Rebecca: Venganza

XII: Más preguntas

Traté de abrir la puerta, pero esta no se abría, podía escuchar los gritos de los chicos desde el otro lado, seguía intentando abrirla, hasta que una voz detrás de mi se escuchó.

Eran simples susurros, me giré y pude ver de divisar unos ojos rojos, era lo único que producía luz en aquella oscura habitación.

Me asuste un poco y retrocedí, chocando con la puerta, el ambiente aquí se siente horrible, como si me asfixiaran y me apretaran los intestinos, estoy segura de que si pasó un minuto más aquí me voy a desmayar, puedo escuchar unos leves susurros cerca de mi.

—S--ah M-r--le —podía escuchar aquellas voces decir.

¿Qué se supone que es eso?, espera, si es lo que creo que es sería Sarah Miracle, pero, ¿por qué escucho ese nombre?, no lo entiend-

Los chicos lograron abrir la puerta y caí de espaldas.

—¿¡Estas bien!?, ¿¡te pasó algo!? —Hunter me levantó del suelo y me reviso por todos lados, yo sólo negué— mira niñito —fijó su mirada en Damien— si algo le pasa, te juro que colgaré de cabeza y la usaré de piñata.

Damien solo lo miró seriamente.

—Hunt —giró su cabeza para verme de reojo— estoy bien, sólo no podía salir, es todo.

—Bien —habló poco convencido.

—Damien, tienes razón, algo anda mal aquí, en especial en esa habitación, pensé que me desmayaría, tenemos que hacer algo, pero no se que.

—Creo que primero tenemos que ver que esta provocando eso —mencionó Viv.

—Cierto, ¿viste u oíste algo ahí dentro Becca?

—Ví unos ojos rojos y unas sombras oscuras, realmente no pude ver mucho ahí dentro, es muy oscuro.

—Damien creo que ya sé lo que es —él lo miro— ¿acaso practicas magia negra?

—...Si, ¿por que? —cuánta honestidad.

—Por que estoy seguro de que esto es un demonio.

—¿Y que vas a hacer?

—Hay que limpiar el lugar, aunque no estoy segura de cómo, pero tal vez por aquí haya un libro que nos sirva, digo, estamos en una librería.

—Es cierto, a ver, Viv tu busca un libro que hablé sobre demonios por ese lado —apunté hacía la derecha.

—Bien —caminó y luego desapareció entre los estantes.

—Ustedes busquen por allá y yo por acá —ambos chicos se fueron por la izquierda y yo por el centro.

Caminaba mientras leía los apartados de los estantes, herbolaría, protección, rituales, camino un poco más y veo un libro que me interesa "Biblia satánica", tal vez no haya algo que sirva mucho, pero probablemente encontremos algo.

—¡Encontré algo!

Escuché a los chicos correr hacía el pasillo dónde yo estaba, hasta que de un momento a otro mis ojos comenzaron a ver borroso, las luces blancas irritaban mis pupilas y mi cuerpo era tan liviano como una pluma de Fénix

Caí abruptamente al gélido suelo y lo último que logre ver fueron las caras de preocupación de los chicos.

...

Abrí los ojos con dificultad por la inmensa cantidad de luz artificial, giré mi vista hacía un lado y pude ver una pequeña aguja mariposa en mi brazo, seguí con la mirada la fina manguera conectada a mi cuerpo y me encontré con una bolsa de suero.