Maldito Crush 🧡|국민

🐰08 ♡ 팔🐥

Era viernes por la tarde...

MIERDA.

¡Era viernes por la tarde! ¿Cuándo pasó? Jimin no tenía idea, pero eso no importaba ahora.

¡¿Qué se iba a poner para ir a la fiesta con Jungkook?!

Corrió a buscar su teléfono, cayéndose de paso. Pero no importó en absoluto.

- ¡Taehyung! - soltó al borde de las lágrimas, a través de su teléfono.

- ¡¿Qué pasó, Jiminie?! ¡¿Qué ocurre?! ¡Háblame, por favor!... - rogó el peli-azul apunto de llorar al otro lado de la línea.

- Tae... cálmate, pareces desesperado. Deberías aprender a controlarte, respira - suelta Jimin tranquilo.

- Hijo de p...

- Sí, sí, sí. Ayúdame - pidió el menor interrumpiendo.

- ¿Por qué? - cuestionó.

- No sé qué ponerme para la fiesta - puchereó el rubio.

- Llego en cinco minutos, espérame bañado - espetó el mayor.

- ¡¿Qué me vas a hacer, pervertido?! - preguntó exaltado Jimin.

- Solo cállate y haz lo que te dije - ordenó.

- ¡Ah! Bueno... - cortó, y fue a hacer lo ordenado.

♡ 𝕄𝕒𝕝𝕕𝕚𝕥𝕠 ℂ𝕣𝕦𝕤𝕙 ♡
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- Veamos... esto me gusta... uh, esto es atrevido... definitivamente ¡Perfecto! - comentaba Taehyung, tirando ropa desde el armario del rubio.

- ¿Cuánto te falta?, he esperado media hora - se quejó Jimin, mirando fijamente al mayor.

- Ya casi... - recogió unos zapatos tirados, y los puso al lado de un conjunto - ¡Listo!

- Ay, no grites. Me asustas - hizo un puchero.

- Llorón - insultó - Pruébate esto, aún que se que me va a gustar - ordenó, señalando el outfit que realizó.

- ¿No importa que me guste a mí? - cuestionó un ofendido Jimin.

- Realmente, no - aseguró Taehyung, con burla - Tú te pondrías algo muy... ¿Cómo decirlo? - Pensó - Muy simple, Jimincito.

- Me ofendes, creí que tenía un buen gusto para vestir - puso su mano un su pecho mientras inclinaba su cabeza hacia atrás, dramatizando la situación.

- Sí, tienes un buen gusto - paró - Pero, no para fiestas - comentó divertido - Seamos sinceros, Jimminie. Con suerte sales a la esquina a comprar pan ¡Disfruta tu juventud!

- Dios, Tae... sonaste como mi abuelo - hizo cara de desagrado.

- Ni siquiera conociste a tu abuelo, Jimin - respondió, frunciendo el ceño.

- Já, tienes razón - se rió - ¡Voy a cambiarme! - tomó las vestimentas que eligió el mayor para él, y se fue a cambiar.

- Después te voy a poner bien bonito, wey - dijo Taehyung emocionado, sentado en la punta de la cama.

- No hables como mexicano, Tae; es extraño - gritó Jimin desde el baño.

- No manches, Marcos - respondió con "acento mexicano" - Está de moda, no molestes.

- Pasó de moda hace mucho tiempo, Taehyung - contraatacó el menor, gritando para que el peliazul lo escuchara mejor.

- AY, MEJOR VISTETE RÁPIDO - soltó furioso, cruzándose de brazos.