El vecino de al lado (elrubiusOMG)

Capítulo 21

-Narra Rubius-

Me recosté en la cama de Carol nuevamente, la sangre me hierve en la cabeza y me duele, es verdad estoy algo borracho, pero que mierda acabo de hacer, a la única chica que se ha preocupado por mí la he mandado al carajo, le dolió lo sé, logre ver como sus lágrimas comenzaban a resbalar por sus mejillas antes de que dejara la habitación. Me levante y fui hacia la puerta.

*Y ahora que harás Rubén*

WTF?, ¿Quién eres tú?

*Soy tu hermosa conciencia, ¿Qué se siente haber hecho llorar a una chica tan simple y frágil como Caroline?, ella podría ser aquella chica que tanto sueñas, la que cambie tu vida y nos ame de verdad, a Rubén Doblas*

Lo sé, joder, ya vete y déjame pensar en paz.

¿Te callaste?, fue fácil.

Pensé que podría hacer o como hablarle a Carol después de aquello, no se me ocurría nada, por lo que salí del cuarto y la busque, fui al living y no estaba, la cocina, el baño y nada. Hasta que escuche leves sollozos desde una habitación, me acerque y pude oírlos mejor, era ella, estaba llorando y todo por mi culpa. Toque la puerta y no obtuve respuesta, trate de entrar pero estaba con llave, solo me quedaba suplicar.

-Carol, sé que estás ahí, por favor ábreme, tenemos que hablar-.

-...-

-Por favor... perdóname, fui un estúpido, es verdad estoy algo borracho y no sé bien lo que digo, pero por favor, perdóname y dime que estas bien, Carol, yo..., yo te necesito- dije lo más sincero que pude pero un silencio mortal tenía como respuesta.

Cuando mis esperanzas se terminaban, el pomo de la puerta giro y Carol apareció con un estuche entre sus manos.

-Date vuelta y vete a la sala- me dijo seca mirando hacia el piso.

-Carol por favor...-.

-Calla y camina ya- me gire y puso la palma de su mano en mi espalda empujándome para que avanzara.

Me senté en el sofá y ella se puso frente a mi sentándose en la mesita de centro, abrió el estuche con cuidado y me di cuenta que era un botiquín, saco el alcohol y bolitas de algodón, los unto y con cuidado lo acerco a mi cara, al mínimo rose rápidamente aparte mi rostro.

-Perdón- dijo con la cabeza agachada, aun su mirada no se encontraba con la mía –pero tengo que curarte, no puedo dejarte en estas condiciones-.

-Si no quieres, no lo hagas Carol-.

-Cierra tu maldita boca por favor y deja de quejarte ya- me miro directo a los ojos, me miraba fríamente como con odio, con sus ojos hinchados y rojos por haber llorado, yo solo me quede ahí aguantando el dolor que provocaba en mis heridas aquel algodón con alcohol que ella cuidadosamente deslizaba por mi rostro, aún así, cuidadosamente con amor.

*flash back*

-Pero Mangel ayúdame, no sé qué hacer, ella, ella es, no sé qué, cómo es que no la puedo sacar de mi cabeza-.

-Que te ha enamorao' tío, aceptadlo ya y lo peor es que aquella chica no es para ti-.

-Haberme enamorado, no, imposible hace años que deje eso de lado, el amor es una simple mierda, ¿y por qué no?, la tía muere por mí, como todas, igual podría tirármela de vez en cuando, es criaturita a ella le encantara-.