32 || Reflections pt. 2

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[♂️)

Salí de la enfermería sintiendo un peso menos de encima, pero al mismo tiempo una nueva carga, una opresión en el pecho que se esforzaba por reprimir mis impulsos. Una vez en el pasillo aceleré cada vez más y más el paso.

No podía regresar.

Huí de allí, de ella, me aparté lo más lejos posible para evitar actuar impulsivamente otra vez. Tenía tantas ganas de ir y abrazarla, decirle que todo entre nosotros estaba bien, iba a estar bien. Pero decirle aquello solo sería una mentira que lo único que haría sería entrarnos en una situación a la cuál tal vez aún no estábamos preparados.

Quise dejarlo en manos de DaeRim. Sabía que de alguna forma u otra había salido lastimada y no quería verme como un insensible egoísta. Comprendería cualquiera que fuera su respuesta y le daría el tiempo que necesitara para sí misma. Pensándolo bien, tal vez yo también necesitaba algo de tiempo. Jamás se lo dije a Dae, pero ella fue la segunda novia que tuve. No soy para nada un experto en el amor y mucho menos en las relaciones. Pero nadie nace siendolo y creo que en eso radican las primeras relaciones, en ir ambos aprendiendo cómo querer al otro.

Sin embargo, yo no solo quería aprender con ella. Yo quería crecer a su lado, verla cada mañana y tomar su pequeña mano mientras caminamos hacia donde sea que el destino quiera. Bien dicen que no aprecias bien lo que tienes hasta que lo pierdes y ya no está contigo. Tal vez me digan que soy un enamoradizo ingenuo que se ha encaprichado con un amor escolar que tarde o temprano tenía que terminar. Pero DaeRim se había convertido en más que eso para mí. Desde el primer día en que la ví en aquella biblioteca había llamado mi atención, como un pequeño cofre que de alguna forma estaba ansioso de abrir y averiguar lo que contenía. Y una vez que salí con ella no hubo vuelta atrás, me fascinaba estar a su lado y sentir como mi corazón se sacudía por descubrir más sobre Dae.

Pero igual por ello no me dí cuenta de lo mal que ella se encontraba. Me enfrasqué tanto en solo ver lo bueno de las cosas que ignoré por completo los problemas que se estaban formando a nuestro alrededor. Jamás me perdonaría haberle soltado la mano y confiar en SuRi.

Los días pasaron volando. Soñaba despierto con ella y divagaba entre qué era lo mejor para nosotros. Duele tener que separarte de la persona que amas, pero es más doloroso darte cuenta de que no quieres regresar con ella. No quería que me viera como el JeNo ingenuo y despistado que no podía mantener una relación, quería mostrarle todo lo que siento por ella y probarle que podemos funcionar, que quiero que lo nuestro sea hasta la eternidad.

Por ello cuando se me presentó la oportunidad de transferirme a las instalaciones del norte no dude en aceptarla. Me partía el corazón tener que alejarme. Jamás olvidaría la suavidad de sus manos, sus resplandecientes ojos bajo pequeñas y frágiles pestañas, sus mejillas abultadas y sonrosadas, y sobre todo sus rojizos labios que me llevaban al mismísimo cielo con un solo beso.

Angelito, dime que me vas a esperar. Porfavor, es lo único que te pido.

●•●•●

Las vacaciones de verano llegaron y con ello la mudanza a mi nuevo apartamento. Al ser trasladado a la escuela del norte de la ciudad mis padres decidieron que sería mejor buscar un apartamento cerca a tener que hacer un extenso recorrido de un poco más de una hora.

ChanHee había venido cada día a visitarme. Tenía suerte de tener a un amigo como él, claro que al principio se vió muy enojado y me dió un gran sermón sobre cómo lo había abandonado por SuRi. Ya ni siquiera quería recordarlo, solo me traía un mal sabor de boca.

- ¿Y cuándo vas a regresar? -me preguntó ChanHee quebrando el silencio que reinaba entre nosotros.

- No lo sé...

- ¡Vamos, hermano! Algo debes tener planeado -insistió el pelinegro para después seguir tomando su lata de refresco- Ni siquiera entiendo porqué debes irte... -musitó dejando todo en un pesado silencio.

Sonreí ante la preocupación de ChanHee, muy pocas veces mostraba lo que sentía y de cierta forma me alegraba que se estuviera sincerando conmigo.

- Necesito tiempo para pensar algunas cosas.

- Eso lo puedes hacer aquí sin necesidad de irte.

Negué con la cabeza.

- Estando cerca de DaeRim no puedo hacerlo... Ambos lo necesitamos.

ChanHee bufó y se dejó caer hacia atrás sobre la alfombra.

- La pequeñita si que te trae loco -soltó el contrario y tan solo pude ir echarme a reír.

- Eso creo.

Nos reímos un rato hasta que todo volvió a quedar en silencio, pero no era uno incómodo. Simplemente se sentía bien, demasiado bien, como si todo volviera a su lugar.

- La vigilaré por ti -soltó ChanHee de repente haciendo que volteara a verlo sorprendido- . No te preocupes, hermano. Ella va a estar bien -finalizó dándome un apretón en el hombro en señal de apoyo.

Asentí con alegría y le devolví el apretón en el hombro. Cuánto había extrañado pasar el rato con ChanHee.

●•●•●•●

Quedó algo corto este cap así que espero poder subir el que sigue pronto :)

Aaaaa me siento ansiosa por escribir ya los últimos capítulos ><

No se olviden que después del final habrá epílogo y una sección de curiosidades sobre el fic 💗

Cuídense mucho, nos vemos en el próximo capítulo (. ❛ ᴗ ❛.)

Lovely Defects; ljn • nctDonde viven las historias. Descúbrelo ahora