Incubo y yo

capítulo 10 <<sueño>>

Y sin darme cuenta había comenzado a llorar...¿porque estaba llorando? Ah, es cierto era por él...ese chico misterioso que parecía haber salido de mis sueños, trevor...por alguna extraña razón a ese chico parecía haberlo visto antes, sentía como si lo conociera de algún lado, lo único que quería en esté momento era ¿abrazarlo? Acariciar su cabello desaliñado con mis dedos, tener de cerca su cara con la mía...
-¿que cosas estoy pensando?.- me dije en voz baja, cerré mis ojos para dejar de llorar y sin que me diera cuenta ya me había quedado dormida...
.-¿señorita grace? .- me dijo al oído una voz demasiado dulce,abrí mis ojos y vi que no estaba en la escuela...estaba en una habitación lujosa de estilo victoriano, al parecer yo vivía ahí...
-señorita grace, ya es muy tarde, recuerde que tenía una cita con su prometido a las diez de la mañana.
Estaba confundida, no conocía a esta persona, era una mujer joven, como de unos 26 años, delgada, con caderas anchas y pechos enormes, al parecer era mi mucama, involuntariamente abrí mis labios y le dije:
-lo siento, julie...me quedé dormida.- dije tímidamente.
-no se preocupe.-sonrió. - aún así debemos darnos prisa, una chica de la realeza nunca llega tarde a sus citas, y más si su cita es con el señorito Edmond ¿verdad? .-me guiño el ojo.
Realmente no sabía lo que estaba pasando, yo no podía ejercer ningún tipo de control sobre este cuerpo, que "al parecer" era mi cuerpo, lo único que podía hacer era observar todo lo que acontecía, después de ver como "grace" era vestida por Julie, bajó al comedor principal (que era enorme por cierto)  a desayunar, yo...podía sentir lo que grace sentía, podía pensar lo que grace pensaba, pero por alguna extraña razón no podía hacer que mis brazos o piernas se movieran a mi voluntad, me sentía prisionera de mi propio cuerpo, en cuanto terminó grace de desayunar, se subió junto con julie a un carruaje y fueron a una mansión hermosa, con toques victorianos y góticos, Que al verlos se me hicieron tan hermosos y había quedado encantada en el momento en que la vi, en cuanto baje(estaba en el cuerpo de esta niña así que yo también vivía lo que pasaba) de la carroza, había una mano Que se extendió, y sonreí y la tomé, era la mano de trevor, o al menos ese chico se parecía muchísimo a trevor, me sonrojé un poco y le dije:
-perdón por haber llegado tarde edmond.
-no te preocupes, para ser sincero igual, yo me quedé dormido.- dijo sonriendome mientras bajaba la cabeza.
-¿como supiste que me había quedado dormida? .-le contesté sorprendida.- no te mencioné el porque había llegado tarde...
-¿Ya vez? Puedo leer tu mente....- me susurro al oido con una sonrisa de oreja a oreja.
-señorita grace.- me dijo julie en voz alta, sin darme cuenta la habíamos dejado atrás.- diviertase por favor.
-No te preocupes julie, cuidaré bien de ella.- le dijo edmond sonriendo.
Entramos a la mansión de edmond y tomamos el té, mientras organizabamos nuestra boda, grace se sentía feliz, ya que en dos semanas al parecer se llevaría a cabo su boda con edmond, el amor de su vida...en fín, el tiempo se les fue volando y cuando se habían dado cuenta ya había caído la noche, edmond le pidió a grace que se quedará esta noche en su mansión (en una habitación aparte claro está) y grace accedió, grace pasó la noche en casa de edmond, pero grace se metió por la noche en el cuarto de edmond, y pasó la noche con él (si, ya saben a que me refiero...no me hagan contarlo todo a detalle, es vergonzoso) en cuanto terminaron, edmond me dijo que yo siempre iba a ser el amor de su vida y que siempre iba a luchar por mí, estaba tan feliz que comenzé a llorar, al final se escuche una voz que me decía:
-¿amber? Ya terminó el primer pe!riodo de clase, ¿estás bien?.- era edmond, en un tono preocupado.
-Si, estoy bien, edmond...(un momento...le había dicho edmond, oh por Dios me confundí completamente...que pena)
Al escuchar que había dicho esto me sonrojé, y le pedí disculpas enseguida, me sorprendí mucho de las reacciones de Alessandro y trevor ante esto, Alessandro se levantó muy enojado y salió del salón, ¿habré hecho algo malo? Me pregunté mientras trevor notó que me preocupe por alessandro, me sonrió melancólicamente y me dijo:
-No hay necesidad de preocuparse, grace.
¿acaso seguía soñando? ...