Incubo y yo

capítulo 33 <<castigo>>

Desperté y Alessandro ya no estaba en mi cama, pero aún podía sentir sus caricias sobre mi piel, su respiración sobre mi...

Y la sensación de cuando había entrado en mí

Me sonrojé y me tape con las sabanas rápidamente...

Tenía sensaciones encontradas, por una parte estaba feliz porque había hecho el amor con Alessandro...

Pero sentí que estaba traicionando a trevor...

Y lo peor de todo...

Nisiquiera sabía nada de él...

Tenía la sensación de que algo malo estaba pasando, después de todo, siempre que preguntaba sobre el todos, sin excepción trataban de cambiarme el tema
Ya había pasado un tiempo desde que había regresado al infierno y no tenía ni la más mínima noticia sobre trevor

Estaba preocupada...

Me vestí rápidamente y bajé al despacho de mi padre, antes de que tocará la puerta el me dijo que pasara, abrí la puerta y mi padre me saludó amablemente, correspondí a su saludo con un abrazo y me senté en el sillón que estaba a lado de un estante lleno de libros, se sentó a mi lado y me dijo:

-¿de verdad quieres saber donde está trevor?

Asentí mientras mordía mi labio inferior

-por favor padre, al menos dime que sigue con vida

Comenzó a reír

-el día en que tu cuerpo humano murió, trevor fue herido gravemente por un cazador, Alessandro también, pero como estaba contigo no sufrió tanto daño como trevor...
En fín, yo curé las heridas de trevor y lo dejé descansando en la habitación junto a la tuya

-¿entonces estuvo aquí todo éste tiempo?.-dije indignada
Mi padre bajo la mirada

-bueno...sobre éso.-dijo mientras reía nerviosamente

-¿si?

-Pues, verás...trevor despertó un día antes que tú, y en cuanto se enteró que "amber" había muerto y que tu alma siempre fue la de un demonio, enloqueció y desapareció del castillo, Alessandro, tu madre y yo incluso hemos estado buscandolo pero aún no sabemos dónde pueda estar...lo siento hija.-dijo en voz baja

-No Te preocupes padre, se que no querías hablar de trevor hasta tener su paradero confirmado...gracias.-dije con un tono de decepción

-y sobre ese tema hija...

-¿que pasa?

-Sabes que algún día tendrás que escoger a alguno de los dos ¿verdad?

Me quede en silencio y baje la mirada...

-sí, ya sé...después de todo...

Ese es mi peor castigo...