Love Foolish // MinSung

5

En cuanto llegaron a la dichosa fiesta, MinHo supo inmediatamente que ya quería irse.

Eran recién las nueve y ya había gente durmiendo en el jardín, el lugar apestaba a alcohol y cigarrillos, apartó la mirada de las fugaces parejas que se daban amor contra las paredes y se dedicó a empujar a un montón de gente que bailaba frenética mientras seguía a JiSung, el omega buscaba a su grupo de amigos y MinHo hacía lo mismo, había invitado a San y a Kevin con la esperanza de que no lo dejarían solo en esa tortura.

No lo malinterpreten, MinHo amaba las fiestas, no le gustaba la resaca y el dolor de cabeza que sentía después, pero de todos modos amaba las fiestas, el problema es que estaba ahí acompañando a Han y por eso quería irse, no sabía que esperar de las horas que estarían juntos.

Para su sorpresa, JiSung era realmente conocido porque cada dos pasos, ya habían personas universitarias saludándolo o guiñándole un ojo. Se detuvieron por un par de segundos ya que saludaron a Chan y a BamBam, quiénes le dieron miradas pícaras a Han al ver quién era el alfa que lo acompañaba, estaban al tanto del pequeño capricho que Sung sentía por MinHo.

—¡Allá están!—gritó JiSung por encima de la música, tirando de la mano de MinHo para encaminarlo hacia donde su grupo de amigos se encontraba. Lee los conocía a todos, pero solo de vista, nunca había entablado una conversación con ninguno y tampoco estaba interesado en hacerlo.

—¡Sunggie! ¡MinHo!—exclamó Felix cuando los vio llegar, le dio un corto abrazo a su amiga antes de entregarle a cada uno un vaso que contenía líquido desconocido.

—Thank you, baby—Sung le guiñó un ojo al australiano que sonrió antes volver a colgarse del brazo de un chico pelinegro que MinHo jamás había visto antes.

El resto del grupo comenzó a hablar de distintas cosas, pero Lee no acotaba nada y miraba cada diez minutos la hora en su celular mientras veía si alguno de sus amigos había llegado. Le envío un mensaje a Kevin, quién informó que iba camino al lugar, en cambio a San ni siquiera le llegaban los mensajes, así que llegó a la conclusión de que Choi no tenía internet en dónde sea que estuviera. Ya que tenía un vaso en la mano, simplemente por inercia lo llevó a su boca y dio un trago, no tardó en hacer una mueca cuando el líquido raspó su garganta, él bebía, pero eso estaba extremadamente fuerte.

—¿Esto que es?—volvió a hacer una mueca.

—No preguntes y solo gózalo, porque nosotros tampoco sabemos que es—Jacob respondió.

Aunque MinHo sabía que iba a arrepentirse de eso, aún así bebió de golpe lo poco de alcohol que le quedaba en su vaso. JiSung no demoró en pasarle otro, con una sonrisa decorando su rostro, necesitaba que el alfa se desenvolviera un poco y entrara en confianza.

—Un momento, ahora que lo pienso, ¿dónde está WooYoung?—pregunta JiSung al notar que su amigo no estaba ahí con ellos.

—Follando con un amigo de MinHo.

Eso logró llamar la atención del mayor, juraba que ninguno de sus amigos se encontraba ahí—. ¿Qué amigo?

—Uno de apellido Choi—acota JongHo, tragándose de golpe el contenido de su vaso.

—¿Choi San?—aventuró.

—Sí, ese.

Puso los ojos en blanco.

Eso explicaba por qué no le llegaban los mensajes a Choi. WooYoung se le había insinuado un par de veces a San, pero el alfa aseguraba que nunca pasaría nada con ese omega, parece que esta vez sí cedió.

—Bueno—dice Kim YoungHoon con sonrisita coqueta mirando hacia un punto fijo—, ha llegado mi chico que todavía no sabe que es mi chico. Con un poco de suerte, esta noche tengo algo de acción, me voy—informa para después irse detrás de un lindo omega que era compañero de clase de MinHo, se llamaba Choi ChanHee.