venganza.

—No por venganza hacia mí, sino hacia tu madre y tu abuelo.

—No ha sido por venganza exactamente —dijo por fin.

—¿Entonces por qué?

Lo miró y le acarició el mentón; después le rozó los labios con la yema del pulgar.

—Lo he hecho para desbaratarles los planes —dijo—. Ven a la playa mañana. El tiempo promete estar maravilloso. ¿Por qué no aprovecharnos de ello?

—Yo no he dicho que no me parezca buena idea, sólo que no me acuerdo de que me lo hayas comentado antes.

Deseó que hubiera querido llevarlos a la playa por ellos mismos, no por darle en las narices a su madre y a Ha-neul. Pero tendría que aguantarse.

—Un empresario tiene que pensar con rapidez. No tengo intención de pasar la tarde con Ha-neul y mi madre.

—La verdad es que entiendo que no quieras pasar tiempo con tu madre —dijo Jimin, mientras entraban en el salón de baile—. ¿Siempre ha sido tan formal, tan distante? —le preguntó con tacto.

Jungkook lo condujo a un rincón más tranquilo y acercó una silla para que se sentara.

—A Yang Mi le molestó mucho quedarse embarazada de mí y tenerme —dijo, al tiempo que se sentaba en una silla junto a el.

Un camarero se acercó apresuradamente y les tomó nota.

—Oh, Jungkook, no puede ser; tú madre te quiere, lo sé —protestó Jimin cuando se marchó el camarero. Ciertamente, Yang Mi no era demasiado expresiva. ¿Pero qué madre no querría a su hijo?