Hija

Conmigo

Mmm bueno hace pocos días nos percatamos de una "historia" que la cuenta de "calleypoche" en la cuál se mostraba a la infante Kimberly.

Asientí confirmando la información que nos decía que a resumidas cuentas era lo que ya todos sabíamos.

Mami.- la niña que había estado quieta en mi regazo se levantó para hablarme suavemente al oído.

Quiero irme, tengo sueño.

No podemos irnos aún bebé, solo unos minutos más, si?.

Aburrida y sin ganas se sentó bien sobre mis piernas recargandosé en mi pecho.

Al fin!.- se escuchó como de repente se abrió la puerta.

Volteé mi rostro y divisé a una señora de un aspecto muy serio y formal, en cuestión de segundos Kim se levantó y como si fuese un soldadito se paró a un lado de la silla donde estaba.

Señorita Kimberly, es un gusto volver a verla...- se tomó un momento para analizarla.

Disculpen la demora tuvimos un problema con un neumático, señoritas buenas tardes.- saludó con educación de sobra.

Bebé, ven conmigo.- le dije tomándola del brazo, pues esta señora no me daba buena espina a lo que ella me miró con desesperación en sus ojitos.

Bebé? Ella no es una bebé señorita o acaso aún eres una bebé?.- dijo con una desagradable burla.

Qué absurdo, disculpé pero ella ya es una niña y debería tratarla como tal para evitar conductas infantiles problemáticas.

Podemos hablar afuera señorita.- dijo a la abogada interrumpiéndose a si misma antes de que yo pudiera decir una palabra.

Ella asintió, se levantó y se dirigió a la salida para después ser seguida por la otra mujer pero antes de hacerlo regreso acercándose a mi niña de nuevo.

Qué méritos hiciste para ganarte un vestido?... y señorita Kimberly tenemos que hablar de su larga cabellera también.- se lo dijo tan bajo que solo yo que estaba tan cerca de la niña pudimos escuchar para después darle un desagradable besoy compretar su acción diciendo.

"Me alegra que estés de regreso".

Apenas la puerta se cerró, su cabecita cayó aún más, suspiró pesadamente y miro su vestido, tocando cuidadosamente la tela en estilo victoriano, me miró y aquel brillo que yo había visto siempre ya no estaba, se había esfumado, pero a pesar de eso me sonrió y me percaté que ese ser humanito era la personita más fuerte que yo alguna vez haya conocido.

Mmm.- fue lo único sonido que hizo al estirar sus manitos hacia mi.

La cargué levantándola y meciéndola en mi hombro.

Poco tiempo paso para que aquellas regresarán y actuarán como si nada.

Bueno no creo que sea necesario todo esto, así que ahorrremosnos esto.- estiró sus brazos para que yo le diera a mi bebé.

No.

Porfavor, no lo haga más difícil.

Lo siento pero no sé la voy a dar.- me aferre a mi miquito dormido.

Usted solo la está malcriando, porfavor déjenos hacer nuestro trabajo.

Lo siento señora, pero esto se tiene que ser conforme a la ley y antes de entregarle a la niña que si es que eso sucede necesitamos investigar primero como es que la menor llegó a otro país en primer lugar.

Es todo.- dije mirándola con rabia.

Nos vamos Manu.- intenté salir pero la señora me detuvo del brazo.

No es necesario.

Disculpe, nos retiramos.- mencionó mi abogada defendiendome.

Hasta luego.- Manuela azotó la puerta.

¿Qué mierdas acaba de pasar ahí adentro!?.- Manuela hablaba alto justo cuando llegamos al auto.

Quizá querían solo ahorrarse el problema que seguramente sabrán que tendrán por este "incidente".- completó la abogada.

Dejé de escuchar su conversación y me enfoque en las facciones de mini Poché, sonreí por sus pucheros y a la vez me puse triste de que mi novia no estuviese aquí, la extrañaba, sus muestras de afecto, sus besos, su escencia, simplente su presencia.

Hoy la llamaría.

Le pediría perdón.

Y apesar de que no quiso venir a México, porque si lo hubiera querido ya hubiese estado aquí, quizá si fue más importante el evento...

Le diría cuánto la amo, porque estoy perdidamente enamorada de mi hermosa novia.

Pero para eso tuve que esperar hasta por la noche, cuando ya estaban todos dormidos por fortuna aún no era muy tarde y con Manu dormida en la cama de enfrente podía salir un momentico.

¿Poché?.- pregunté sin ver a mi novia cuando contestó.

Aló, alo, alo, aquí estoy.- escuchaba un sonido extraño y seguía sin verla

¿Dónde estás?, no te veo.- finalmente le dije

¿Qué?.

Voy amor, espérame tantito.- dijo con trabajos y ví una manga por una esquina

Ay juepucha...

Estás bien, ¿te pasó algo?.

No, no mi vida, solo me estaba quitando un jersey y me atoré.- final pude ver su bella carita.

Hay bebé.- Poché siendo Poché....

Poché... creo que tenemos que hablar...

Lo sé, lo sé y antes de que digas algo, lo siento, en serio lo siento mucho mi amor.

Poché no digas bobadas la que tiene que disculparse soy yo, no debí haberte dejado así como así, no debí haberme venido sin avisarte, haberte dejado así...- también la interrumpí

Desnuda y desprotegida...- tan boba.

Poché, es en serio.

Lo sé bebé.

Entiendo tu decisión de haberte quedado allá mi amor, pero te estoy extrañando mucho.

Oh mi vida, esa no fue mi desición, por mi hubiera llegado a México desde el momento en el que me enteré que estabas allá, pero cariño... no hay boletos dentro de dos días.

Ohh cierto.- golpeé mi frente.

Mierda, no te veré dos días?.- me arrepentí.

Así es chiqui.

Ay no bebé, yo te quiero aquí conmigo ya.- sonrió inconcientemente.

Lo sé nena, pero no nos queda más que esperar...

Soy una idiota, debí haberte secuestrado mientras dormías y traerte con nosotras.

Ahhh debiste, si que debiste...

Te amo.

Yo te amo.

No yo te amo.

Ah si? pues yo te amo más.

La miré, nos quedamos en agradable silencio mirándonos, diciéndonos lo que las palabras no podían, hasta que de la nada se sobresalto, asustandome.

21 febrero 2021.