©Night Club [ Jeon Jungkook +18] ✔

Capítulo Ocho: Cumpliendo las fantasías.

Nota: Contenido +18, pero igual sean bienvenidas.

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CAPITULO OCHO: Cumpliendo las fantasías.

Xia

Observa a Jungkook estacionarse a unos metros del río Han que estaba con poca gente, voltea a mirarla y ella esboza una sonrisa.

—Dije que quería verte. —Le dice y ella niega con una sonrisa.

—Estás viéndome, alguna otra cosa más que necesites. —menciona sin dejar de mirarle los labios.

—¿De ti? Necesito muchas cosas. —su pulso se acelera cuando Jungkook sostiene su mano— ¿Estás segura de esto? De sin compromiso.

Ella lo mira unos segundos y luego asiente.

—Veremos hasta donde llegamos, ambos buscamos lo mismo, y no tengo problemas —sonríe— ¿Tú?

Lo ve negar, y con eso entiende a donde llegaría todo esto, quizás lo que sienten el uno al otro solo es atracción y eso esta bien.

Siente cuando la mano de Jungkook sostiene su nuca para luego juntar sus labios, un beso suave al comienzo para luego ella misma tirar del labio inferior de Jungkook quien gruñe. Xia abre mas su boca dando paso a la lengua de Jungkook sacándole un jadeo, la mano de Xia empuñan la camisa, siente la mano de Jungkook apretar su cintura mientras la que tiene en su nuca apreta mas.

Entre gemidos y gruñidos ambos se separan.

—Debo detenerme porque no podré controlarme en este auto contigo gimiendo, Xia. —observa los labios inflamados de Jungkook y asiente.

Jungkook

Salen del auto, y antes de caminar él entrelaza su mano con la de Xia, quién lo observa curiosa.

Caminan en completo silencio unos segundos sintiendo la calidez de la mano tibia de Xia hasta que él mismo decide hablar primero y romper el círculo.

—¿Siempre te gustó la fotografía? —Le pregunta.

—Sí. Mi padre me enseñó y habló mucho de las fotografías. Él... era un buen fotógrafo. —puede notar la melancolía en su voz.

—No lo pongo en duda.

—¿Toda tú vida te viste en una oficina? —ahora era su turno de preguntar.

— Al comienzo no, pero luego la rutina me gustó más de lo que debería al igual que a ti con la fotografía y el baile.

Escucha una risa— Entonces somos dos adictos a lo que nos gusta. —Él la mira y ella también lo hacen unos segundos.

—¿Bailas por trabajo o por pasión?

—Ambos, pero más por pasión. Así también me pago mi carrera universitaria. Es un trabajo decente.

—¿Lo dices por algo es especial?

—Algunos piensan que al bailar también tendremos sexo con ellos. —muestra una sonrisa amarga.