El gran día (parte 1)

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 - Ya todos tienen sus bonos??? - Pregunta gritando Mari - no quiero que se despisten estén todos atentos a sus llamados. 

 - Juli voy a morir - digo susurrando. Mis piernas se mueven frenéticamente a causa de los nervios y siento que mi parpado izquierdo empieza a temblar

 - Amiga cálmate, ya me estas asustando - da media vuelta y hace unas señas.

 - Así... qué. Necesitan ayuda??? - me sobresalto con el repentino comentario, este Tony es todo un personaje

 Le doy un empujón en el hombro, pero me sale más suave de lo que esperaba así que la actitud no hace más que hacerlo sonreír - tienes brazos de niña 

 El comentario no me molesta, pero me hace rabiar. Le doy un fuerte puñetazo en el hombro, lo que le saca un grito de dolor.

 - Auch!!! Bien bien. Me rindo, tu ganas princesa - dice levantando las manos en son de paz

 En eso se acerca Cris - Buen golpe Bel, oye cambiando de tema saltas en veinte minutos. Estas lista??? 

 - No lo está - responde por mi Juli

 - Claro que sí!!! - exclamo furiosa

 - No mientas, no a Cris

 - Cállate rata

 - Bueno Bueno. Que haya paz. Y no se metan con Belu desde que me lanzo la tostada en el desayuno, me he dado cuenta de que no es un buen día para ella.

 - Tu también cállate Tony - me defiende Cris - Vamos Belu, ustedes estén en las gradas atentos.

 - Gritare fuerte, te haremos el aguante desde aquí - comenta Tony con cara picara

 - Ni se te ocurra - lo señalo con mi dedo en pose amenazadora

 *   *   *

  El árbitro es el primero en hablar - Primera saltadora María Belén Sneyder, un metro veinte, se prepara Tamara Yablamseck

 - Tu puedes Belu!!! - escucho gritar a mis amigos

Respiro tres veces, corro, salto, pico y caigo en el colchón. Lo hice!!! Los aplausos de mis amigos y mi equipo me sacan una sonrisa

 Mi marca ha sido en metro cuarenta, ni más ni menos. Eh oído que hay chicas que saltan hasta el metro cuarentaicinco pero no me detienen. Salto en metro, treinta y trentaicinco. Lista para saltar el cuarenta. Mis pies tiemblan junto con mis manos. Mi espalda permanece recta en la línea. Ni la maliciosa cara de Sofía me detiene. Solo me impulsa la cálida sonrisa de mis amigos y los brillantes ojos de Cris alentándome simplemente con la mirada. Así que... corro, salto y pico.

 - Así se hace Princesa!!! – la primera vos que escucho es la de Tony exclamando con un loco, luego le sigue Juli y por ultimo Cris. Sí, eso somos. Un par de locos. Pero nos queremos.

 Corro hacia el límite de la pista, donde están las barandas que prohíben a los no deportistas a entrar. Y abraso a mis amigos desde allí. No puedo evitar echar una mirada hacia Sofí quien simplemente me amenaza con sus ojos color miel. Quien diría que su cabello rubio y ojos la convertirían en una engreída social. Además de ser una suripanta regalada de cuarta.

  Pierdo en el metro cuarentaicinco, mas no puedo haber dado. No lo he hecho muy mal. Mari me ha felicitado unas diez veces y Tony no deja de gritar como loco – PRINCESA, PRINCESA – en una de estas lo bajo con un puñetazo y lo logro callar de una vez por todas.

Cuando me dan mi puesto, mi emoción va en aumento. Quieren saber cual es?? Bueno se podría decir que soy la cuarta mejor saltadora de toda la provincia de córdoba.

  Es turno de Juli, debe lanzar el famoso disco. Para ser realistas está más tranquila de lo que esperaba. Al menos esta chica tiene temple…bueno debe tenerlo. No sé qué se siente lanzar dentro de una red gigante de protección sabiendo que tu tiro debe de ser certero, pero supongo que te temblarían hasta las orejas.

*   *   *

 La muy genia ha logrado mejorar su marca, estoy muy orgullosa de ella. Me dispongo a acercarme para abrasarla, cuando una mano se posa sobre mi hombro y me detiene. Es, Albert el otro profesor que también nos acompaña en el viaje para hacerle una ayuda a Mariam. Su cabello es color chocolate con rulos bien marcados, tiene ojos color ámbar y mide como un metro 85. Cualquiera se sentiría intimidado de no ser por la gran sonrisa afable que tiene todo el tiempo en sus labios. Lleva puesto unos pantalones deportivos negros y una campera Nike blanca junto con su típico silbato colgado del cuello (que por cierto jamás usa) y unas zapatillas Topper blancas que combinan perfectamente con su campera.

 - Que ocurre??? –pregunto indiferente

 - Ah ocurrido un accidente con Tiffany Rodrigez. Tú ya sabes que ella hace resistencia y que correrá dentro de media hora. Mientras hacia la entrada en calor le bajo la presión el y está muy mal. Necesitamos alguien que la reemplace. Y como tú también haces resistencia queríamos saber si te animas…

 - Es…solo que…- no sé qué responder ante tan repentino pedido – Claro que sí!!! Me encantaría!!!

 - Entonces prepárate. 

 HOLA!! AL FIN LOGRE SUBIR, LEANSE EL SIGUIENTE QUE PASARA ALGO MUY...BUENO LEANLO. VOTEN Y COMENTEN. BESOS

ANNIETRIBUTO

Superando las advercidades de una adolescenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora