Capítulo 30||

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Leah Jhonson


El orgasmo llega a mí de manera arrasadora, muerdo su hombro con tanta fuerza que logro hacerlo sangrar levemente, a pesar de ello no se queja, no se detiene, sigue embistiendo mi interior jadeante por unos segundos más hasta que su eyaculación llena el preservativo. Mi respiración se encuentra tan agitada que me cuesta mucho llevar el aire hasta mi nariz, me quedo acostada, exhausta sin poder moverme, aún cuando él lo hace para ir al baño.

Pasan los minutos, y cuando logro estabilizarme me pongo de pie para colocarme mi ropa interior, me coloco las bragas las cuales encuentro a una orilla de la cama, el sostén no lo veo por ningún lado por lo cual empiezo a desesperarme.

¡La he cagado! La he cagado en grande, ¿Cómo rayos se me ocurrió decir tremenda estupidez? ¿Suya? ¿Siempre he sido suya? Dios... ¿Es así es cómo me siento? Me gusta si, me gusta demasiado, tanto como me cae mal, pero por ello no puedo ponerlo por encima de mí, es un idiota y eso de que le gusto, ya se que es verdad, me sorprendió que me lo haya dicho, pero realmente ya lo sabía, que se moleste a cada nada cuando estoy con Logan o Benson, que me defienda de Nial y de chicas celosas maniáticas, me lo ha dejado claro ya.

Pero también me ha hecho mucho mal, me ha ignorado, rechazado, humillado, e insultado tantas veces, ¿Cómo puedo simplemente olvidar todo eso con un "Me gustas" ?

Joder estoy loca, estoy jodidamente loca... Por él.

Debo irme, ahora si debo irme, ya hemos follado, ya ambos hemos quedado satisfechos, todo ese vómito verbal fue con este fin, podría encararlo, pero ¿Cómo demonios, después de decir esa estupidez? Va a humillarme una vez más, y prefiero irme por mi propia decisión, antes de que me eche él.

Continúo buscando mi sostén sobre la cama con prisa, quito las sabanas con olor a sexo y vuelvo a tender la cama con rapidez sin conseguir nada, Hunter sigue en el baño y ya han pasado largos minutos, puede salir en cualquier puto instante, me agacho hasta la cama consiguiendo captar mis zapatos altos más no mi sostén, la falda y mis demás prendas las tomo del suelo, las sacudo con el fin de que el sostén salga volando pero no pasa.

El sonido de la puerta del baño, me hace llevar mis ojos hasta ahí, Hunter sale con tan solo un pantalón de chándal gris puesto, con una toalla pequeña en su mano derecha secando su cabello húmedo y en su otra mano mi puto sostén negro. Su sonrisa de medio lado se extiende cuando me ve con mis bragas puestas y ropa en mano.

—¿Por qué demonios tienes mi sostén? —Me apresuro a preguntar.

—¿Pensabas huir? —Contraataca él apretándolo entre su mano.

—¿Huir? Ni que fuera una fugitiva. Si quisiera hacerlo lo hubiese hecho sin el. —Contesto rodando mis ojos. Su vista baja de mis ojos a mis pechos, por lo cual bufo molesta llevando mis prendas hasta ahí. —Dámelo. —Exijo extendiendo mi mano, la cual el toma y tira de ella llevándome contra su pecho. ¿Qué carajos le pasa?

—Bajamos, cenamos y hablamos, ¿Ok? —Demanda como si estuviéramos en la empresa.

—¿Hablar sobre qué? La calentura ya pasó y quiero irme a mi casa. —Le digo con mis repentinos nervios a flote.

—Ve y tomate una ducha primero. —Vuelve a decir ignorando mis palabras, arrebata mis prendas de mis manos, y me suelta para acercarse a su armario.

Lo abre para sacar una polera negra y un bóxer del mismo color, voltea entregándomelo con su expresión seria, la cual cambia cuando mira mis pechos.

—Te espero abajo. —Sale antes de que pueda decir algo, dejándome sola en la habitación.

Obsesión Irresistible || Terminada©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora