Lovely Defects; ljn • nct

29 || Intentions

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Había pasado una semana desde que JeNo y yo terminamos y con ello el regreso a Seúl. MinJi y Natsu me dieron un gran sermón por no decirles nada de lo que estaba pasando, sin embargo, se encargaron de reconfortarme durante toda nuestra estadía. Lo que me preocupaba era JaeMin. No le había agradado nada lo que había pasado y a pesar de que se mostró comprensivo conmigo algo no estaba bien, se veía tenso, enojado.

Se sentía extraño regresar a casa sin la compañía de JeNo. No me atrevía ni siquiera a voltear a su salón. Pero si quería verlo, me moría por observar aquellos ojos bajo densas pestañas, su nariz perfectamente recta y sus labios finos y bien delineados. Desearía volver el tiempo atrás, en donde tan solo era una simple chiquilla enamorada del inalcanzable Lee JeNo, por primera vez deseaba volver a ser esa tímida e introvertida DaeRim que se escondía en el alféizar de la ventana para ver a su enamorado pasar por el pasillo.

Últimamente me sentía muy desconectada de la realidad, me quedaba en la biblioteca a leer por las tardes para despejar mi mente. Regresaba a casa sola bajo el atardecer y cuando llegaba me dedicaba a hacer la tarea para seguir despejando mi mente y al final ni siquiera bajaba a cenar. Solo me dedicaba a llorar bajo las sábanas hasta que el cansancio me venciera.

Tantas cosas pasaban por mi cabeza a todas horas que sentía que me hundía en ellas. Natsu, MinJi, JaeMin y DoYeon estaban más cercanos a mi desde mi ruptura y a pesar de que en verdad se esforzaban por hacerme sentir bien, yo solo no podía, es como si hubiera entrado en un trance. A RenJun no lo volví a ver desde aquella noche. Supuse que no quería interferir más.

Los días pasaban como una vieja cinta cinematográfica que se volvía a repetir cada mañana. Llegaba una nueva semana: un mes sin JeNo. Me sentía mejor. Mi llanto ya no era tan largo por las noches, lograba prestar más atención a mis amigos y volvía a disfrutar de las pequeñas cosas que me gustaban.

Aún seguía preguntándome si aquello era el final de nuestra relación. Quería hablar con él, debía afrontar mis problemas pues ahora reconocía que me había comportado muy celosa y que él no tenía la culpa de que yo no me considerará suficiente.

- ¡Que calor! -se quejó MinJi mientras se abanicaba con un cuaderno- Siento que me derrito.

- Creo que este va a ser el verano más caluroso de todo Seúl -dijo JaeMin mientras secaba con su mano el sudor inexistente de su frente.

- Son unos exagerados -se quejó DoYeon haciendo que Natsu y yo rieramos ligeramente.

Tan rápido había pasado el año. Estábamos a dos meses de terminar el primer grado de preparatoria. Bueno, para YeRim y DoYeon el segundo año.

- Deberíamos ir por unos helados después de clases -sugirió YeRim despegando su vista de su celular para ver a JaeMin y MinJi levantándose del pasto y asentir emocionados- . Pudieron haber dicho que querían ir por helado en vez de hacer todo su drama.

Todos reímos. Se sentía bien volver a sonreír. Estaba tan agradecida de tenerlos como amigos.

JeNo, me gustaría volver a ver tu sonrisa.

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La ví irse a toda prisa, su llanto se lo llevaba la brisa. No podías moverme, me había quedado estupefacto.