Incubo y yo

capítulo 6 <<alimento>>

Han pasado dos semanas desde que Alessandro llegó a mi vida, y créanme que enseñar a un incubo los "deberes" de un familiar es muy difícil, y más si el incubo del que me refiero es Alessandro, simplemente no concibo el hecho que el destino haya querido un incubo cómo mi familiar....es detestable, narcisista, abusivo, me trata como si fuera la mínima cosa todo el tiempo y lo peor de todo...trata de tocar mis partes íntimas durante la noche, está situación me pone de los nervios, cada vez que lo veo me dan ganas de...HACERLO PEDACITOS CON UNA SIERRA ELÉCTRICA!!!...

-ahhh, definitivamente nunca me va a agradar este tipo.- me dije a mi misma en voz alta mientras me acostaba en mi cama

-Pues tienes que llevarte bien con él, es tu familiar y tendrás que convivir con el todos los días de tu vida hasta que alguno de los dos muera.- dijo penny que estaba atrás de mi escuchando mis quejas internas (si, mi hermana se destaca en "eso" de leer mentes)

-deja de andar leyendo mi mente, es molesto.- le dije un poco enojada

-pero no estaba leyendo tu mente tonta, hablaste en voz alta...prácticamente estabas gritando.- me dijo mientras me daba una ligera palmadita es la frente.- Ya te dije, llevense bien, recuerda que el trabajo principal de los familiares es el de proteger a toda costa la vida de sus amos, y si tu familiar es un incubo, mejor aún...ya no estarás sola en las noches.- me dijo haciendo una sonrisita perversa mientras salía de mi habitación.

Alessandro iba entrando y cerró la puerta con llave, en cuanto vi esto me tape con las sábanas, durante estas dos semanas, Alessandro se ha estado alimentando de mi energía, y no, no quieren saber como lo hace...(y tampoco quiero contarles, es tan vergonzoso que me pongo roja el sólo hecho de recordarlo)

Alessandro se subió encima mío y me quitó la sábanas de la cara y me besó, me quitó la blusa y me continuó besando...los primeros días me sentía violada y me resistía a más no poder e incluso lo golpeaba, hasta que mi abuela me dijo que está era la única manera de alimentar a los incubos y si me resistía alessandro moriría de hambre, así fui "convencida" a hacer esto.

-alessandro, ya para por favor...te estás propasando un poco...Ya, detente, DETENTE.- le dije casi llorando

-cállate! Sólo me estoy alimentando, no tiene nada de malo...

-claro que sí! Esté tipo de cosas sólo las hacen las personas que están enamoradas (Ya se, suena estúpido pero evitaba mencionarle a Alessandro el hecho que era Virgen, me daba pánico el sólo de pensar que me hiciera algo de más)

-deja de decir tonterías, esas cosas del amor, sólo fueron inventadas por ustedes los humanos para no quedarse sólos.- me decía mientras me besaba la espalda poco a poco, yo me sonrojaba a morir e inconscientemente empezaba a gemir del placer...esto estaba mal, muy mal, era lo único que no paraba de pensar mientras Alessandro besaba cada parte de mí...No pude evitar llorar, Alessandro se dio cuenta de eso y me besó mientras ponía esa sonrisa malévola, y me dijo:

-esta bien que pongas esa cara, después de todo eres mi alimento, así que...sólo déjate llevar...me siguió besando y poco a poco me empecé a olvidar de las tonterías que había dicho...
Ahora sólo quería que Alessandro entrará en mí...

¿que diablos estaba pasando conmigo? ¿acaso siempre tuve esta clase de deseos? No, desde que Alessandro llegó, empecé a tenerlos...habían pasado dos semanas

dos semanas interminables, pero...

también fueron dos semanas en las que, aunque me trataba de lo peor había empezando a...

¿encariñarme con él?

¡Ja! Tenía que ser una broma...

Alessandro comenzó a ser más tosco, ya estaba empezando a lastimarme...me empecé a resistir pero no tuve éxito, sólo conseguía lastimarme más...

Al final me dejé de resistir y cerré los ojos...dejándome llevar Alessandro comenzó a reír y me dijo:

-buena chica, sigue así amber...

Voy a llevarte a un paraíso que no tiene fín...