Historias

3.7K 295 295
                                    

POV Calle

Llevaba haciendo el amor con Sofía desde hace más de dos horas

Dos horas que parecieron dos minutos por la velocidad en la que siempre se pasaban las horas cuando de estar juntas se trataba.

Ya había olvidado lo placentero que era hacer el amor con ella, pero para eso, siempre estaba ella, ella siempre podía aparecer y hacerme recordar todas estas sensaciones llenas de amor y placer que sentíamos las dos.

Sofía estaba a punto de llegar al clímax cuando un chillido proveniente de la puerta abierta me hizo reaccionar y detenerme.

─Ca...¿Calle?─dijo mi apellido aquella voz reconocida para mi. Sofía se incorporó con las piernas temblorosas quitándose de mi, saqué las manos de ella e inmediatamente la miré.

─Poché, mira, tengo cosas que explicarte...─dije haciendo señas pidiéndole que no se fuera. La pequeña actriz mantenía su boca abierta llena de asombro, sus ojos cristalinos y sus puños cerrados. Podía ver en su boca abierta el movimiento de su lengua frotando sus dientes intentando relajarse.

─¿Qué? ¿Qué fue lo que sucedió?...─preguntó sin dejar de mirarnos, primero a mi y después a Sofía. Era un tanto vergonzoso este momento, las dos desnudas, sudorosas y con el cabello y maquillaje hechos un desastre.

Pero ¿Cómo iba a saber que Poché se colaría en mi casa y me vería con Sofía en estas condiciones?

─Mira, seré directa y sincera contigo.─fui firme mirándola de lejos a los ojos, podía verla casi a la perfección por la luz tenue gracias a la lluvia entrando por la ventana.─Sofía y yo regresamos.─fui al grano.─Sofía es mi novia de nuevo, tu sabes lo mucho que la amo y lo enamorada que siempre he estado de ella.─el tono de piel de Poché se puso pálido, su semblante cambio a uno anonadado.

─Tu...Enamorada de ella y de mi...─empezó a decir cosas para ella misma moviendo sus manos.─Ella tu novia...─señaló a Sofía débilmente hasta que reaccionó un poco más.─Y yo...¡Hoy teníamos una cita! Y yo te iba a pedir que fueras mi novia al terminar la noche...─casi me gritó en la cara. Entendía su enojo por dejarla plantada en la cita que tendríamos esta noche.

─Lo entiendo...Perdón Poché, perdón por haberte ilusionado de esa forma, no fue mi intensión lastimarte, pero no puedo evitar no seguir enamorada de esta hermosa mujer.─respondí de la forma más tranquila que pude, sonreí mirando a Sofía quien solo se mantenía seria.─No puedo seguir sin estar con ella, porque ella me hace feliz, si lo entiendes, ¿Verdad?─pregunté haciendo que ubicara mejor la situación.

Poché comenzó a llorar ligeramente, como si no quisiera que la viéramos llorar, como si no quisiera que la viéramos de esa forma.

─Claro que lo entiendo, ¿Y sabes qué?─exclamó limpiándose las lágrimas con sus manos con furia soltando una pequeña risita sarcástica.

─¿Qué?─pregunté expectante mirando de reojo a Sofía atenta a la conversación.

─Vete a la mierda Daniela Calle.─escupió teniendo ese vomito verbal obligándome a abrir la boca más que ofendida.─Eres una completa idiota, eso es lo que eres y eso es lo que seguirás siendo gracias a la mujer que tienes junto a ti como novia.─esta vez señaló a mi novia.

─¡Hey! ¡Respétame y respétala a ella!─nos defendí casi poniéndome de pie, Sofía me agarró. No quería que me levantara desnuda, aunque era estúpido porque Poché conocía mi cuerpo a la perfección.

Poché se mantuvo con la cabeza agachada, más lagrimas corrían por su cara. Sus manos se posaban sobre sus caderas y sus pies firmes en la tierra.

POR SIEMPRE TUYA (CACHÉ)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora