Capitulo 24- tumba de manzana♥️🍎

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A los días siguientes de la fiesta, mejor dicho de mi vergonzosa reunión, seguía  trabajando como normalmente hacia en el negocio del señor Bean  pero no todo era normal, había algo que me molestaba en mi mente y eso era la palabra "perdón " luego...

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A los días siguientes de la fiesta, mejor dicho de mi vergonzosa reunión, seguía trabajando como normalmente hacia en el negocio del señor Bean pero no todo era normal, había algo que me molestaba en mi mente y eso era la palabra "perdón " luego de ir a la fiesta de Dereck y salir huyendo encontrarme con Richard y pasear por bosque, al regresar caminando a casa junto a Richard.. me di cuenta que de verdad amaba con todo mi ser a Dereck pero de la misma fuerza que lo amaba... me sentía mal por ese sentimiento ya quería estar con él pero sabia que no podía hacerme daño así, torturándome mentalmente por lo sucedido, aunque él siempre trataba de acercarse a mi en el colegio luego de ese día ¿ Era fácil acaso perdonarlo? Me dolía tanto como me había llamado zorra en pocas palabras y el hecho de como solo quería sexo porqué si, con la estúpida escusa de que me acostaba según con Richard debía acostarme con él.

—¿lo vas a perdonar por que te envió un mensaje? —Preguntó Richard confuso.

-Si, pero... es que lo amo entiéndelo él es mi primer amor.. además, mira como estamos, cualquiera pensaría eso, él tiene...—

—¡no tiene!— Interrumpió Richard molesto.

—Yo lo aclarare todo...si es sincero como dice yo lo sabré.. – respondí avergonzada

—Pero...¿No has pensando en que existen otras personas que gustan de ti y no te das cuenta?— Preguntó sonriendo jugueteando con su osito de goma antes de comerlo.

-¿ Quién va a gustar de mi? ¿ me has visto?— Dije riéndome.

-Porqué te veo... lo digo....- eres hermosa eres.. — respondió con el rostro y las orejas sonrojadas.

—lo dices porque eres mi amigo, además ¿No tienes cosas que hacer?— Pregunte al ver la hora en el reloj de la pared del negocio.

—Cierto, otra cena incomoda familiar donde mi padre dirá que tengo que casarme con Cristina cueste lo que cueste... — respondió haciendo puchero —¿nos vemos luego? —Preguntó y yo asentí sonriéndole –¡ te amó Livy!— dijo haciendo un signo de corazón con sus manos y yo me reí girando los ojos.

— Y yo a ti tonto- respondi sonriendo agitando mi mano para despedirme

-¡No olvides de comer ¡– dijo mientras se alejaba, termine de cerrar la caja y me miré al espejo arrugando la nariz, tenía que arreglarme, me lavé la cara y Sali mirándo el papel que me había dejado Dereck en mi cuaderno.

"nos vemos en la esquina de tu casa a las 8", la guarde en mi bolsillo y comprobé la hora, tenia tiempo pense emocionada yendo a cerrar las puertas del negocio, y antes de darme cuenta sentí un golpe en mi cabeza al girarme vi el rostro de Cristina y como ella pudo me colocó un pañuelo en mi rostro con un olor fuerte que me mareaba

-¿Qué.. demo....?— Poco a poco se puso todo borroso a mi alrededor, ni el perfume caro que ella usaba se olía, solo ese fuerte olor.

Al despertar estaba atada de manos y pies en una especie de ffosa poco profunda con una manzana en la boca, sintiendo el olor de las manzanas dañadas a mi alrededor, reconocía mi alrededor era donde había venido la noche pasada con Richard, un sitio alejado en el bosque junto a un pequeño claro de agua que servía para mantener húmeda la cosecha.-

- Sorpresa amiguita. ¿Pensabas que iba a dejar que te revocara con mi novio tranquila? ¡Él es mío entiéndelo!— Gritó cristina molesta. Yo escupí la manzana y esta rodo por el suelo y la miré aterrada.

- ¡Yo no hice nada! ¡te lo juro cristina! Déjame ir Cristina, ¡te lo juró que no le diré a nadie!— Gritaba con las lágrimas cálidas en las mejillas... ¡maldita loca! Pensé frustrada por la situación donde había terminado.

—Yo te enseñaré a respetar, amiga— escupió golpeándome con la pala en la frente y sonrió — sigue llorando, ¡llora!.— exclamaba riéndose como demente para luego sacar de su bolso una pistola.

- Se la robe a mi papá en el estudio, él siempre me enseñó a eliminar a mis enemigos y jamás había sentido tanto valor como ahora— dijo ella apuntándome sonriente, senti el miedo helarme la sangre ¿acaso iba a morir así?

—¿ ultimas palabras? Nah, no importan— se burlo disparando a mi costado impregnándose de sangre inmediatamente mi ropa y ella sonrió.

- Adiós amiga,—dijo ella volviendo a disparar y yo cerre los ojos, ella se acerco y tomo la pala y empezó a lanzarme tierra...

—- un momento no.. las pistas —decía ella asustado y me llevo arrastrando hacia el claro, aquel bello vestido blanco que llevaba se había manchado de mi sangre y tierra, era mi última persona en ver al morir, aquella barbie de largos rizos dorados que caían sobre su rostro alargado.

- Mejor aquí, es para que parezca un suicido— dijo arrastrándome por el pie hacia el agua...

Y Allí me dejo, en el agua llena de tierra y de restos de manzana podrida.. flotando en ella boca arriba, pude escuchar el carro arrancar a lo lejos, me arrastre hacia la orilla con las pocas fuerzas que me quedaban empecé a salir de ese fangoso lugar, sintiendo un dolor muy grande a mi costado, con el olor de sangre y manzanas que me daban ganas de vomitar, arrastrándome cubriendome la herida de mi costado hasta la carretera y mire todo a mi alrededor.

¿Éste sería el fin para mi? ¡maldita Cristina! Lo bueno que no ella era la persona con menos puntería pero para mi desgracia hacia mi muerte mas lenta, cayendome en el frio asfalto mire al cielo buscando una ultima imagen de la luna... y estaba todo oscuro ¿ Ni una ultima visión de la luna? Maldito Dios.. me queje cerrando mis ojos.

Al despertar estaba en una especie de sala de hospital.

- ¿Que paso?— Pregunté mirándome conectada a varios cables y mire unos ojos conocidos, pero era tan difícil decir que era él-

- Hermanita, no me imaginé encontrarte así.— Dijo una voz masculina- ¿ hermanita? Mi vista se fue se aclarando más y miré al hombre a mi lado-

- ¿Oliver?— Pregunté confundida y él hombre desconocido me sonrió.

- jamás pensé encontrarse así. Yo solo iba a buscarte porque no podía dormir más con esta angustia y te encontré en la carretera cuando iba de camino a casa. Jamás imaginé que tu vida... fuera...— Dijo llorando.

Yo traté de sentarme y sentí el dolor punzante en mi costado.

—No hagas esfuerzo Livy..- me trato de ayudar y yo me lleve la mano al costado y suspiré.

—¿ seguro que no es sueño?— Pregunte al ver a mi hermano alli frente a mi... Había sobrevivido... y por fin me había reunido con él. 


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Sidra Envenenada +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora