Subí al ático y busqué entre las cajas para ver si aun estaba ese recuerdo, era una tonta esperanza que pensé que podía estar...
Pero allí estaba, mi viejo vestido, el cual yo había ocultado tan bien que ni yo lograba encontrarlo en el lugar, entre las cajas estaba dentro de una bolsa cubierta de polvo y de telas de arañas. el señor bean había muerto unos años después que me fui de "este mundo" y siempre agradecería todo lo que había hecho por mi.
En mi pasado, para mi en muchos momentos fue alguien que me apoyo realmente y era como el padre que nunca tuve... mire el vestido rosado en mis manos todo arrugado, suspire al recordarlo, ya que él fue realmente alguien especial con mi hermano y conmigo, lo tomé y fui a lavarlo con delicadez, colgándose para que secara en el lavado
- ¿Y ese vejestorio todo manchado?— Pregunto curioso Oliver al verme estirar la falda.
- Mi vestido,del primer baile al que fui.— Respondí orgullosa.
- ¿Tu? Esa historia no me la habías dicho jamás —dijo el sorprendido.
- Es triste. Solo eso... mejor no hablemos de eso— respondí mientras iba a abrazarlo en búsqueda de Consuelo, él se dio cuenta y me abrazo, sabia que mi pasado no habia sido agradable por eso no insistió con el tema.
(...)
Nosotros cuando habíamos planeado toda esta venganza, jamás habíamos imaginado que podíamos entrar a su casa tan facil, fue un regalo del cielo; por lo que tener micrófonos en ella era un gran paso, nos adelantábamos a cada acción y con la boda que sería cada vez más pronto, nuestro plan era favorecido por el destino.
Extrañamente aún no me había cruzado con Dereck el prometido de Cristina y tampoco había visto a Richard, este último se había alejado de todo el pueblo y su existencia había sido borrada en el árbol familiar.
Era como aquél mal ejemplo que no podia ser nombrado por nadie, muy pocas veces visitaba a su hermana y su madre... era considerado por Don de Sousa como la basura de la destilería.
(...)
No imaginaba que una semana después en la cafetería lo volvería a ver, entrando triunfante como la primera vez que lo mire en el colegio, pero esta vez usaba el cabello perfectamente peinado hacia un lado, una camisa azul celeste y un pantalón de vestir perfectamente planchado además que tenía un maletín en la mano e iba hablando por teléfono, acciones cotidianas que solo él hacia que lucieran como si fuera un comercial de perfume, no habia perdido su belleza que tenia de adolescente, mas bien ese aura masculina era lo que lo hacía más especial, sus hermosos ojos azules aún brillaban con fuerza, su cabello castaño y su barba recién afeitada incluso al caminar hacia la barra podía sentir el olor de su fragancia de afeitar... para estar rodeada de hombres, ninguno se comparaba con Dereck, nadie era igual a él.
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Sidra Envenenada +18
ChickLitRedville, Un pueblo dominado por la fabrica de Sidra más deliciosa del continente se encuentra a un paso de ser embargada, con apenas unos 1000 habitantes este perdido pueblo es el centro de la atención de unos hermanos que buscan algo más que un...