Obsesión Irresistible || Terminada©

Capítulo 48||

Leah Jhonson

La cercanía de su rostro es tanta que prefiero alejarme, optando por apoyarme contra el asiento, no estoy para tentaciones, mucho menos para jueguecillos. Se que es un agente, se que de una manera u otra ya se ha manchado las manos de sangre con sus oponentes, pero, el que haya asesinado a esa mujer de manera fría, sin titubear, sin importarle quienes estaban a su alrededor, me deja claro que no, no lo conozco como creí que lo hacía, reconozco lo poco que me importó y lo mucho que me satisfizo ver aquello, pero eso no quita el escalofrío que sintió mi piel, lo aterrador de aquel acto y el latido desenfrenado de mi corazón al admitir la satisfacción, al tenerlo tan cerca.

No trae ropa formal debido a que, no vino directamente para trabajar, y verlo con ropa casual y chaqueta de cuero marrón, me resulta caluroso y sofocante.

—Te espero en el auto. —Vuelve a decir sacándome del enorme trance e yéndose a la salida.

—No, no voy a ir contigo. —Suelto antes de que pueda llegar a la puerta, deteniendo sus apresurados pasos.

—¿Sigues sin entender las cosas, no? —Inquiere volteándose con un gesto serio.

—¿Qué sigo sin entender las cosas, dices? —Replico con molestia. —Vienes y me dices que vas a darme lo que pido, lo que necesito, cuando ni siquiera yo lo tengo claro, ¿Quién diablos te crees, Hunter? ¡No voy a volver caer en tus redes!—Exclamo levantando mi tono y la risa burlesca y seca que suelta, hace que me encoja en el asiento.

—Volvimos al profesionalismo Leah, no se que es lo que está pasando por tu diminuto celebro, es más no pensé que tuvieras una mente tan retorcida y poco eficaz por que claramente estoy hablando de enseñarte defensa personal. —Escupe con un tono burlesco que me llena de rabia.

Mi mente se queda totalmente en blanco, y la vergüenza que me abarca es tanta que siento como arde en toda piel. Mil veces estúpida. Me pongo de pie y me acerco hasta estar a una distancia prudente, encarandolo, no me voy amedrentar por eso.

—Logan, ya hable con Logan sobre ello, aprenderé con él. —Respondo recogiendo mis cosas. —Coordinaremos más tarde. —Digo y niega con una sonrisa de medio lado cargada de arrogancia y egocentrismo.

—Por el momento estoy a cargo, y Logan está muy ocupado en otras cosas. —Expulsa volviendo a tomar el pomo de la puerta.—Agradece que te voy a dedicar algo de mi tiempo, y es solo por que lo necesitas. Te espero abajo. —Reitera cortante para luego largarse.

¡Joder! Ni siquiera quiero tenerlo cerca, y ahora resulta que va a ¿enseñarme defensa personal? Es un imbécil no le pedí tal cosa y me trata como si yo se lo hubiera rogado, el tener que soportarlo más de lo debido solo me va a ocasionar estúpidos problemas.

Me quedo unos diez minutos apoyada contra las puertas de cristal, con pensamientos destructivos azotando mi cabeza, y, finalmente suspiro y bajo con un único planteamiento en mente, no perder el control, tener el control, mantenerlo, me repito mientras el ascensor desciende hacía abajo.

Una vez que se detiene y abre sus puertas camino con una lentitud excesiva hacía el estacionamiento, a medida que me acerco resto velocidad a mis pasos, pero todo aquello queda de lado en cuanto veo a Hunter apoyado contra la puerta de su coche conversando con Melanny casi en su maldito encima, ¿Qué no conoce el significado de espacio personal, esa estúpida? Me acerco cruzada de brazos y me poso frente a ambos con una cara de molestia que me es imposible disimular.

—¿Nos vamos? —Inquiero y Melanny me observa arqueando una de sus cejas con algo de interrogación mezclada con confusión y la ignoro dejando mis ojos en el rostro del hombre que ya me observa, con la misma arrogancia de hace poco, solo que esta vez acompañada con molestia. —Tengo que pasar a mi apartamento para darme una ducha, y más tarde iré a ver a Maya, mi tiempo también me resulta valioso, y no quiero perder un mínimo segundo, así que vámonos ya. —Vuelvo a decir, y el muy idiota ladea su cabeza con una media sonrisa cargada de ironía.