Maldito Crush 🧡|국민

🐰24 ♡ 이십사🐥

- ¿Taemin? - soltó, entre sorprendido y confundido. Sosteniendo la puerta principal de la gran mansión - ¿Qué estás haciendo aquí? - preguntó con el ceño fruncido, mirando al mayor frente a él.

El pelinegro sonrió apenado, con su cabeza gacha.

- Yo... - avanzó un paso hacia el menor, este retrocedió en consecuencia - Quería disculparme, amor - murmuró arrepentido, o eso creyó el rubio.

- ¿De verdad? - Preguntó curioso, y dudoso al mismo tiempo.

- Sí, cariño - sonrió, rogando que el menor lo perdonara otra vez - ¿Me perdonarás?

- ¿Por qué debería perdonarte, o siquiera hablarte? - interrumpió Jeon, poniéndose frente al menor dejando a este viendo su fornida espalda; encarando al imbécil de Taemin.

- No estoy hablando contigo, córrete - amenazó, empujando al castaño de su vista.

- No me importa. Es mi casa, imbécil - volvió a quedar frente al pelinegro, mirándolo amenazadoramente - No vas a entrar si no quiero, propiedad privada - empujó al más bajo de vuelta, y cerró la puerta en sus narices.

Jimin quedó petrificado en su lugar ¿Estaba viendo bien?

¿Jungkook le había cerrado la puerta en la cara a... su novio?

- ¿P-por qué hi-hiciste eso? - cuestionó estático, estaba confundido.

- Cómo que por qué ¿No es obvio? - preguntó ladeando su cabeza, con una sonrisa ladina - ¿Crees que voy a querer que vuelvas con tu noviecito así como así y que no me importe en lo absoluto? Obviamente voy a, al menos, intentar de que eso no ocurra...

- ¡Jungkook! - regañó furioso, su rostro estaba hirviendo de la rabia.

- ¿Qué? - soltó tratando de lucir inocente, fallando en el intento.

El menor le iba a contestar nuevamente dispuesto a gritarle a todo volumen, pero prontamente se volvió a escuchar el timbre de la casa. Interrumpiendo la rabia del rubio, se dirigió a abrir nuevamente la puerta esperando ver a Taemin, pero se encontró con un enorme ramo de flores junto a una nota en frente a él.

Lo recogió, y dispuesto a ver el contenido de la pequeña tarjeta fue interrumpido por Jeon, quien le quitó rápidamente el contenido de sus pequeñas manos. Impidiéndole ver su contenido.

- ¡Oye, pásamelo! - amenazó enojado - Jungkook...

- ¿Para qué? - dijo levantando las flores, para que así el menor no pudiera alcanzar - ¿No son relevantes, o sí?

- ¡¿Cómo que para qué?!.. son mías - reclamó, haciendo un puchero con frustración. Mientras ponía sus puños apretados a los costados de su cuerpo y pegaba pequeñas patadas al suelo.

- ¿Cómo sabes que son para ti? - cuestionó burlón.

- ¡Es obvio! - suspiró - Sólo... Dámelas - respondió resignado, amenazando a Jungkook con la poca paciencia que le quedaba.

- No, no te las daré. No soy estúpido para dejar que leas esta tonta carta de disculpa... - hizo una cara asqueada, observando las rosas rojas en sus manos. Jimin aguantó la pequeña risa que amenazó con salir de su boca.

- Es mi novio, y se está disculpando... es mi derecho saber qué dice - contestó más calmado, pasando su lengua a través de sus labios.

- Ah...- suspiró pesadamente, haciendo un puchero con su labio inferior.

Bajó lentamente el brazo, dejando las rosas en frente al rostro del menor. Aún con el puchero en su boca, bajó la mirada apenado.

No quería que su pequeño perdonara a ese imbécil, quería que le diera una oportunidad a él y solamente a él...